Fairy Tail - Historias de Altamar, la hermandad Heartfilia

Capítulo 13: Levy McGarden, Maga de Fairy Tail

Flashback / Dos años antes / Fairy Tail.

-¿Estás bien enana? Has estado muy callado y muy distante.- Cierto Dragón Slayer de hierro estaba preocupado por Levy, quien estaba en una mesa con un montón de libros y escribiendo en su diario, su mirada está perdida y se veía que no había dormido para nada, no hasta que pudiera encontrar una pista, solo una, ignorando por completo a todos en el gremio, a Jet y Droy y a Gajeel con el que tenía una relación algo complicada aun sin poder aclarar bien sus sentimientos, por otra parte Gajeel estaba preocupado por Levy de que no pronunciara nada, comía poco y más que de costumbre metida en sus libros. La susodicha solo hizo caso a las palabras del moreno pero no volteo a verlo.

-Estoy bien Gajeel, gracias por preocuparte.- Levy fue cortante y seria, algo nuevo en ella y de mala manera aceptada por el Redfox, a Gajeel no le gustaba esta faceta de Levy, el quería de vuelta a la chica que sonreía y que se preocupaba por los demás, el moreno solo se limitó a abrazarla mientras que de manera involuntaria la peli azul dejo de escribir en el diario.

-¿Es por la coneja verdad?- Gajeel había dado en el clavo del asunto, él era uno de los pocos, quien estaba buscando a Lucy desde su repentina desaparición aunque él cree que no fue casualidad y ha estado buscando por su cuenta a costa de los demás, pero ver a Levy así le torturaba, así que haría todo lo que fuera y tenía que hacerla sentir mejor, por sus medios claro está.

-Mira, sé que te preocupas por ella, pero ella no es una debilucha, sabe cuidarse sola.- Gajeel trato de reconfortar a Levy, diciéndole las virtudes de su amiga, su mejor amiga quizás lo más cercano a una hermana y de inmediato Levy no aguanto más y rompió en un llanto silencioso audible para el moreno, la maga del Solid Script termino por abrazar con mucha fuerza a Gajeel correspondiéndole el abrazo con sutileza, Levy recargo su rostro en humedecido por sus lágrimas en el pecho del Dragón Slayer, estaba destrozada y lo único que quería, era que las cosas fueran como antes.

-La extraño Gajeel, la extraño.- Levy lloraba en silencio a lado de Gajeel haciendo que el corazón del Redfox se suavizara, ahora solo tenía que proteger a Levy y encontrar a Lucy, sin importar lo que le costara pero por ahora, solo tenía que reconfortar a la peli azul.

-Tranquila, sé que volverá, ella no se alejaría de este lugar por mucho tiempo.- Dijo Gajeel muy convencido de que las cosas no eran una mera coincidencia y él estaba atento a la situación, el aislamiento de Lucy con su equipo y su expulsión, las constantes veces que Salamander estuvo muy pegado a la albina de cabello corto y las veces en las que ella ha hablado a espaldas, el quería intervenir para ayudarla ante esas horribles palabras pero Lucy siempre lo detuvo, según ella, no quería que se metieran en sus asuntos, eso ya le preocupaba a Gajeel.

-Pero ya paso más de 4 meses y nunca carta ninguna pistas de su paradero, a veces pienso que Lu-Chan no volverá.- Levy comenzó a imaginar lo imaginable, el cruel destino que Lucy estaba a punto de pasar, ¿Qué pasaba si estaba perdida? O aun peor. No quería imaginarse lo que le pasaba a su amiga rubia, el moreno decidió que era tiempo de actuar, pero ya no solo, en estos momentos tenían que estar juntos, no la iba a dejar sola y mucho menos ahora que necesitaba a su amiga.

-Entonces nosotros vamos a ir por ella.- Gajeel se levantó de su asiento con la determinación suficiente para traer justicia, Levy solo pudo ver aquel acto tan honorable de Gajeel pero aún tenía sus dudas, hasta el momento en el maestro no le había dicho nada con respecto a su amiga, Gajeel si lo sabía, era uno de los pocos junto con el equipo Natsu y Juvia.

-Pero el maestro dijo que...

-¿Tú crees que a mí me gusta seguir las reglas? Vamos, si es necesario llamaré a Lily para que nos ayude.- Gajeel interrumpió las palabras de la maga peli azul para comenzar a caminar lentamente, ella eventualmente tomo su diario y camino junto a él saliendo del gremio para sorpresa de todos, pero todos siguieron en los suyo, aun así tendrían unos problemas.