Demon's Witch.

XIX

Jungkook no lo notó en el espejo esta mañana. Por que no si quiera se miró.

Había despertado sobre su cama. Lo último que recordaba era el rostro invertido del demonio.

Se sentía extraño. Era como si el dolor de su cuerpo se hubiera esfumado. Sus piernas tenían energía. Pero era... Simplemente raro.

Los compañeros de su salón lo estudiaron mientras entraba por dos razones.

La primera es que se había ausentado por una semana.

La segunda, es que su apariencia estaba distinta.

Su cabello seguía siendo lacio y negro. Pero la forma en la que caía sobre su rostro pero sin cubrir demasiado era... Diferente.

Sus ojos seguían siendo negros como el carbón, pero la forma en que penetraban con una dura mirada, lo vacío que estaban y absorvian todo a su paso, no existía antes.

Su porte seguía siendo delgado, y no tan alto. Pero la forma en que se erguía frente a los demás sin dejarse intimidar. Era distinta.

Jungkook siempre ha sido un chico callado. Era discreto e intentaba pasar desapercibido. Pero por cuestiones que bueno, trataremos después.

El siempre supo que no era bueno para relacionarse con otras personas. Y había aprendido a estar sólo.

Sólo y con su imaginación.

"sólo es su imaginación. El niño se crea compañía por estar solo".

Eran esas dudas las cuales te carcomen la cabeza pero no quieres saber la respuesta.

O quizá la sabes. Pero es mejor evadirla y fingir ser estúpido.

Jungkook se sentía ligero. No tenía esa constante preocupación de el por qué los demás lo miraban.

Ni si quiera lo había notado.

Y hubiera seguido así de no ser por que Taehyung se acercó a susurrarle.

-Jjeriulshi, te miran demasiado - le dijo.

-¿es así? - se giro, dándole una mirada despectiva a él pequeño público que tenía, fue involuntario.

Taehyung esperaba su respuesta atentamente.

-las miradas de esos humanos no influyen en mí. - respondió mirando al profesor que iba entrando al aula mientras.

Taehyung sólo pudo sonreír.

Pero fue en la hora del almuerzo que sucedió.

Ambos habían acordado mantenerse en el salón de clases para almorzar.

Jungkook sentía sus muñecas bajo las mangas de su camisa negra picar y arder. Pero no pudo proceder a mirar lo que sucedía por que unas personas entraron al aula.

Eran sus amigos. Jimin y Yoongi, a su lado estaba Jin, Namjoon igual.

-Hey Kook... ¿Está todo bien? - preguntó el de cabellos morados y espalda ancha de una manera ardiente observando al pelinegro.

Jungkook sólo asintió. A pesar de que los miraba desde abajo. La mirada de Jeon era tan intimidante.

-Has faltado. Y ya no nos hablas. Estás extraño,mas de lo normal. - le dijo el rubio.

Taehyung obsrvaba la escena con detenimiento.

-No es nada. Estoy excelente - aseguró el chico.

-Si es así, habrá una pijamada en mi casa. Al rato, te esperamos allí - le invitó el joven de hoyuelos hermosos.

-No voy sólo - dijo haciendo referencia a Taehyung que no hablaba y los demás pensaban ignorar.

Los demás hicieron una mueca, pero ante el semblante del menor. No estaba pidiendo permiso para llevar al demonio.

-No quiero ir- dijo acompañado de un puchero.

Y ahí estaba el lado mortal y humano de Jungkook. Nunca dejaría de ser un bebé mimado por Taehyung.

-Hubieras dicho que no, ahora no puedes cancelar. - le dijo taehyung. Observando desde su trono como el mortal guardaba su pijama en una maleta.

-Claro que puedo. Siempre lo hacía - reclamó golpeando el suelo con un pie, en una pequeña rabieta.

-No, ya aceptaste, no puedes contradecirte. Ven Hassiljje di, - le hizo una seña con las manos. Jungkook de inmediato acató la orden. Arrodillandose a un costado de la piernas del mayor como ya era costumbre

-Jjeriulshi- llamó acariciandole el cabello. Mientras Jungkook recostada su cabeza sobte uno de los muslos ajenos.

-Suena muy lindo ese apodo. Yo también quiero tener uno para tí. - le dijo el menor mirándolo con ojos espectantes.

-llamame Ssurjjeshi- le sonrió.

-Ssurjjeshi - repitió - bien ¿podemos hacer algo antes de irnos? - le propuso.

-No Kook, no podrás caminar. - le dijo divertido.

Jungkook en cambio no aceptó ese no como respuesta. Se colocó entre las piernas del mayor y frotó su cabeza y rostro casi con amor en la entrepierna de Taehyung.

Taehyung sólo lo observó. Mientras el menor esperaba la aprobación del mayor para sacarlo de sus pantalones.

El demonio tomó un cigarrete y lo encendió con sus dedos. Tomando una calada de él y expulsandolo hacia el techo.

-Adelante. Witjje- cedió.

Los ojos del mortal se encendieron en deseo mientras bajaba la cremallera de la elegante ropa de Taehyung.

Miró atento a sus propias manos sacar al mayor de su ropa interior.

Lo engulló gustoso, sintiendo el aroma a cerezas del humo negro golpear en su rostro unas cuantas veces.

Se perdió la forma en la que su cicatriz en forma de semicírculo con las puntas hacia arriba se miraba tan bien.
Era una especie de tatuaje, al igual que el hermoso pentagrama sobre su espalda. Y el parecido a un anillo que rodeaba su dedo anular.

Y Taehyung se burló por que el menor no tenía ni idea de lo que había hecho con él. De cualquier manera el pacto tiene años de que se hizo.

Hola feliz año 20x2 jajajsj que loco.
Ayer estando ebria. Hice una especie de diccionario de diardelónico jajshaj y bueno lo subiré por que es necesario quizá y confío en mi yo ebrio.

Sonrían muchoo quizá cambie la portada del libro de nuevo uwu.

Si hay errores lo sientooo