Feel Special✿[KTH] COMPLETA

20✿

Aunque Jimin estaba borracho, logró llegar a casa a salvo. Metió el auto al garaje y salió del auto con brusquedad. Después de lo que Jimin le contestó a JungKook, él decidió callar, tal como él se lo pidió. Nunca lo había tratado así antes y eso le dolió. No entendía el cambio tan brusco de actitud y que es lo que estaba pensando al dejarlo en ese sillón con una gran erección. JungKook bajo del auto al igual que Jimin y lo siguió. El pelirrosa subió las escaleras y se dirigió a la habitacion de Seyeon. Abrió la puerta de un portazo, sobresaltando a ambos cuerpos que se encontraban en la cama. Jimin posó sus ojos en TaeHyung y apretó sus puños. Seyeon miro a JungKook, quien se encontraba detrás de Jimin, se veía algo triste. Jimin se acercó peligrosamente a TaeHyung y lo tomó del brazo.

--Vete de mi casa.

TaeHyung abrió sus ojos y miró a JungKook, él se encontraba igual de sorprendido a él.

--¿Pero Jimin que te pasa?--pregunto Seyeon levantándose de la cama y tomando a TaeHyung del otro brazo.

--Callate Seyeon.

--No voy a callarme hasta que me expliques que es lo que te esta pasando.

Jimin arrastró a TaeHyung un poco pero Seyeon lo tomó del otro brazo. Jimin la miro fulminante.

--Suéltalo.

--No voy a soltarlo Park. 

--¡Que lo sueltes!

--¡No voy a soltarlo maldita sea!

TaeHyung, un poco aturdido se zafo de Jimin y abrazo a Seyeon.

--Nos vemos mañana ¿Está bien?

Seyeon nego.

--No, pero no vas a irte...--miro a Jimin-- ¡Recuerda que esta tambien es mi casa!

--Seyeon--llamo TaeHyung--Te veré mañana ¿Está bien?

--Pero...

--¿Esta bien?

Seyeon miro a TaeHyung una vez más y bajó su mirada. TaeHyung beso su frente y Jimin tomo una vez más su brazo, sacándolo de la habitación. Se giró para ver a JungKook que yacía viéndola, con dolor. Ambos se abrazaron y JungKook se encargó de acostarla en su cama. Seyeon estalló en lágrimas y ocultó su cabeza en su cuello.

--¿Pero qué le está pasando a Jimin?--sollozo apretando la camisa de JungKook mientras lloraba. El froto su espalda y miró hacia la ventana.

--No lo se...

Entonces vio a Jimin y a TaeHyung en el andén. Parecían hablar de algo.

--No quiero que regreses a mi casa.

TaeHyung lo encaró y abrió sus ojos. Estaban llorosos.

--¿Pero porque? No lo entiendo... ¿Qué hice mal?

Jimin bufo y pasó una mano por su cabello.

--Respondeme Jimin, ¿Que es lo que hice para que me odies tanto?

Jimin lo miro y se perdió en sus ojos.

--No te odio, TaeHyung.

--¿Entonces porque haces esto?

Y sin que TaeHyung lo esperara, Jimin lo tomó del pelo y lo acercó hacia él haciendo que sus labios se unieran. TaeHyung abrió sus ojos todo lo que pudo y miró a Jimin, tenía también sus ojos abiertos. Ninguno de los dos movió sus labios, haciendo aquel beso más frío de lo que ya era. TaeHyung empujo a Jimin separando sus labios y tapo su boca con sus dos manos. Lo miro una vez más para salir corriendo. Jimin tomo su cara con sus dos manos y pisoteó el suelo. Se giro rapidamente mirando el cielo y una rafaga de aire golpeo su cara haciendo que su cabello rosa se moviera. Posó sus ojos en la ventana de Seyeon y su sangre se helo. 

JungKook estaba allí, mirándolo con dolor en su cara. 

Jimin abrió sus ojos y entro a la casa con rapidez. Subió los escalones y entró a la habitación de Seyeon, JungKook no estaba allí. Escuchó un ruido en su habitación y corrió hacia ella. Cuando entró allí vio a JungKook revolcando su armario. Poso entonces su mirada a la cama, había una gran maleta negra. JungKook se giró y metió ropa en la maleta. Entonces Jimin comprendió que él se iba a ir de casa.

--JungKook, maldición, ¿que haces?--dijo acercandose a el. Lo tomó del brazo pero JungKook tiró de él con brusquedad. Jimin se alteró y se paró entre la maleta y el, para evitar que metiera mas ropa en la maleta. JungKook se giró con una pila de ropa y lo vio. Jimin se sintió culpable al verlo así, con la cara roja y los ojos hinchados. Sus ojos comenzaron a picar y su pecho se comenzó a contraer. JungKook paso a su lado y metió más ropa en la maleta.

--JungKook, puedo explicartelo, yo...

--No hay nada que explicar, Jimin, lo he visto todo.

Jimin gimió.

--Podemos hablar pero no hace falta que...

--¿Y de que quieres hablar?¿De que besaste a TaeHyung y te gusto?¿De que te has aprovechado de mi? No me lastimes más...

--No me he aprovechado de ti.

--¿Ah no?

--No.

--¿Entonces porque has estado tan cariñoso? Solo te has revolcado conmigo para olvidarlo a él.

--No digas eso, JungKook, eso no es cierto--gimió, con las lágrimas brotando de sus ojos.

--Yo...No lo entiendo, Jimin. ¿Porque te gusta el?¿No eres feliz conmigo?

--No es eso, JungKook. El no me gusta, es solo...

--Explicate.

--Tu y yo ya no estamos tan juntos como antes, solo estudias y estudias y con ese nuevo trabajo que conseguiste...

--¡Oh perdóname por querer tener un futuro para ambos!

--¡Pero tu ya no me dices que me amas, ni me tratas como antes! ¡Antes estudiabas pero ahora también trabajas!¡Por esas pequeñeces lo nuestro se ha ido al caño!

JungKook se giró y lo miró, estaba enojado.

--¿Sabes porque he estado trabajando como un negro?¿Lo sabes al menos?

Jimin callo. JungKook se dio la vuelta y sacó una caja, se giró y vació el contenido. Habían muchas monedas y muchos billetes. Jimin miro todo ese dinero y alzó su vista.

--Todo este maldito dinero era para casarnos. ¡Te iba a proponer matrimonio en unas semanas!¡Me he matado trabajando, solo porque te amo!

Jimin abrió sus ojos y tapo su boca con sus dos manos, estaba temblando y un gran nudo se instaló en su corazón. ¿Que?

--Pero tienes razón--concluyó--Aquí todo se fue al caño--tomo su maleta y limpio sus lágrimas--Y fue por tu culpa.

Termino, saliendo de la habitación. En cuanto Jimin se quedó solo empezó a sollozar. Escucho como la puerta principal se cerraba y corrió hacia ella sin pensarlo. Tal vez podría detenerlo. Salió de casa y miro a todos los lados, estresado.

 --¡JungKook!--gritó con todas sus fuerzas--¡JungKook!

Jimin cayó al suelo y gritó con frustración. 

JungKook se había ido.

Les agradecería que votaran o comentaran en mi historia.

On se voit plus tard