Capitulo 11

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POV Aleksey
-¡Ha llegado la princesa del destacamento!-gritó Herman al vernos entrar al bar.
-Y ha traído a su sapo- hablo Ancel divertido luego. Sonreí, par de imbeciles. Nos sentamos en el lugar que ellos habían elegido y acomode el abrigo de Leyna en el respaldo de su silla.
-Y bien ¿han pedido?- pregunte.
-Ancel ya tiene dos jarras arriba, si llegaban un poco más tarde probablemente lo hubiesen encontrado ebrio y con los huevos cortados, si mujer viene a buscarle en unas horas.
-Solo es una base, no me embriagare.- respondió terminando lo que supongo su segunda jarra de cerveza.- bien nena, es hora de probar la obra de arte que venden aquí.- se dirigió a Leyna. Alzó la mano y cuando Jhonatan se acercó a nuestra mesa le pidió cuatro jarras más.
Al volver con la cerveza el dueño del bar se posicionó junto a Herman con una sonrisa, era obvio que quería saber quien era la nueva muchacha en su local.
-Ella es Leyna- dije presentándola.
-La nueva bombero del destacamento.- dijo Ancel.
-Aún no soy bombero.- respondió ella por lo bajo- un gusto.- estiró su mano y Jhonatan la tomo para apretarla levemente.
-Un gusto Leyna, soy Jhonatan.- le dedico una coqueta sonrisa.
-¿Como estás Ayla? tanto tiempo sin verte..-dijo en alto Herman. El chico que había tomado la mano de Leyna la soltó rápidamente y se volteó. Todos nos carcajeamos.- ¿le tienes miedo a tu esposa Jhon?- era una broma, la chica no estaba allí pero con solo nombrarla Herman logró que Jhonatan se cagara todo. Completamente ofendido se retiró del lugar y se quedó tras la barra asegurándose que su mujer no estaba cerca.
-Son malos.- dijo Leyna con una sonrisa en el rostro. Era hermosa.
-Prueba la cerveza.- insistió Ancel. Ella se concentró en ello y dio un leve sorbo. Todos estábamos expectantes a su reacción. Se tomo un momento para saborear bien el líquido en su boca.
-Es rica..-dijo mirándonos.- es muy rica.- afirmó. Mis compañeros sonrieron complacidos. Ella me observo por un momento, sus ojos se conectaron a los míos durante unos segundos y no puedo negar que me sentí algo raro.
-¡Bienvenida al equipo!- gritó Herman y todos brindamos aunque ella no estaba tan convencida con esa bienvenida pues, aún no había dado sus pruebas.

Las siguientes dos horas nos la pasamos conversando y como siempre, haciéndonos bromas. Cuando llegó el momento de pagar Leyna se puso muy incómoda así que me encargué de hacerla sentir tranquila pidiéndole que vaya a buscar mi móvil al coche, los chicos sabían que yo no utilizaba el aparato casi nunca así que comprendieron la situación y no preguntaron nada al respecto.
Al irnos, primero nos partimos de risa con Ancel y su esposa, ella como siempre le ha regañado por embriagarse y él no dejaba de reírse a carcajadas. Debí acompañarle hacia el vehículo ya que no podía casi caminar.
Abrigue a Leyna ya que hacía algo de frío y luego de despedirnos de Herman nos retiramos del lugar.
-La noche ha estado sensacional.- dijo ella después de bostezar.
-Si, ha estado bien.- dije concentrado en la carretera.
-¿Siempre van a allí?- pregunto.
-Al menos una vez por semana, nos sirve para olvidarnos del trabajo.
-Y la cerveza es deliciosa- acotó.
-También..-sonreí de lado. La observe levemente de reojo, se estaba durmiendo. Ella también tenía bastante alcohol en su sangre.
-¿Crees que podré ser bombero?- pregunto acomodándose mejor en su asiento.
-Claro, te estás entrenando bien solo necesitas un poco más de confianza en ti misma.
-Las pruebas me ponen nerviosa.- bostezo de nuevo.
-Son solo pruebas, no tienen nada de malo. Aparte, tienes todo nuestro apoyo, tu tranquila.
-Gracias Alek- dijo casi a punto de dormirse.
-Es un placer.- termine de decir y pude sentir que su respiración se hacía más profunda. Apague la radio que sonaba suavemente, no quería interrumpirle el sueño. Observe la carretera, miles de veces había hecho este recorrido y siempre solo. Que Leyna estuviese a mi lado en este momento me hacía sentir alegre por alguna razón.

Al llegar los perros de Viveka comenzaron a mover sus colas con alegría, no ladraban ya que me conocían desde cachorros pero alguno que otro hizo sonidos de advertencia para avisar su dueña que había llegado alguien.
Baje del coche y lo rodeé para abrir la puerta de Leyna, le desabroché el cinturón de seguridad y la tomé en mis brazos, estaba profundamente dormida y creo que el alcohol la ayudo a no sentir absolutamente nada.
Cerré la puerta del coche con uno de mis pies y caminé sin esfuerzo alguno hacia el porche en donde ya se encontraba la dueña de casa parada y en camisón.
-Hola..-dije casi en un susurro.
-Supuse que eran ustedes, pasa.- hablo suave ya que vio la situación. Al entrar vi la escopeta de Viveka apoyada en la pared, sonreí levemente.- una nunca sabe.- dijo sin que le pregunte nada. Mi madre era igual así que no me sorprendía para nada.- acompáñame, vamos a dejarla en su habitación.- seguí a la mujer por la casa y subimos las escaleras. Me dirigió a la habitación y al entrar estaba todo perfectamente desordenado. Había ropa tirada por todos lados, zapatos, botas y tacones. Elementos de maquillaje desparramados por todo su escritorio y demás accesorios. La mujer quitó la ropa de la cama y la puso sobre una silla que se encontraba allí.
-Ella estaba muy nerviosa, podía sentir que caminaba de un lado a otro desde abajo antes de que llegaras.- sonreí. La posicione sobre la cama y la tape con una manta. Ella se acomodo un poco y siguió durmiendo plácidamente.-¿quieres comer algo?- pregunto Viveka. Negué con la cabeza.
-Ahora mismo estoy muerto de sueño.- expliqué.
-Puedes quedarte a dormir en el sillón que estaba abajo, después de todo tu también has bebido. Te conozco y no es seguro conducir así.- rodeé mis ojos y acepte su proposición. Estaba muy cansado como para llegar a mi casa.
Salimos de la habitación y luego de que la mujer me haya acomodado el lugar en donde dormiría me acosté.
La casa estaba en total silencio y se podía escuchar el sonido del exterior. Faltaban algunas horas para que amanezca así que opte por cerrar mis ojos y dormir. No sin antes recordar la hermosa sonrisa de la chica que dormía arriba.

ALEKSEY - Terminada. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora