ɴᴀʀᴜᴛᴏ sʜɪᴘᴘᴜᴅᴇɴ 𝖿𝖺𝗇𝖿𝗂𝖼
La aldea que todos creía perdida, cambiará el destino de más de uno.
→ escrita entre: O6.O1.2O2O - 31.O3.2O2O
━ primer libro de la saga Serendipity.
━ spin-off: Owari, Carmín y Ai.
━ segunda temporada: Ónix.
━ tercera t...
Uno de ellos la analizaba profundamente, la chica tenía el cabello recogido y estaba con su ropa de entrenamiento; su rostro, sus piernas y sus brazos tenían manchas de tierra, nunca la había visto así, se notaba que había tenido un duro entrenamiento solo esperaba que no la hubieran lastimado, para él seguía siendo igual de hermosa.
Le molestaba que el inútil de Daiki esté a su lado.
El otro estaba emocionado y feliz por la chica, en poco tiempo asumiría un cargo parecido al de Hokage, al que él aspiraba, la había extrañado en las tres semanas que habían pasado desde que dejó su aldea.
— ¡Nakumi! —volvió a gritar Hanae— ¡No te quedes ahí parada, acércate a saludar!
El rostro de Nakumi se tiñó de rojo, estaba consciente que estaba llena de tierra y llena de sudor, no podía acercarse a saludar así. Dio media vuelta y corrió hasta su habitación dejando a sus visitantes confundidos.
— ¡Nakumi! —gritó Daiki— ¿Qué le sucedió? —le preguntó a la otra pelirroja.
— Pobrecita, está avergonzada —dijo Hanae— estuvo tirada en la tierra como media hora luego de su entrenamiento.
Naruto rió ligeramente mientras que Sasuke miraba por donde Nakumi se había ido, ¿acaso no quería verlo?
— Iré a buscarla —avisó Daiki, Hanae lo detuvo.
— Vayan ustedes —les dijo a los invitado— yo misma les enseñaré su habitación.
— ¡Hanae! ¿Qué crees qué haces?
La voz de su tío Toshio la detuvo, el viejo observaba a los invitados desde el balcón del segundo piso de la mansión.
— Tío Toshio, estos dos muchachos vinieron a ver a Nakumi —chilló emocionada— ¿No son tiernos?
— Buen día Toshio-sama —habló Naruto.
— Buenas tardes.
Ese viejo no le caía para nada bien al pelinegro.
Toshio Uzumaki los saludó con una seña con la cabeza.
— Hanae, muchacha, dos varones no pueden entrar a la habitación de una princesa —dijo el pelirrojo.
La trataba mejor que a Nakumi, pensó Sasuke.
— Pero tío Toshio, Daiki siempre andaba en la habitación de Nakumi —protestó.
Sasuke dirigió su mirada al castaño ahora sonrojado, no había visto en sus recuerdos de Nakumi que tuviera una relación con ese inútil y no creía haberlos pasado por alto.
— Cla-claro que no Toshio-sama —se defendió el castaño.
El viejo se hizo a un lado del balcón, intercambio palabras con alguien para luego irse, en su lugar apareció cierta chica de cabello escarlata. Miraba a su prima y a su amigo enojada, ambos al verla corrieron de vuelta hacia la casa.
