Capitulo 32

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POV Aleksey
-¿No te fías de mi?- pregunte. Ella estaba realmente enojada y estábamos discutiendo.
-¿Por que no quieres decirme quien era esa chica? Me has visto y te he visto, no entiendo por qué niegas todo.
-Yo no te he visto.- dije tratando de engañarla. Sonrió sarcásticamente.
-Estaba en una puta camioneta de bomberos roja y gigante, me viste, ¿Te crees que soy idiota?- estaba tratando de esquivar esta discusión pero al final fue imposible. Tenía un plan, no era el mejor de todos pero era lo único que se me había ocurrido.
-No eres idiota, pero en serio, no te vi.- mentí de nuevo. Claro que la había visto, como no verla, y también la ignore, si Wanda la veía todo mi plan se iba a la mierda.
-Okey no voy a hacer más esto.- dijo harta.- solo pido que me digas la verdad, más nada que eso.
-Te estoy diciendo la verdad, no te he visto y esa chica..- presto más atención.- es una amiga.- entrecerró los ojos. Sabía que no me creía.
-Una amiga..-repitió.
-Si, una amiga. Nada más que eso, no tengo por qué mentirte.- en realidad si pero bueno, no me quedaba otra.
-¿Y por qué has estado tan distante conmigo? Días atrás no eras así, algo te sucede.- tenía razón, estaba distante con ella pero no era porque no la quisiera o algo por el estilo.
-Solo estoy algo cansado, sabes que he tenido que trabajar el doble.- eso también era una mentira, no tenía que trabajar el doble sino el triple. En casa, en el destacamento y..con Wanda. Atender a dos mujeres al mismo tiempo era agotador y no estoy hablando sexualmente.
Ella suspiró y pasó una mano por su cara, sabía que no le gustaba pelear pero aún así lo hacíamos.
-Iré con Herman, ya no soporto verte así, el día que se te pase me vuelves a hablar, por mientras no quiero verte cerca de mi.- la observe seriamente. No quería que esto pasara pero era por su bien, las ganas de detenerla y besarla cuando se fue eran infinitas, pero aún así la dejé ir.
Puse una nueva tanda de ropa a lavar y maldije por dentro. No quería estar así con ella, sabía que podría llegar a perder su confianza para siempre y aún así me estaba arriesgando como un imbecil.
-Los gritos se escuchaban desde el garaje, agradece que Meyer no está o estarían cumpliendo castigo, ambos.- dijo Ancel entrando a la lavandería. 
-No me jodas ahora que no estoy de humor.- dije histérico.
-¿Que cojones estás tratando de hacer?- pregunto acercándose sin miedo. Ya me conocía, por más enojado que yo este jamás haría algo en su contra.
-Distanciar a Wanda, alejarla de Leyna..-dije repitiendo las bases de mi plan.
-¿Y que te hace creer que eso funcionará? Sabes que igualmente se encontrarán en algún punto.- cruzó sus brazos sobre su pecho y se apoyó contra la pared.
-Lo se, pero si mantengo a Wanda controlada no le hará ningún tipo de daño.
-No es un animal al cual puedes domar, es una persona y está lo suficientemente loca como para hacer lo que sea, te lo recuerdo.- sonreí sin ganas. Como si no lo supiera.
-Déjame, se lo que hago.
-Pues yo creo que no, estás tratando de proteger a Leyna y no te está saliendo muy bien que digamos.- golpee la lavadora, tal vez si lo hacía con un poco más de fuerza se abollaba.- te he visto, todo el pueblo te ha visto con Wanda. No mencione el tema con Leyna porque cuando entre a la camioneta ese día ya estaba lo suficientemente mal por lo que había visto.
-¿Puedes dejarlo ya?- pedí por piedad. Necesitaba concentrarme en lo que estaba haciendo y no podía dar marcha atrás ahora mismo.
-Eres mi amigo y me veo obligado a aclararte la mente. Leyna también es mi amiga y no quiero que sufra por las cosas que tú estás haciendo mal.
-Suficiente.- dije ya completamente agotado de escucharle. Me retire del lugar, me importaba una mierda la ropa ahora mismo.
Necesitaba aire, no quería pensar más en el tema pero no podía dejar de repasar mi plan. Siempre me encargué de que todo lo que hiciera estuviera estratégicamente bien hecho y esto me estaba sacando de mis cabales.
Tenía que de alguna manera controlar a Wanda y salir con ella era la única forma que encontraba de acercarme a ella, no tenía otra opción. Si Wanda salía conmigo no sospecharía de lo mío con Leyna y así se tomaría la prueba con total normalidad. No tendría ningún motivo por el cual estar en contra de ella y así no le truncaría de repente todo el esfuerzo que había hecho para terminar con todo.
Era fácil decirlo pero difícil hacerlo y aunque se que parezco un cínico pensando estas cosas, era la única opción que me servía.
Comencé a lavar el camión, al menos eso me entretendría un rato. No quería tener contacto social con nadie, me molestaba hablar con cualquier persona, incluso con Leyna, ella estaba lo suficientemente conflictiva como para hablarle y la entendía, la entendía a la perfección. Solo rogaba por que en algún momento me perdone y entienda, cuando le explique la situación después de que todo esto termine. Ya vería yo que haría con Wanda, si me la había sacado de encima hace unos años atrás no podía ser tan difícil ahora, esperaba que no pierda la cabeza completamente como la ultima vez. Era todo realmente peligroso y me estaba arriesgando, me estaba arriesgando mucho. Estaba en peligro de perder lo que más quería en este momento de mi vida, a Leyna.

ALEKSEY - Terminada. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora