Capítulo 32

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Narra Purre

Desperté con más de 20 llamadas de mi madre. Ella solo podría estar loca por llamarme tanto.
Miré el reloj y eran más de las tres de la tarde. Bien, dormí mucho.
Pero solo quería dormir.
Alcanzo mi teléfono celular que ya está volviendo a las llamadas perdidas de mi madre.
- Déjame adivinar? Vos estaba durmiendo.
Su voz era seria.
- Si.
- No quieres nada de la vida de Purre? No puedo esperar a que vuelvan tus clases.
- Ah mamá. Llegué de viaje y quería dormir, no puedo?
La escucho suspirar al otro lado de la llamada.
- Necesito hablar contigo y lo digo en serio. En menos de treinta minutos, en mi casa.
Ella me cuelga.
Y esta vez no sé lo que hice, me levanto de la cama y me ducho.
Tan pronto como salgo de la habitación, noto que la casa estaba completamente vacía. Encuentro a Pilar sentada en el sofá con su computadora en su regazo. Ella estaba tan concentrada que ni siquiera se dio cuenta de mí.
Paso lentamente detrás de ella y veo que está en un sitio web de boletos de avión.
- Ves pasaje?
Ella se asusta y me mira
- Si.
- Para que?
- No te interesa.
Ella se levanta y cierra la computadora dejando la habitación.
Maldita sea, Pilar.
Resoplo y agarro algo de comer, luego la llave de mi auto y voy a la casa de mi madre.

- Entonces ... me siento en el sofá y mi madre se sienta a mi lado. - Qué hice esta vez?
Pongo los ojos en blanco y ella continúa sería
- Esta vez creo que nada. Se acomoda en el sofá. - Debería preocuparme?
Yo me río.
- No. Pero entonces, de qué quieres hablar conmigo?
- Se trata de Pilar.
- Qué tiene ella?
- Ella no te lo hijo?
- Qué le dijiste?
- Te lo dijo o no, hijo?
- Si te pregunto es porque no lo dijiste, cierto, mamá
- Ah ..
- Nosotros peleamos
- Por qué?
- Nuestro tema, madre
Pongo los ojos en blanco
- Está bien. Suspira - Pilar regresará a México.
- Qué?
NO, no puede ser.
Y en cuestión de segundos, todo lo que pasamos juntos pasa por mi mente como una película.
No, no puedo perderla.
Después de todo lo que pasamos juntos, pensé que ella no volveria
Me enamoré de ella, no puedo verme sin su sonrisa o su mal humor matutino.
Ya no me veo sin Pilar.
No
Ella no puede hacer eso.
- Hijo?
Mi madre me estaba mirando y mi atención ahora solo estaba enfocada en otra cosa.
Ella no se irá, incluso si se queda para su hermano.
Me levanto
- A dónde vas, Purre?
Ella pregunta
- Evita que ella haga esto.
Corro hacia la puerta y escucho a mi madre gritar.
- Todavía no he terminado de hablar contigo. Dios mío.
Solo quería encontrar a Pilar ahora.
Todo tenía sentido ahora. Ella estaba mirando los boletos hoy temprano.
Mierda Pilar
No lo hagas eso. 

Entro en el apartamento sin ninguna delicadeza. Carolina estaba recostada en el sofá, se levantó asustada.
- Purre, estás loco?
La ignoro y corro a la habitación, abro la puerta y veo que no está allí. Su lado estaba todo ordenado. Me estaba volviendo loco.
Regreso a la sala de estar.
Miro a carolina
- Dónde está Pilar?
Ella me mira extrañamente
- Qué es toda esta desesperación?
- Jorder, Carolina, la viste o no?
- Ella acaba de irse.
- A dónde fue ella?
- No sé
La miro en serio, Carolina no sabe mentir.
- Para de mentirme, Carolina
- No estoy mintiendo, Purre
Ella se encoge de hombros
- HABLA POR FAVOR
Estaba desesperado
Ella resopla
- Ella dijo que iba a la plaza de enfrente.
Joder porque no pensé en lo obvio?
Simplemente corrí a buscarla.

Y allí estaba ella.
Tan pronto como llego a la plaza, la veo. Ya no me veo sin ella.
Mi vida no tiene sentido
Me acerco a ella lentamente y la abrazo por detrás.
- Por favor Pili, lo siento ... lo siento por ser un idiota desde que te conocí, por favor, lo siento ...
Ella estaba callada, solo escuché su respiración. Pongo mi cabeza en tu cuello y lo huelo.
Me encanta su olor.
- Purre ..
Ella habla suavemente y voltea frente a mí.
- Pilar, perdóname, por favor no me dejes solo. No vuelvas a México.
La abrazo.
- Por favor, Pili.

****
Narra Pilar

- Purre ... Me alejo de él para no llorar. Levanto la cabeza tratando de tener el coraje de mirarte a los ojos. - Yo no puedo...
- Por qué? Salió como un susurro- Pilar, hago lo que sea para no perderte.
Sus manos van a mi cara y su dedo comienza a acariciar mi mejilla, cierro los ojos y respiro profundamente.
- Purre ... quito tus manos de mi cara y lo miro. No, en Mexico está mi casa, es donde crecí. Que viví mi vida. Donde estan mis padres Donde estudio ..
Se pone serio
- Pilar, tu hermano está aquí, hiciste nuevos amigos, serás tía. Si el problema es tu universidad, puedes transferirte aquí.
- No es tan fácil, Purre
Bajo la cabeza
- Sé que no lo es. Él levanta suavemente mi rostro. Pero al menos puedes intentar ...

No se si puedo. Aquí en Argentina hice amistades maravillosas los que no puedo vivir sin, pero aquí también me enamoré de un idiota. Purre no siente un tercio de lo que siento por él.
- Pilar ... por mi.
Lo miro a los ojos por un momento y sentí sinceridad en sus ojos, no quería perderme.
Miro hacia otro lado
El suspira.
- Pilar, mírame a los ojos. Habla en voz baja. Y sé sincera conmigo. Miro tus ojos de nuevo. - Qué sientes por mi?
Mierda Purre.
Respiro hondo y él continúa hablando
- Si sientes algo por mí, incluso si es amistad. Me mira a la boca. - Quédate, Pilar, por favor.
- Purre. Lo digo en serio. Creo que sabes que lo que siento por ti va mucho más allá de una amistad.
Ya era hora de decirle eso.
- Pili. Él sonríe. Y sabes, lo que siento por ti va mucho más allá de la amistad, yo te amo.
- Yo no...
No me deja terminar de hablar y solo me besa.
No pude razonar en este momento.
El beso fue una mezcla de excusas, con anhelo y mucho deseo.
Extrañé ese beso.
Nos separamos con los ojos fijos el uno en el otro.
Él sonríe automáticamente, yo también sonrío. El me sostiene mi cara.
- Pilar, te quiero. Me da muchos besos cortos. No tengo una manera fácil de decir que te amo tantas veces seguidas, se ríe y yo también. - Pero no puedo estar sin ti.
Lo abrazo fuerte y él envuelve sus brazos alrededor de mi cintura.
Era todo lo que más necesitaba en este momento.

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