Bae se lanzó como una bolsa de patatas a la cama y soltó un bufido de molestia. ¿Realmente Rubén tenía que hacer un directo el día de su cumpleaños? Llevaba varias semanas planeando tener un día a solas con su novio y que mejor que pasar un día importante con la persona que amas. Inclusive había hecho turnos extras en el restaurante para tener el fin de semana libre. Parte de la mañana y tarde las había pasado con su familia. ¿Amigos? Bae no sabia que era eso. Nunca se le dio bien socializar y tampoco es que le molestara hacerlo. Con tener a su familia y a Rubén le bastaba para ser demasiado feliz.
Después de buscar mil dietas en Internet para entrar en ese ridículo vestido de cuero había logrado su objetivo. Pero aún así sentía que el cierre iba a explotar en cualquier momento. Maldito aliexpress, pensó mientras aguantaba las ganas de echarse a llorar. Realmente estaba loca al decidir llevar lencería por debajo de ese incomodo vestido.
—Es que me he puesto morada a pastel—bufó mientras ponía los ojos en blanco.
Con razón no cerraba tan bien... Ni siquiera Rubén lo había visto, pues Bae llevaba un abrigo grande para ocultar su forma mas reveladora. Parecía gótica con aquel maquillaje que había copiado en un intento fallido en youtube, ella solo quería sentir sensual ante los ojos de su novio. ¿Acaso eso estaba mal?
Bae notó como aquel rimel de pestañas barato le comenzaba a pasar factura. Tan solo sus ojos habían picado un poco a causa de sus lágrimas, pero le sumaba a que el producto se extendiera por el interior de sus ojos. Así que ahora estaba en todo su explendor de panda.
Se sentía tan ridícula, como en aquel capítulo de friends, cuando Ross llevaba esos pantalones feos de cuero... que pudo ponérselos a la perfección pero nunca más pudo volver a subirlos después de que le entrara el apretón.
—Cariño—escuchó su voz a la lejanía y el ruido de sus zapatos al caminar sobre el parqué.
—A la mierdaaaaaa—susurró Bae apunto de tener una crisis mental.
Rodó por la cama y trató de ponerse de pie pero era imposible. Sentía que iba a explotar. Rubén se plantó frente a la puerta y observó a una Bae con el maquillaje corrido, el pelo revuelto e intentando sentarse sobre la cama. Soltó una pequeña carcajada que hizo que Bae llorara con mas ganas. Se sentía fatal. Rubén borró la sonrisa de su rostro y se acercó hacia su novia a paso ligero. Pocas veces la veía llorar.
—¿Qué pasa cariño?—preguntó con tacto mientras la ayudaba a incorporarse.
Bae lloró más.
—Solo... quería... verme guapa.
Bae sorbió los mocos sin pudor y se restregó los ojos ante el molesto picor.
Rubén la miró conmovido y procedió plantar un dulce beso sobre los labios de su novia. Siempre la veía preciosa.
—Estás guapa.
—No mientas.
—No lo hago. ¿Por qué te has puesto eso?
—Quería seducirte como en las películas.
—A mi me seduces hasta con esas bragas de ositos que tiene un par de huecos en el trasero—dijo firme.
Y tan solo con eso logró robarle una risa a su novia.
—Están rotas pero son cómodas—alzó los hombros y río.
—¿Quieres que te deje un pijama?
Bae asintió. Rubén le dio otro beso y la ayudó a ponerse de pie. Él le bajó la cremallera y el vestido. Veía como el vestido había marcado en algunas zonas de su piel, hizo una mueca y soltó un suspiro.
—Quiero que te quede claro que me gustas tal y como eres, con kilos de mas o de menos. Con acné, estrías, celulitis y todo aquello que te acompleja... todo ello es realmente precioso para mí. Eres hermosa, Bae, no tienes ni idea de lo putamente hermosa que me pareces y lo mucho que te amo.
Bae soltó un par de lágrimas más y sonrío.
—Gracias—él negó con la cabeza y le dio otro beso—¿ahora podemos ir al baño a quitar mi maquillaje de gótica? Porque veo como mil Rubén con esta mierda de rimel del chino. Lo barato sale caro u know.
Rubén se río de ello y la condujo hasta el baño. Como la quería... y ella se sentía la mujer más feliz del mundo.
ESTÁS LEYENDO
[Rubius Imaginas]
FanfictionBae y Rubén. Diferentes situaciones con ElRubius. ¡Enjoy friend! Re subiendo porque un lector quiso♡