Danganronpa: Carpe Diem Memento Mori

Guion Hipotetico 2

Todo ese mundo virtual al que Makoto arrastro arbitrariamente a toda esa gente se estaba haciendo pedazos. La Enoshima gigante solo se transformaba en pixeles luego de que Usami, la mascota del Neo World Program, le castigara al punto de destruirla. 

El vio como todos estaban desapareciendo lentamente como si fueran poco a poco siendo succionados por la realidad que les esperaba del otro lado de ese programa. Pero por alguna razon pese a que todo se estaba consumiendo en un manto oscuro y vacio, el no se desconectaba y empezo a temer que estuviera encerrado para compartir el mismo final que Enoshima.

— ¡¿QUE ESTA PASANDO?! — El miro a su alrededor rogando por que sus amigos tambien hubieran desaparecido. — ¿Me quede solo? ¡Alter Ego! ¡Ayuda! —

Una risa muy particular aparecio en aquel vacio oscuro y silencioso. 

Era tan obvio de pensar quien seria que hasta me causo miedo el tener razon. Alli la vi, era ella, y esta vez era su viva imagen casi sacada de mis memorias. Me observaba con una sonrisa amplia como siempre y su belleza no tenia parangon, era ella en todos sus detalles.

— Upupupu... Eso es, Makoto, cae en la desesperacion mas decepcionante a mi lado. ¿A que es bello el final de la vida? — Le observe en silencio. — ¿Hola? ¿Hablo con mi marsupial preferido? — Ella hizo una pantomima sacando su telefono rosado y jugando un poco. — ¿Ya no estas tan enfrascado en...

— Anda, termina con esto, Enoshima. Ya te he perdonado hace un tiempo. —

Enoshima estaba alli con los brazos cruzados y parecio descolocada cuando le hable.

— ¿Que me has perdonado? ¿De que vas? Oh... Ya entiendo... En honor a los viejos tiempos y tu amor por mi quieres... —

— No quiero nada mas de ti, Enoshima. Ya hemos jugado lo suficiente ¿No? — Le sonrei ante la incredula mirada de ella. — Despues de todo, no es la primera vez que jugamos asi. Estoy intentando limpiar todo el desastre que has hecho, porque es lo que hace la gente que en realidad te quiere y te comprende. Tu sabes mejor que nadie que nunca busque cambiarte, si no que seas sincera conmigo, puesto que yo siempre pense en ti como alguien importante para mi. — 

Me acerque sonriendole como hacia siempre, en aquel entonces, y ella parecia sumamente aterrada al punto que casi se pone alli a chillar por auxilio.

— ¡AUXILIO! ¡AUXILIO! ¡Policia! ¡Aqui hay un loco esperanzado psicopata persiguiendome! — Actuo como si estuviera en panico y me observo de reojo sonriendo. — No has perdido para nada tu patetismo ¿Verdad? — Suspire mientras le observaba inclinando la cabeza hacia arriba. — Aun sigues tan petizo como siempre ¿Eh?—

— Te recuerdo que esta imagen que traigo es la que pertenece a aquel entonces cuando tu y yo eramos compañeros de clase. — Ella suspiro.

— ¿Acaso te piensas que no tengo esa informacion en la cabeza? —

— Pienso que como siempre te haces la estupida para jugar conmigo. — Ella dio un pisoton dandome toques en la cabeza con sus uñas.

— No te mofes de mi solo porque me conoces un poco mejor que antes. —

— ¿Tan solo un poco, Enoshima? — Le sonrei alegremente.

— ¡¿PUEDES PARAR CON ESA ESTUPIDA SONRISA DE IDIOTA CONTENTO?! ¿No estas asustado acaso de morir conmigo? — Me sonrio sintiendose superior y me rei de ella.

— ¿Realmente te creiste que no estaba en mis calculos esa posibilidad? — Su rostro se deformo a una triste y busco entre sus cosas unos hongos para ponerlos en su cabeza y modifico su peinado. — Je... Que recuerdos.