Capítulo 21

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Y llegó el día de la fiesta.
En ese momento estaba en el taxi con Carolina, ella está tan emocionada que incluso me alegro. Habían pasado un par de días desde que Purre y yo discutimos, pero estábamos bién.
- Puedo saber por qué tú y Purre no están hablando?
Preguntó mirándome.
- Peleamos ... pero no mucho. Dije encogiéndome de hombros. Y cambiemos de tema. Quiero saber por qué todavía no le has dicho a Manuel que estás embarazada
- Ahí. Ella resopló. - Decidí decírtelo después de la fiesta de hoy. Quiero disfrutar la noche de hoy
- Lo sé ...
La miré sospechosamente
- En serio, te lo diré.
- No tengas miedo, estoy a tu lado.
Ella sonrie y me abraza.

Fuimos a pasar el día en el salón, parecía que me iba a casar, nunca me cuidaron tan bien. Fue un gran día, nos mantuvimos alejados de los chicos, Yo,Carolina y Renata. Nos reímos todo el día.
Después de horas y horas estaba lista, maquillada y definitivamente este vestido era perfecto. Estaba muy feliz con mi elección. Un auto se detuvo para recogernos, así que fuimos directamente a la fiesta.

Outfit:

 Llegamos a un edificio enorme, todo reflejado

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Llegamos a un edificio enorme, todo reflejado. El lugar era muy chic. Todos eran súper elegantes.
Estaba admirando el lugar.
- Te encontramos.
Escuchamos voces y cuando nos dimos la vuelta encontramos a Simon, Santi y Manuel.
Que hermosos estan los chicos.
- Wow
Simon dice.
- Ustedes están
Dice Santi
- Muy hermosas
Manuel completo. Y nos reímos.
- Lo sabemos, chicos.
Carolina habla riendo.
- Tengo que aceptar que ustedes son gatos.
Los abracé.
- No vas a buscar a tu novio? Dice Simon, riendo. - Juana está aquí, pero ciertamente vos eres más hermosa.
Ah no..
- Mucho más hermosa.
Santi guiña un ojo.
Yo digo
"Gracias chicos!!!! Manuel viene a mi lado.
- Sí, Pilar, debes ir con tu novio. Vos eres parte de los Giménez como si esta fiesta es también tuya.
- No estoy casada con él.
Resoplo
- Tu entendiste, Pilar.
- Está bién, Manuel.

Los dejé y fui tras mi "novio" pero, por supuesto, no fui tras él, no hablaría con él hasta que tomara una iniciativa y hablara conmigo. Estaba siendo infantil, pero necesitaba respuestas.
Estaba mirando las mesas de comida y había tantas comidas que este sería mi lugar favorito de la noche.
- Pensé que ibas a estar aquí ...
Una voz ronca suena a mi lado y sé quién es.
- Me estabas buscando?
Lo miro
- Si.
- Qué es lo qué quieres?
Miro hacia otro lado y agarro un caramelo, mordiendo.
- En realidad mi mamá lo está. Se rasca la cabeza un poco torpe. - Necesitamos sacar algunas fotos.
- No puede ser más tarde?
- No, Pilar.
Yo suspiro y me limpio la boca después de comer los dulces. Salgo hacia donde me lleva Purre. Tan pronto como los fotógrafos y periodistas los ven, vienen a nosotros.
- Hola Fernanda.
Mica estaba de mi lado, un poco avergonzada, creo que los destellos la están avergonzando.
- Hola mi amor.
Me agaché, arreglando mi vestido y la besé en la frente.
- Tía Pili, por qué ellos estan tomando fotos de mi mama?
Ella preguntó confundida.
- Ella está trabajando, mi amor.
Extiendo mis brazos y la levanto.
Purre y Fernanda me miraron. Los fotógrafos y el reportero comenzaron a hacerme miles de preguntas y pasó casi una hora respondiendo todo.
- Puedo quedarme con Mica?
Le pregunto a Fernanda.
- Sí, por supuesto Pilar.
Ella sonríe.
Asiento y tomo la mano de Mica, y la coloco en mi regazo.
- No lo lograrás.
Purre aparece hablando de nada de mi lado.
- Lograr qué?
- Baja esas escaleras con ella en tu regazo. Él señala las escaleras. Vas a tropezar con tu vestido, Pilar.
Lo tomó ella de mi regazo y bajó las escaleras. Respiré hondo y bajé más tarde. Tenía mucha razón, podía caer en esa escalera gigante. Cuando tocamos el suelo. Él pone a Mica en el suelo y ella lo mira sosteniendo su mano.
- Pulee juega con nosotros
- Mica ... la miro.
- Por supuesto que sí.
Purre responde con una sonrisa a pesar de que no me gusta.
Mica estaba feliz juegando y Purre y yo intercambiamos algunas miradas. Tuvimos que sacarla de los juguetes, lloró un poco pero era hora del baile.

- Vamos?
Purre se acerca a mí y lo miro confundida. - Pilar vos eres mi compañera.
- Soy yo?
- Siempre sera.
Él sonríe y yo pierdo el aliento. Él sostiene mi mano entrelazando nuestros dedos y caminamos hacia el centro donde todos miramos y otras parejas bailan el vals.
Comenzó a tocar "La bella y la bestia" ( Beauty and The Beast)
Yo no sé cómo bailar ese vestido fue demasiado largo. Empecé a ponerme nerviosa.
- Ven conmigo, Pilar.
Me pone su manos en la mía cintura y me hace temblar.
Extrañé su toque.
Purre comenzó a moverse y seguí sus pasos, en ningún momento nuestros ojos se desviaron, por el contrario. Se fijaron el uno al otro. Confieso que no me intimidó, me gusta esa mirada.
- Ouch
Él Murmura haciéndome sonrojar y parar en medio del vals.
- Oh, Dios mío, lo siento Purre. Te dije que yo ...
Me interrumpe y estoy más nerviosa que antes.
- Oye, oye, está bien. Sentí que esta frase tenía un doble significado. Se acercó a mí nuevamente y colocó sus manos en mi cintura, acercando nuestros cuerpos. - Solo ven junto a mi, Pili y déjame guiarte.

Cerré los ojos y pude sentir la música más fácilmente, Purre me estaba guiando. Abro los ojos de nuevo y veo que me está mirando. El nerviosismo de hace unos minutos pasó y ahora él me trae paz y confianza.
- Está yendo bien.
Acercó su rostro a mi cuello y susurró.
- Gracias a vos.
Se aleja y me mira a los ojos otra vez.
- Te ves muy hermosa, Pilar.
Estoy segura de que me sonrojé en ese momento. Creo que esta es la primera vez que él me alaba mirándome a los ojos.
- Te ves muy hermoso también.
Yo sonrío
La música se detiene y Purre girame lentamente. Somos aplaudidos por la gran mayoría.
- Gracias, Purre.
Finalmente hablé, agradeciéndole por darme la confianza para bailar. Pero, de hecho, podría ser un agradecimiento por todo lo que me está haciendo vivir en estas vacaciones y nunca lo olvidaré, volveré a México en dos semanas.
No quería pensar en eso ahora.

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