La noche de ayer fue de todo menos buena, sentía como mi corazón se estrujaba mientras yo intentaba mantener la compostura. No sabía que había sido aquello, solo se que Ginés había estado muy raro y que había alguien con él; una chica por lo que escuché.
Me he levantado algo tarde, ayer me tomé pastillas para dormir y que mis pensamientos me dejaran en paz. Bajo a la cocina de Javi y me encuentro con él apoyado en la pared bebiendo un vaso de zumo.
-¿Has quedado un poco para mí?- digo divertida.
-Claro enana, sírvete tu misma- dice pasándome un vaso.
Abro la nevera y me sirvo un poco de zumo, guardo todo y me lo bebo tranquilamente mientras el silencio nos rodea.
-¿Qué te dijo?- le pregunto mirándolo de reojo.
-No me cogió el móvil- hace una mueca -Pero esta mañana me ha llamado, dice que tú no se lo cogías y le he explicado que no estabas muy contenta...-
-Como para estarlo- me cruzo de brazos suspirando.
-Dice que vendrá a por ti esta tarde, tiene que hablar contigo- añade Javi encogiéndose de hombros.
En este momento no sé si ponerme nerviosa o cabrearme más... En cierto modo me da miedo que todo se acabe, me da miedo enterarme de que le gusta otra y me ha estado engañando o incluso que ya no le gusto, todo eso me destrozaría.
Para la hora de comer llegan Andrea y la hermana de Javi, al parecer habían ido de compras juntas ya que son íntimas amigas. Ambas me llevan arriba a enseñarme toda la ropa que se han comprado.
La verdad Laura, la hermana de Bnet tiene un gusto increíble y se parece mucho a mí en cuanto a vestimenta.Hoy hemos decidido ser las chicas quienes cocinaremos ya que la madre de Javi no volvía de trabajar hasta la tarde. Pusimos la cocina patas arriba peor la comida nos salió demasiados buena, luego tuvimos que limpiar a fondo pero mereció la pena.
-Ha llegado Walls- dice Javi entrando en el salón donde me encontraba sentada con las chicas.
Suspiré hondo y le eché valor, me despedí de todos y me encaminé hacia la puerta donde estaba él sonriéndome dulcemente.
-Hola- me limité a decir saliendo de la casa.
-Ro... Lo de ayer no fue lo que piensas- dice haciendo una mueca
-¿Y que debo de pensar Ginés? Me ignoras durante todo el día, supuestamente porque estás ocupado pero te llamo y hay una chica contigo. Dime qué tengo que pensar de todo eso- añadí bufando y me echó a andar.
-Si te pones así es verdad que doy a entender otra cosa, pero créeme que no- suspira algo frustrado y me da la mano -Ven conmigo y entenderás todo-
Tira de mí hacia no se dónde, después de un rato andando llegamos a una urbanización muy bonita, entramos a ella y nos dirigimos hacia una de las casas. Ginés llama a la puerta y abre una chica rubia que me mira muy sonriente.
-Por fin te conozco cuñada- se abalanza sobre mi y me abraza -Por tu cara Ginés no te ha hablado de mi-
En ese momento reconozco la voz de ayer, era su hermana. He quedado como una completa imbecil pero era inevitable no pensar que algo iba mal con todas esas señales.
-Ahora me siento mal, pensé que me engañaba con alguien- hago una mueca algo avergonzada.
-Me lo temía... Pero la última vez que jodió lo que tenía contigo lo vi realmente mal, sé que no podría hacerte eso- dice ella sonriendo -Por cierto soy Paula-
Miro a Walls de reojo mientras entramos en la casa, se le nota algo tenso. Me quedo un poco extrañada al no ver ningún mueble ni nada dentro de la casa.
-Estos meses he reflexionado sobre lo nuestro y como hemos avanzado. A pesar de cagarla muchas veces tú has sido la única que me ha aguantado en mis peores momentos y quiero pasar el resto de mis días contigo- comienza a decir Ginés agarrando mis manos -Lo hablé con mi familia y me dieron vía libre, desde ahora esta será nuestra casa. ¿Quieres venirte a vivir conmigo?-
Abro los ojos en par en par y ahogo un grito de entusiasmo, enseguida me abalanzo sobre él rodeándolo con mis brazos.
-Claro que quiero jo, encima aquí en Madrid, siempre había querido mudarme aquí- suspiro sonriendo ampliamente.
-Todo esto es lo que estábamos haciendo ayer, mirando casas y precios- explica Paula sonriendo.
-Ay muchas gracias de verdad, Ginés eres el mejor- agarro su cara y me fundó en un beso muy tierno con él.
Me dan un pequeño tour por toda la casa, es bastante amplia y me jode que la haya pagado él solo, le devolver la mitad del dinero cuando pueda. La cocina es muy grande y ya me imagino a los dos metidas en ella cocinando un domingo. Tiene un patio pequeño pero acogedor con una mesa en el centro lo bastante grande para invitar a nuestros amigos y hacer una barbacoa. Las habitaciones ya son otro tema aparte, está la principal, dos de invitados, una tipo despacho que según Ginés quiere convertirla en estudio para tocar, cantar o improvisar.
-Bueno, le faltan muchas cosas lo sé, pero tenemos tiempo para prepararla en condiciones y venirnos a vivir juntos- dice él pasando su brazo por mis hombros cuando salimos de la casa.
-Es genial enserio, ya estoy maquinando de qué color pintar las paredes y todo- digo divertida.
-Oye hermanito, que el concierto empieza en 1 hora - dice Paula avisándonos.
Como alma que lleva el diablo salimos corriendo a coger un taxi y que nos lleve al sitio donde Walls cantará. Llegamos bastante justos peor gracias al cielo no se percatan de que faltábamos. En cuanto Walls tiene que salir tira de mí hacia el escenario, algo que la verdad me esperaba.
Comienza a sonar la base de Entiende, siempre amaré esa canción y más aún cantarla con él. Cuando terminamos el público rompe en aplausos y vítores, es genial sentirse apoyada y querida por tantas personas.
Tras cerca de 1h y media de concierto volvemos a casa de Bnet muy exhaustos. Al llegar me encuentro con Chuty y Nerea allí también.
-Holaaaa- digo muy contenta abrazando a los chicos.
-Te veo muy feliz pulguita, ¿Todo arreglado?- me pregunta Javi sonriendo levemente.
-Si, no era nada mira- digo presentándoles a la hermana de Walls -Era ella la chica, estaba ayudando a su hermano a comprar la casa-
-¿La casa?- pregunta Nerea confundida.
-Nuestra casa, nos vamos a vivir juntos- añado abrazando por la cintura a Javi.
Los chicos se vuelven locos al escucharme, se alegran demasiados por nosotros, dicen que compartir la rutina juntos es lo más bonito que hay y un paso muy importante. La verdad estoy ansiosa por poder decorar todo a nuestro gusto y por fin poder habitar esa casa donde adianzaremos nuestra relación.
No he podido tener más suerte en la vida con Ginés la verdad, pasar de ser desconocidos a conocidos y de conocidos a pareja en todo este tiempo me ha hecho darme cuenta de que lo quiero demasiado.
ESTÁS LEYENDO
𝕄𝕒𝕝𝕕𝕚𝕔𝕚𝕠𝕟|𝕎𝕒𝕝𝕝𝕤 (EDITANDO)
Roman pour AdolescentsDesde que escuché el primer acorde de aquella melodía. Desde que entendí aquella frágil voz detrás de esa canción. Desde que te vi supe que serías: Mi salvación, mi perdición, Mi suerte y mi maldición. "Si te pienso me castigo. Si te sueño me senten...