Capítulo 29: Vive y deja morir

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Talia deja caer una carpeta en el escritorio justo enfrente del cazador, este frunce el ceño, no se atreve a tocar la carpeta porque obvio sospechaba que se trataba de algo malo, Talia nunca lo llama para socializar como viejos amigos, ellos solo se juntan cuando quieren negociar, Talia no tiene planeado hacer eso aquella noche, ella quiere humillarlo y utilizarlo hasta que sea solo una cascara vacía de lo que Gerard alguna vez fue.

— Vamos, Gerard, mira lo que hay adentro. — El cazador le da una mala mirada, con cautela agarra la carpeta y la abre, al observar los papales adentro se tensa visiblemente. Talia sonríe, tiene a Gerard en sus manos, finalmente puede vengar la muerte de sus padres, y se siente tan gratificante como siempre pensó que sería. — Te tengo, Gerard. —

El hombre alza la mirada. — ¿Dónde conseguiste esto? — Frustrado tira la carpeta al escritorio.

— La hija de tu mano derecha me lo dio. — Dice la verdad, quiere que sufra al darse cuenta que en su clan tiene traidores. — Ella también me dio la idea de usarlo para demostrarle al comité del gobierno que mantiene a los cazadores, si ven como rompes las reglas te quitaran tu cargo de líder, y tendrías que decirle adiós al dinero y el respecto. —

— ¿Vas hacerlo? —

— No, será más satisfactorio para mí matarte. — Hace brillar sus ojos a rojo.

Gerard no tenía escapatoria, ella sabe que él está informado de los aliados que tiene, sería un mal cazador sino supiera de los vampiros, los cuales Talia puso a que hicieran guardia, tienen la orden de que si Gerard trata de escapar ellos lo mataran como a sus dos cazadores que esperan fuera del despacho.

— ¿Y porque en vez de hablar tanto no lo hiciste apenas entre? — Habla relajado.

Deja de hacer sus ojos brillar. — Porque quiero que ruegues. —

Admite que le confunde la actitud del cazador, también la enojada, se supone debería estar aterrado y preocupado, ella acababa de amenazarlo, ¿qué hay de mal con este Argent? Esto confirma que estos cazadores están locos.

— No lo hare, y tú no me mataras, te convengo más vivo que muerto. —

Talia ríe. — ¿En serio? — Dice sarcástica. — ¿Qué te hace pensar eso? — Por dentro estaba furiosa, Gerard la conocía más de lo que pensó, pero al menos aun trata lucir que es quien tiene el control en la situación.

— Matarme sería fácil, si disfrutaras sentir mi sangre entre tus manos pero pasara rápido la sensación, y te arrepentirás de no haberme usado, eso me pasó cuando queme hasta las cenizas a tus padres. —

La estaba provocando, y aunque lo sabe cae en eso, en un rápido movimiento ella se pone de pie, pone una mano sobre el hombro del cazador, hace un poco de fuerza y la cara del hombre termina contra su escritorio, lápices y papeles caen al suelo haciendo mucho ruido, eso provoca que los cazadores afuera entraran y apuntan a Talia con sus armas, la alfa no se preocupa, segundos apenas ellos entran los vampiros hacen acto de presencia, noquean a los cazadores, Gerard levanta su cabeza, la nariz goteaba sangre.

— Eres predecible. — Dice el cazador echando la cabeza hacia atrás para detener el sangrado.

— Solo te di lo que esperabas de mí. —

Gerard mira a los vampiros sin asomos de sorpresa. — Así que es cierto que tienes a come ratas trabajando contigo. — Los cazadores hicieron un tratado con los vampiros hace décadas, ellos no los mataran si cambian su dieta de humanos a ratas, cuando los cazadores tomaron el poder a controlar los sobrenaturales fue un mal momento para muchas especies, especialmente para los vampiros y werewolfs.

Bite your hate | Teen Wolf [Universo mates 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora