Capitulo 5

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POV Aleksey
Estacione el camión en su lugar, dentro del destacamento. Acomode las cosas que había dentro de la cabina y luego baje.
-He llenado el tanque con agua. Está preparado para cualquier emergencia.- dije entrando a la oficina de Meyer. Él estaba leyendo unos archivos en la computadora.
-Necesito que limpien los vestidores, dile a Ancel que te ayude. Háblale a Herman para que venga a arreglar el alternador de la camioneta pequeña, en algún momento la necesitaremos y no está en servicio.- asentí con mi cabeza y salí de la oficina.
El destacamento contaba con un camión y una camioneta para pequeñas emergencias, hace días que se había roto y no la podíamos utilizar.
Aunque éramos sólo cuatro, manteníamos el lugar sumamente limpio ya que era nuestro lugar de trabajo, no había problemas con el orden ya que los cuarto éramos bastante ordenados. Con mi móvil llame a Herman para que viniera al destacamento. No estábamos todos los días metidos aquí, pero siempre manteníamos el lugar como debía ser. Era Meyer el que vivía aquí, nosotros solo cumplíamos con un acortado horario y asistencia en emergencias. Por eso cada vez que no estábamos aquí, Meyer nos llamaba y nos trasladábamos por nuestros propios medios hacia donde éramos requeridos.

Estaba limpiando los cascos del uniforme en el estacionamiento en donde Herman al mismo tiempo arreglaba la camioneta. Ancel ya se había ido con su familia.
-Oye tu...-dijo Meyer mientras golpeaba con uno de sus pies las piernas de Herman que se encontraba con medio cuerpo debajo del vehículo.
-¿Que pasa viejo?- respondió mi compañero sin salir de allí abajo.
-No le has llevado el acta a Viveka
-Lo se, me la he olvidado el otro día.- preste atención a la conversación mientras seguía limpiando.
-¿Y cuando piensas llevársela? La debe de necesitar, era el único vehículo que tenía esa mujer.- entrecerré mis ojos, ¿desde cuando una mujer le importaba tanto a Meyer?
-Si, ya se. En cuanto pueda se la llevo, le he dejado dicho que me llame si necesitaba algo de la cuidad.- Meyer rodó sus ojos. Herman a veces no entendía que los tiempos de los demás no eran los mismos que los de el.
-Si quieres yo sé la llevo, me queda de paso.- hable, de hecho yo era el único que vivía en la zona de la señora. Los demás vivían más lejos que yo.
-Okey, se la llevas hoy mismo, ella tiene que reclamar su seguro para poder tener otro vehículo.- me alcanzó la hoja y al tomarla, la doble y la puse en uno de mis bolsillos traseros del jean. Seguí limpiando los equipos mientras Herman hacía sus actividades y Meyer se internaba en su oficina nuevamente.

La ruta estaba tranquila, no había mucho movimiento y eso me hacía feliz. Disfrutaba del viento en contra, era refrescante.
Me detuve en el portón del terreno y lo abrí sin dificultad. Entre mi motocicleta y volví a cerrarlo tras de mi. Recorrí el camino interno que me llevaba hacia la casa y como una costumbre tal vez, observe el entorno para ver si estaba todo bajo control.
Los perros salieron a mi encuentro pero como ya me conocían no hicieron mucho alboroto.
Al estacionar golpee las manos para llamar la atención de la señora así me atendía y como no esperaba, salió una chica de la casa.
Tenía entendido que Viveka vivía sola, al parecer estaba equivocado. Debí pararme y dejar mi moto a un lado para poder lograr estabilidad. Esa chica realmente era despampanante.
-¿Que tal?- dije luego de aclarar mi garganta.
-Hola ¿qué tal?- respondió con la voz baja. Saqué el papel de mi bolsillo y lo mantuve en mi mano.
-¿Está Viveka aquí? Vengo a traerle el acta para su seguro.
-¿Oh tu eres amigo de Herman?- pregunto perdiendo totalmente la timidez.
-Eh si... soy Aleksey su amigo y compañero de trabajo.
-Maravilloso, ¿cómo está el? Tuve la oportunidad de conocerle, es muy simpático.- se acercó un poco más a mi.
-Él está bien.- sonreí levemente. Ahora el tímido era yo.
-Viveka está en el invernadero ahora, ¿Quieres que le dé el papel o se lo llevo yo?
-Eh..toma, dáselo tu, no quiero molestarle.- estire mi mano para entregarle el papel y ella lo tomo, nuestras manos se rozaron levemente y una electricidad corrió por todo mi cuerpo. Ella sonrió un poco, era una sonrisa tan bella que me quedé observándola por segundos que parecieron eternos. Volví a subir a mi moto.- tengo que irme, cualquier cosa que necesiten me llaman ¿si?- ella asintió efusivamente y se aparto un poco para que pudiese arrancar el vehículo. Di unos pasos hacia atrás y me dispuse a doblar el manubrio para marcharme.
-Aleksey Mykolaiv me imagino que no te irás sin saludarme ¿no?- sentí la voz de Viveka acercándose. Tenía un atado de acelgas en una de sus manos y una pala en la otra.
-Lo siento Viveka, no he querido interrumpirte mientras trabajabas.- ella sonrió y se acercó, yo apague la moto.
-De hecho me viene bien que estés aquí, necesito que me ayudes a cortar un árbol, la motosierra es muy pesada para mi ¿puedes quedarte?- baje de mi vehículo, sentía la mirada de la chica sobre mi.
-Esta bien, no hay problema.- no tenia nada que hacer en casa así que la ayudaría. Me guío hacia donde estaba la motosierra y la cargué sin dificultad hasta donde se encontraba el árbol que por lo visto estaba podrido.
Me costo dos horas y media cortarlo por completo, estaba transpirado y necesitaba un baño urgente. El sol ya estaba bajando y no podía seguir trabajando sin luz- los troncos quedaron allí, si quieres mañana vuelvo con el coche para moverlos.- dije acercándome a la casa. La chica no estaba afuera, supongo que andaba por allí.
-He hecho una cena para agradecerte, ¿quieres quedarte? Hay carne asada en el horno y se que es tu preferida.- dijo la mujer fumando un cigarrillo. Me tome un pequeño momento para pensarlo y finalmente asentí. Ella tenía el carácter algo fuerte así que era mejor que le dijera que si, aparte la conocía desde pequeño y muchas veces la he ayudado en su casa. Luego de responderle afirmativamente ambos entramos y la vi, estaba haciendo la mesa y se veía tan linda como al principio, aunque se notaba que se había bañado.
Creo que me iba a costar concentrarme al compartir la mesa con ella, pero haría lo posible por no parecer un idiota.

ALEKSEY - Terminada. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora