Twenty Nine

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Capítulo largo :>


Mi corazón latía demasiado rápido, habían sido 3 días sin verlo y sin aviso, regresó. 

Me giré para confirmar que era él y no me equivoque. Estaba bajo el umbral de la puerta, con una increíble sonrisa y los brazos abiertos, esperándome. Me levante de la cama y fui a corresponder aquel abrazo. 

Cuando nuestros cuerpos se juntaron, su magnifico olor llego a mis fosas nasales y sonreí. Estaba ahí conmigo, más bien, con nosotros. El bebé, al sentir el calor de su papá comenzó a lanzar leves pataditas en busca de atención. 

—Te extrañábamos... -dije aun estando pegada a su pecho, sentí como acarició mi cabello y deposito un beso sobre esta- 

—Yo también los extrañaba, por eso, preferí darles la sorpresa de que llegaba -sintió como el bebé seguía pateando y se agacho para quedar a la altura de mi vientre. -Si bebé, papá ya esta aquí... ¿cuidaste bien a mamá mientras yo no estaba?

Dio un suave beso y se incorporó a su altura normal, me miró, con aquellos ojos color miel, tan intensos pero suaves, que logran que me olvide de donde estoy, que olvide el tiempo, que olvide todos los problemas. Admire cada facción de su rostro, que solo emitía una felicidad inexplicable. Coloco una se sus manos sobre mi mejilla y la acarició, recorría cada parte de mi rostro con sumo cuidado, haciéndome sentir el cristal más frágil de todos. 

—¿Porque me miras así? -tome su mano y la apreté levemente-

—¿No puedo admirar a la mujer mas hermosa? 

Solo reí por lo bajo

—Es enserio... -asintió con la cabeza y frunció el ceño.- No se a quien le debo agradecer que hoy estés conmigo, pero se lo deberé toda la vida...

El embarazo me ha puesto más sensible y sentimental, y ahora llega Jos a decirme esto, fue imposible no llorar. Lo abrace mas fuerte y me aferre a él.

—No, no mi amor. No llores... Perdón no quis -lo interrumpí.

—No lloro de tristeza. Lloró porque cada vez que me ves así o me dices algo así, me siento un cristal, que tu cuidas. Y eso solo me hace ser más afortunada, de que, estemos juntos.

Fer entro a la habitación, iba a pegar un grito de emoción pues al parecer ella tampoco se había dado cuenta de la presencia de Jos. Él se separo de mi y fue a abrazar a su hermana, yo fui a sentarme a la cama y observe mi celular, tenía varios mensajes de Dani y de Dulce, en un momento los contestaría. 

—Me hubieras avisado a que hora llegabas, para ir por ti al aeropuerto... -dijo Fer regañándolo- 

—Era sorpresa para todos, por eso no avise... -recibió un puchero por parte de su hermana mayor, quien al parecer recordó algo-

—Ahorita que están los dos y antes de que lleguen los demás, debo darles unos regalos que ayer compré. -ni siquiera dejo que le respondiéramos y salió directo a su cuarto, cuando regreso, traía 3 bolsas de regalo. Sonrió y nos pidió que nos sentáramos en la cama, le hicimos caso y ella tomo asiento en la alfombra- Ya se lo que dirán "Fernanda, todavía faltan 2 meses para que el bebé nazca y ni siquiera sabes que será" -dijo imitando la voz de Jos, a lo que ambos nos reímos- pero, no me importa. Ayer fui a comprarle unos regalos a mi sobrino o sobrina, espero les gusten -primero nos dio la bolsa más chica, Jos la abrió y antes de sacarlo rió.-

—¿De verdad Fernanda? -mire curiosa la bolsa y Jos sacó un mameluco de oso, di un chillido de emoción y Fer sonrió orgullosa- 

—Lo que pasa es que, mi hermanito, cuando estaba pequeño y se dejaba vestir, mi mamá le ponía uno igual a este -señalo el mameluco que yo tenía entre las manos- pero a él, por alguna razón nunca le gusto.

I need you//Jos Canela y tú//2da temporada [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora