Capítulo 19

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—¿Qué?

No podía creer lo que había dicho, sentí que era una de sus mentiras o tal vez, una manera de distraerme.

—Lo acabo de descubrir también. —siguió hablando, en voz baja, si borrar su fruncido y aún, dejando escapar algunas lágrimas.

—No tiene sentido lo que dices. Seguramente es una foto que tomó de mí y la colocó ahí por casualidad, yo qué sé. —seguí hablando.

—No, Ángeles. No es ni una broma estúpida, ni mucho menos mentiras o coincidencias. —vociferó.

—¡No creeré nada hasta tener una prueba más concreta! —repliqué—. Una simple foto en un estante no significa nada.

Me di la vuelta y salí de la habitación. Regresé a donde estaba Snow, y me di cuenta de que comenzaba a moverse, me acerqué y  le quité los trapos que tenía puesto. Intentó sentarse, y lo ayudé, poniendo almohadas detrás de su espalda.

—¿Qué...? —su voz rasposa y su aliento de menta y cigarros chocaron contra mi rostro, gracias a la cercanía.

—Te desmayaste. Presentabas fiebre alta. —informé, con voz neutra. Toqué su frente con cuidado, la fiebre ya había bajado, y su temperatura era medianamente normal.

—Oh, ¿en serio? —no sonó tan soprendido; eso me dió a entender que anteriormente, seguro en nuestra ausencia, ya había presentado síntomas similares.

Pasó a ser entonces un momento de silencio, el cual pretendía aprovechar.

—Snow...

De no ser por el precioso de Athen, que entró como rayo a la pieza, furioso.

—¿Lo sabías, verdad?

—Athen, por favor, ahora no. Acaba de despertar... —amenacé, pero me ignoró.

—Sólo respóndeme eso, ¿sabías que Ángeles es la reencarnación de Celestine?

—Me enteré hace poco. —dijo entre dientes, Snow.

—¡Te enteraste hace poco! —habló con impresión falsa—. Qué coincidencia.

—Ella es la afectada y aún así no parece importarle tanto. Así que, ¿por qué me armas un brollón tú? —me señaló con la cabeza y luego miró con recelo a Athen.

Me puse de pie.

—Que no esté ahorcandote justo ahora no significa que no esté molesta, o que no me afecte. —dije con la molestia palpada en mi voz.

—¿Ahorcarme? —una sonrisa pícara se expandió por sus labios, y yo hundí más mi ceño.

—Suficiente, lo voy a matar.

Athen intentó lanzarse a Snow pero lo detuve a tiempo, regresandolo.

—Por lo que veo, te siente bastante mejor, ¿no? —pregunté, furiosa—. Dame una explicación lógica del porqué tienes una fotografía de mí junto a las de Celestine.

—Pensé que era obvio —dijo, poniéndose de pie, hizo una mueca; pero mantuvo su compostura—. Aunque... siendo honestos, eres distinta a ella. Muy distinta. Ella es... ¿cómo decirlo? Mejor, más...

Quedé tiesa como estatua ante sus palabras. ¿En serio estaba insinuando que ella era mejor que yo?

—Sé que cualquiera es mucho mejor que yo. —le aclaré, interrumpiendo su charla, rezando para que mi voz no se rompiera— Pero no hay necesidad de que me lo eches en cara, ¿sabes? Además, si te equivocaste de Celestine como insinúas, ¿por qué te esfuerzas en retenerme? ¿Qué demonios hago aquí, entonces?

SNOW  [S.S #05].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora