Emma se despierta temprano, bastante temprano ya que aún es de noche.
Emma siente algo cayendo por sus mejillas, así que inconscientemente las toca solo para darse cuenta que están húmedas.
Estuvo llorando.
Emma cierra los ojos y apreta sus puños con enojo.
"No pienses en eso, no pienses en eso Emma." Se repite mentalmente.
—Solo fue... un mal sueño.—se dice a si misma.
Emma se sentó y miro el pequeño reloj que se encontraba en la mesa, la cual está a lado de la cama.
Son las 6:30 de la mañana.
Emma suelta un suspiro; Podría seguir durmiendo esos 30 minutos o podría ir y bañarse para empezar con su día.
Después de unos segundos se para de la cama para ir al baño privado que está en su habitación.
Antes de ir al baño se acerca a las 5 cunas que están en hilera al frente de su cama.
Revisó a los pequeños de solo 1 año de edad, al verlos no puede evitar sonreír.
"Mis pequeños." Pensó Emma con felicidad mientras le acariciaba el cabello a uno de los niños.
Emma revisa que los 3 niños y las 2 niñas aún estén durmiendo y que no vayan a despertarse por algún razón para después ir al baño.
Antes de entrar se acercó al armario y saco la ropa que hay había para después entrar al cuarto.
Emma dio el agua caliente en la tina y se quitó la bata con la que dormía y se metió adentro.
El agua caliente la hizo sonreír solo un poco para después bañarse rápidamente y poder ver a sus niños.
A sus amados niños, los niños que ama más que nada en el mundo.
Más que su vida.
En solo 10 minutos Emma ya está lista.
Esta bañada, su cabello estaba seco, ya estaba vestida y sonriendo.
Emma se mira en el espejo que está en su baño y antes de salir ve su cuello.
El número que está tatuado en su cuello no se va a borrar nunca.
Y lo sabe.
Emma niega con la cabeza, se arregla el cuello de la ropa y sale del baño para ver a sus niños.
Al salir del baño escucha unas risa infantil e inocente, Emma emocionada se acerca al bebé.
—Hola Christian.—dice sonriendo mientras observaba al pequeño bebé de solo 1 año.
El niño mira a la mujer y sonríe mientras que en sus ojos se refleja el rostro de la mujer.
Emma ve la ropa que llevaba puesto y da un gruñido de manera inconsciente.
—Tu hermana te puso esa ropa mi pequeño.—le dice Emma mientras carga al bebé para cambiarle esa ropa colorida a la clásica de color blanca.
Emma lo acuesta en la cuna, se acerca al armario y saco un conjunto blanco.
Emma carga a Christian y lo acuesta en su cama, le cambia la ropa en cuestión de segundos, el bebé la conoce bastante bien como para evitar dificultar le la tarea.
Emma lo carga y revisa al resto de los niños, por suerte el resto lleva ropa blanca así que acuesta al niño en la cuna y lo mece suavemente, ve en silencio como el niño se vuelve a dormir.
Emma sale de su habitación sin hacer ruido, camino por un pasillo hasta llegar a una puerta al final de pasillo, la abre y sube unas escaleras de caracol.
Llegue rápidamente a la campana y la hace sonar por algunos segundos.
Cuando sabe que sus niños están despiertos baja en silencio por esas escaleras.
Sale de esa pequeña habitación y escucha las voces, los pasos y las risas de sus niños.
—¡Mamá!—grita una pequeña.
Emma sonriendo se da la vuelta y recibe gustosamente el abrazo de la niña.
—Hola Annie.—dice Emma mientras se agacha hasta quedar a la altura de la niña de 11 años.
—¡Buenos días mamá!—dice Annie sonriendo y Emma la vuelve a abrazar.
—Buenos días Anna.—dice en un susurro que la niña no escuchó claramente.
—¿Qué?—le preguntó Annie a Emma.
—Buenos días Annie.—es lo único que dice Emma mientras le da un beso en la frente.
Emma termina el abrazo y Annie le agarra la mano.
—Iré a buscar a tus hermanos y hermanas.—le dice Emma a Annie
—¡Yo te ayudó!—dice la pequeña sonriendo.
Emma la mira y no puede evitar pensar en Anna.
Ambas con cabello rubio, ambas con trenzas excepto que Annie se hacía una cola de caballo y la trenzaba, ambas con piel pálida.
Pero Annie tiene ojos verdes.
"Annie no es Anna y nunca lo será ya reacciona Emma." Pensó Emma mientras camina junto con Annie para ir a buscar a los bebés.
En el pasillo Emma le sonríe a sus amados niños, los abraza, los carga por alguno segundos y le da beso en la frente y mejillas.
Emma no puede evitar alegrarse.
Al llegar a la habitación Emma ve como Annie se acerca a Christian.
—Hola Chris.—saluda Annie mientras le sonreía al bebé.
Al oír el apodo del niño Emma no puede evitar pensar en un pequeño de cabello azul que le sonreía.
Pero se da cuenta rápidamente que no son la misma persona.
—Vamos Annie.—le dice Emma a su amada niña.—Carga a Christian y a Carolina.
—¡Sí!—dice Annie sonriendo mientras que Emma le entrega el bebé pero al hacer esto Emma siente que su respiración se detiene.
Ve una imagen, solo por unos segundos ve a Anna corriendo y entre sus brazos esta Chris pero igual que antes se da cuenta que son Annie y Christian caminando a su alrededor felizmente.
—Vamos a despertar a Carolina.—le dice Emma a la niña.
Emma se acerca a la cuna que estaba a lado de la de Christian.
Las cunas estaban ordenadas siendo un niño, una niña, un niño y una niña.
Emma se acerca a Carolina y ve a la niña que está dormida, la carga con delicadeza y por unos segundos en vez de ver a una niña con cabello castaño ve a una pequeña con cabello rojo.
Pero se dice mentalmente que esa niña no es Carol.
Ninguno de esos niños son sus hermanos o hermanas, ellos son sus amados niños.
ESTÁS LEYENDO
Mis amados niños (Yakusoku no neverland)
FanfictionEmma ve en shock como Mamá le rompe la pierna a Norman. Emma escucha en silencio como Mamá le dice que llegó la hora de su recogida. Emma sabe que es su final y está triste, no por que vaya a morir si no por que ya no podrá ver a su amada familia y...