Capítulo 42

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Narra Pilar

- Dónde está Purre?
Abro la puerta del apartamento y todos se levantan asombrados y me miran.
- Qué haces aquí?
Carolina viene a mi.
- Donde está?
Ignoro su pregunta
Estaba desesperada porque necesitaba verlo.
- Purre no está aquí.
Carolina responde
- A dónde fue él?
- No sé, Pilar, puedes calmarte?
Paso junto a ella hacia el dormitorio. Abro la puerta y veo que las cosas no están allí.
Miro asustada.
No había nada de él aquí.
- Dónde están sus cosas?
- Decidió regresar a la casa de su madre después de descubrir que viajabas a México hoy.
DIOS MIO.
- Quién dijo à él que yo iba a viajar hoy?
- Yo, lo siento, Pili.
Ella baja la cabeza, y todas mis lágrimas caen por mi cara.
- Voy a la casa de su madre
Tomo mi teléfono celular y lo llamo, él y no responde. Envío un mensaje en whatsapp. Corro a la habitación de mi hermano y consigo la llave de su auto.
Miro a Carolina y ella me mira con simpatía.
- Tómalo, pero por favor con calma y dame noticias.
Salgo del departamento y voy al auto de mi hermano.

Ni siquiera sé cómo llegué a la casa de Fernanda.
- Cómo Purre no está aquí?
Pregunto desesperada y llorando aún más. No tuve un buen presentimiento.
Dios mío, solo quería estar con él ahora, para decir que todo está bien.
- No sé, Pilar, estoy tratando de llamarlo pero no me respondió.
Entonces su teléfono celular comenzó a sonar.
- Contesta tu celular, Fernanda
Ella responde y su expresión cambia en cuestión de segundos, comienza a llorar desesperadamente. Nunca vi a esta mujer llorar así. Ella deja caer su teléfono al suelo.
Me acerco a ella sosteniendo su brazo, ella me abraza.
- Pilar ..... el Purre ...
millones de cosas comenzaron a cruzar mi mente, ya comencé a llorar desesperadamente.
Una pelea? Él fue preso?
Fernanda respira hondo y habla
- Tuvo un accidente, me necesita.
Ella desesperadamente va tras la llave de su auto. Corro hacia ella, le quito la llave de la mano.
- Él necesita de nosostros ahora.
No podía dejar de llorar pero necesitaba ser fuerte.

Habían pasado horas, ya estaba angustiado, sin noticias, sin nada.
No tenía más lágrimas para llorar, ya estaba débil. Tenía demasiado miedo de perderlo, Purre es todo en mi vida.
No puedo perderlo.
Fue horrible quedarse sin respuestas sin verlo.
Él estaba inconsciente.
- Pili?
Manuel aparece frente a mí y me levanto desesperadamente para abrazarlo. Era todo lo que necesitaba ahora. Empecé a llorar mucho.
- Lo siento Pili ... Mi pequeña, todo quedará bien.
- Por qué con él Manuel? Purre no merece esto. No lo merecemos
Me acaricia el pelo
- Mantén la calma, todo estará bien.
Veo a Carolina, Simon y Santi acercarse.
Cómo los amaba! Corro a abrazarme y me envuelven en un abrazo grupal.
Era toda la fuerza que necesitaba.
Pero no fue suficiente, necesitaba a Purre. Estaba impotente para todo. Se quedaron allí conmigo, dándome toda la fuerza. Pero solo lo necesitaba de él. Cualquier noticia, que él estaba bien.
Me senté en el banco del hospital y abracé mis rodillas, no podía parar de llorar.

Después de muchas horas en el banco del hospital, no me quedaban fuerzas. Fernanda aparece.
- Como está él?
Pido desesperadamente una respuesta.
- Acaba de salir de la cirugía, Pilar, pero su estado aún no es tan bueno. - Pero está fuera de peligro.
- Quiero verlo.
- Pilar, solo su familia puede verlo en este momento.
Dios mío, no puedo soportarlo.

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