ɴᴀʀᴜᴛᴏ sʜɪᴘᴘᴜᴅᴇɴ 𝖿𝖺𝗇𝖿𝗂𝖼
La aldea que todos creía perdida, cambiará el destino de más de uno.
→ escrita entre: O6.O1.2O2O - 31.O3.2O2O
━ primer libro de la saga Serendipity.
━ spin-off: Owari, Carmín y Ai.
━ segunda temporada: Ónix.
━ tercera t...
El espectáculo de fuegos artificiales estaban en su máximo esplendor. El pelinegro se aferraba al cuerpo de su novia entre sus piernas quien apreciaba el paisaje, le había dicho que sí, después de haber sido un completo patan con ella.
Verla irse con lágrimas en los ojos esa mañana por su culpa había roto su corazón, se odiaba a sí mismo por hacerla llorar, en vez de ir detrás de ella decidió que buscaría una mejor forma para decirle lo que había estado planeando desde hace tantos meses.
Unos días antes de la boda de su mejor amigo se dirigió al país del rayo para buscar una piedra en especial que se asemejara a su amaba.
Un rubí.
Luego busco el mejor joyero para que pudiera hacer el anillo de compromiso para su novia con sus estrictas indicaciones. Desde que le propuso que sea su novia se había encargado de memorizar el tamaño de su dedo anular izquierdo para ese momento tan perfecto para ambos.
La felicidad se sentía en el aire alrededor de esa pareja.
Nakumi descansaba sobre el pecho de su amado, sus fuertes brazos rodeaban su cintura haciéndola sentir, hoy más que nunca, amada y protegida.
— Amor mío —susurró el Uchiha detrás de la pelirroja— deberíamos irnos.
Ella salió de su agarre y se arrodilló frente a su novio, negó levemente, colocó sus manos en las mejillas contrarias acariciándolas con suavidad.
En un segundo el escenario cambió a causa de la pelirroja, estaban en medio del bosque, donde había sido su primer abrazo.
La luz de la luna alumbraba sobre ellos acompañada de la luz de las velas que inundaban el lugar con un olor a vainilla, tan semejante al de su cabello, el cual volvía loco a Sasuke.
Él observaba como la mirada de su novia permanecía en sus labios, quiso sostenerla por la cintura pero ella entrelazó sus manos con las suyas antes que pudiera tocarla. Se fue acercando lentamente a él hasta que se vio obligado a apoyarse sobre sus codos, ella se sentó sobre su cadera con su rostro pegado al suyo.
Ninguno hablaba, tal vez no era necesario.
La iniciativa la tuvo la Uzumaki pero no fue difícil para el Uchiha continuar con ella, atrapó sus labios en un beso tierno. Era posible para ambos demostrarse su amor mutuo por medio de una caricia física.
Él tomó su nuca para profundizar la batalla entre sus labios, tuvo más acceso a toda la cavidad bucal de su amaba, lo que antes fue un beso lleno de amor ahora se le había unido el deseo de los enamorados. Sostuvo las caderas femeninas en sus manos apretándolas aún más a las suyas, por la intensidad del beso ella hacía pequeños movimientos con esta que empezaba a enloquecer al pelinegro.
