Fairy Tail - Historias de Altamar, la hermandad Heartfilia

Capítulo 10: Problemas II

River Yun.

-¡Nidia! ¡Nidia!- Cierta maga celestial rubia estaba gritando por toda la isla de los piratas, lugar que solo los capitanes sabían de su existencia, buscando a la primer oficial de la Venganza de Santa Lucia, quien había tenido una pelea con su propio hermano por un malentendido, Lucy mientras caminaba por la isla pudo notar que varios piratas no solo la observaban, sino que también le daban un saludo cálido y estaban preparándose para la celebración del festival anual de los piratas: Black Sails.

Precisamente preparando velas negras, fuegos artificiales y más cosas en las calles mientras que la maga celestial buscada a la castaña para poder hablar con ella y explicar las cosas con más calma, incluso llegando al puerto donde estaba el barco de su hermano y pensó que quizás estaba ahí por lo que fue corriendo a la cubierta para poder localizarla, para cuando subió a la cubierta, se encontró a un Evans relajándose en una silla disfrutando la brisa del viento pero presencio la llegada de Lucy con naturalidad y a la vez sorprendido por ver a la rubia llegar sola sin los demás.

-Evans, ¿Puedo hacerte una pregunta?- Dijo inocentemente Lucy al pelirrojo de cabello alborotado mientras este se acomodada en su silla para verla a los ojos sin que cruzaran con sus atributos.

-Claro Lucy, tengo todo el tiempo del mundo si me lo preguntas, no han llegado ni Hayes ni Rin, Michelle está en la barra limpiando y apenas yo termine de reparar el barco ¿Qué necesitas?- Pregunto el mago del elemento madera con mucha calma mientras jugaba con una moneda de oro.

-¿Has visto a Nidia?- Cuando Lucy menciono ese nombre, Evans se quedó frio y tiro la moneda al suelo, incrédulo de escuchar eso, Nidia era responsable y ella no se iba a ningún lado a menos que fueran órdenes del Capitán por lo que también se interesó en el paradero de la castaña.

-¿No está con ustedes?- Pregunto el pelirrojo para poder conocer la razón de la búsqueda de Nidia mientras que Lucy solo reflejo una mirada algo incomoda.

-Ocurrió un malentendido con esa chica llamada María y tengo que encontrarla- Evans entendió entonces la magnitud de la situación, sin reflejar una sonrisa en su cara, más bien, pasando a una seria.

-Ya veo cual es el problema Lucy y te recomiendo que dejes a Nidia sola si es posible.- Evans fue concreto con la rubia quien se sorprendió de la actitud de Evans.

-¿Cómo dices eso Evans? Si hubieras visto que paso, no estarías diciendo eso ahora.- Dijo Lucy algo alterada con el pelirrojo y no era para menos, pero detrás de las palabras de Evans, había mucho más.

-Lucy, conozco a Nidia desde hace ya tiempo y te digo que su molestia con María es muy personal para ella, prácticamente ella se siente muy incómoda con María, es una rivalidad muy personal y si algo hace enojar a una, pues es mejor no molestarlas.- Evans fue directo nuevamente con eso pero Lucy no iba a aceptar esas palabras de él y se fue del barco para continuar su búsqueda, pero no sin antes decir unas palabras.

-Evans, Nidia es tu compañera, tu amiga y no puedo creer lo que dices, ella puede necesitar ser escuchada...espero que tu corazón no sean de madera.- Lucy salió de la cubierta del barco para seguir en tierra su búsqueda dejando a Evans sorprendido por las palabras francas de Lucy, pero aun había mucho trasfondo en los pensamientos del mago pelirrojo.

-No es eso Lucy, es solo que...me preocupa demasiado Nidia, pero no puedo decírselo, no mientras tenga esa barrera de acero con ella.- El pelirrojo hablo solo mientras estaba jugando con la moneda de oro pero sin darse cuenta que cierta chica rubia estaba oyendo en una parte solitaria de la puerta, entonces la susodicha reunió las piezas de un...mal de amores.

"Entones Evans quiere a Nidia, pero ella no ¿O tal vez es por otra cosa? Tendré que ayudarlo"

De vuelta en tierra, la maga celestial continuo buscando a un paso lento mientras disfrutaba el clima caribeño del lugar con su melena rubia agitado por el viento mientras se preguntaba donde encontraría a Nidia. Caminando por varios minutos hasta encontrarse unas bancas, vio que la castaña estaba mirando su pistola, pudo notar que su mirada estaba completamente ida y solo pensaba en María y en Fabio, con la situación en la que los llevo a una discusión, la primer oficial estaba inadvertida de la presencia de Lucy hasta que fue tarde y la maga celestial se sentó a su lado.