I need you//Jos Canela y tú//2da temporada [EN EDICIÓN]

Twenty Two

-No, no puedo... -aunque fuera algo que quisiera demasiado, no lo podía hacer. Su mirada solo se mantuvo en nuestras manos unidas. -

-¿porqué no? ¿No es suficiente el amor que nos tenemos? -me miró, con los ojos consternados y con indicios de querer llorar-

-Seré realista contigo, espero que lo comprendas... -mi golpe de madurez había llegado dos veces: cuando me enteré de mi bebé y cuando capte que no estaría en su vida para verlo crecer.- no estaré contigo toda la vida, como lo prometimos. Y si nos casamos, solo complicará las cosas. Se que tienes una gran ilusión con este bebé, yo también, pero sólo lo verá crecer uno de sus padres.

-No, no te iras... -lágrimas ya corrían por sus mejillas, negaba con la cabeza y apretaba mi mano- Tenemos aún una vida por delante, ¿no crees?

-Jos, cuida al bebé. Por nosotros, ¿si? - estaría más tranquila, sabiendo que él estaría incondicionalmente con nuestro hijo. -

-Lo vamos a cuidar, juntos. - llorar lo cansó, se quedó dormido a los pocos minutos de terminar la platica. Me levante de la cama y todo el cuerpo me dolió, trate de caminar con normalidad mientras respiraba evitando que me agitara. Llegué al baño y me mire al espejo, ¿donde había quedado ese rostro fresco y cálido que solía tener?

-No puedo dejarlo sólo, como si nada. Necesito dejar las cosas bien para que sepa que no estaré físicamente pero si en su alma... ¿Verdad bebe? - me puse de perfil y toque mi vientre, pronto mi cuerpo comenzaría a cambiar y estaría feliz de ver que dejaré una parte de mi aquí.

NARRA Jos:

Era un cuarto demasiado blanco, tanto como para no lastimarte la mirada. Estaba esa sombra, a la que le temo pero al mismo tiempo detesto. Se que quiere dañar a _______, pero jure que no dejaría que le pasara nada.

-Supongo que sabes a que vine, así que hazlo mas fácil ¿quieres? - su voz me trasmitia un escalofrío gigante, era seca y muy apagada.

–No, no se a que demonios vienes. - trate de no mostrarme débil ni intimidado ante ella, pero era casi imposible-

–Vengo por ella, ¿apoco creías que te seguía amando? - señaló algo detrás de mi, por inercia voltee y la vi, sentada en una cama con un bebé en brazos, al parecer arrullandolo - tu hijo succiono todo el amor que te tenía, ya no existe. Se concentró más en su enfermedad, que se olvidó de ti, ya no eres nadie para ella

–¡Mientes! -los nervios me estaban comiendo por dentro, ¿eso era verdad? - ella me sigue amando, ¿verdad amor? - me iba a acercar, pero la muerte simplemente chasqueo con los dedos y mis piernas me dejaron de responder haciéndome caer sin poder poner resistencia. Las mire impotente y traté de moverlas pero era algo inútil - ¿¡¿Qué me hiciste?!?

–¿Yo? Sólo me cobre el favor que me debías, hace tiempo yo te debi de haber llevado, ¿no lo recuerdas? Tu accidente. -recordé haber tenido en el hospital varias pesadillas sobre mi muerte, donde le rogaba llorando que me dejara quedarme a lado de ______- ahora, me llevare a lo que más amas, pero no eres correspondido. Pará ______ ahorita lo más importante, será su hijo. Si no le importara, no me hubiera ofrecido llevármela en vez de a él ¿no crees?. Ya no te ama, prefirió irse ella y no quedarse contigo a hacer esa familia que tanto querías.

–¡No! ¡CLARO QUE NO! - no lograba moverme, era algo desesperante - ¡_______! Amor! Dile que no es verdad! Que te quieres quedar conmigo! - ella dejo al bebé sobre la cama y camino hacia mí, sin agacharse solo me miró tirado-

–Me iré con ella. Tiene razón, mi prioridad siempre fue mi hijo y ahora que se que esta bien, lo dejaré contigo. Él absorbió todo el amor y cariño qjeyte tenía, transformadolo en algo suyo. Por ti, ahora solo siento lástima, ¿apoco creíste que me quedaría contigo después de saber que otra vez no podías mover las piernas.? Es egoísta dejar a mi hijo a tu cuidado, pero ese fue el trato. - la mire con los ojos llenos de lágrimas, ¿como es que ella podía decir algo así? Tomo la mano de la muerte, camino a la salida y dio una última vista a donde estaba, sonrió y se fue. Dejándome.

El bebé comenzó a llorar en cuanto salieron del cuarto, seguí tratando de moverme, pero era algo en vano.

¿Sería capaz de dejar de amarme?

¿Todo el amor que me tiene, se lo pasaría a nuestro hijo?

¿No se supone que mis piernas estaban bien?

La combinación de mi desesperación y el llanto de mi hijo, lograron sacar un grito ahogado de mi, deje de luchar contra mis piernas inmóviles y traté de cancelar todo sonido.

–¿porqué? -me dije entre sollozos- ¡¿Porque me dejaste?! ¿PORQUE?

–¡¿PORQUE?! - sentí como alguien me movía y capte que estaba entre sueños. Me levante como pude y abrí los ojos, mirando la alfombra del piso. Todo daba vueltas y la cabeza me punzaba. Unas manos tomaron mi rostro y lo giraron, conecte con sus ojos.

–Todo fue un mal sueño, mírame. - su sonrisa cálida, su cabello alborotado y su mirada adormilada me hicieron entran en realidad. Odiaba las pesadillas, que se habían presentado cada vez más frecuentes. - Todo esta bien, ¿sí?

Fue inevitable tener una necesidad de tenerla entre mis brazos, de rogarle que no me dejara de amar, que se quedara. Pero no lo hice, me limite a tocar su rostro con una mano y frotar levemente mi dedo pulgar en su mejilla recibiendo un apretón y un abrazo de su parte.

Ahora, mi prioridad era mantener a mi familia unida. Mantener el amor de ______ y ver por ella y por mi hijo. Había soñado que era niño, ¿sería una señal?

Necesitaba hacerla entender que se quedaría más tiempo del que le dijeron, y que la había puesto en la lista de "espera de donante de pulmón", como había prometido, haría hasta lo imposible por tenerla a mi lado para toda la vida, para poder ver como nuestro frijolito crecía.

–Te todo. -me miró extrañada, con la garganta seca y la respiración aún acelerada, reí por lo bajo- Te todo es una, abreviación para: te amo, te adoro, te quiero, te necesito, te admiro, te extraño, te recuerdo, te agradezco, te deseo. Te todo, ¿entiendes?

–Que bonito, yo también te todo. - di un beso sobre su frente y nos volvimos a acostar, yo abrazándola del vientre sin poner presión para no lastimarla.