Confusión entre el amor y el respeto.

Capítulo 15. Viaje/Parte I (Excusa Nocturna)

Año 849

Habiendo pasado no mucho tiempo desde el tan esperado compromiso del Capitán y su subordinada, seguía siendo un tema que evitaban tocar a toda costa delante de alguna otra persona ajena a ellos y reprimirse públicamente.

Y un día cualquiera, surgió un viaje que ellos no esperaban. Era un viaje fuera de las murallas, después de tanto tiempo volvía a organizarse. Cerca del bosque en una zona que ya había sido localizada y caracterizada por no ser riesgosa por la falta de circulación de titanes.

Evidentemente dormirían al aire libre, y cada quien llevaría su tienda siendo acompañados por Hanji, quien había sido la responsable de organizar todo.

Partieron una mañana y se instalaron durante la tarde, sería un viaje breve en busca de un escuadrón que yacía ya varios meses perdido y del cual no habían recibido señales ni encontrado sus cuerpos. Evidentemente Hanji lo aprovecharía para estudiar el terreno y dado se diera el caso, estudiar el titán que se presentase.

La segunda noche después de haber recibido órdenes y la explicación general de lo que haría cada sección, ya todos se encontraban preparándose para descansar cuando Hanji entró a la tienda de Levi.

—Muy buenas noches, Levi -dijo con entusiasmo pero evidenciando su fatiga- Hoy fue un día bastante largo, agotador en definitiva, pero te aseguro que valdrá la pena -comenzó a sentarse en una silla cercana a la colcha de dormir de Levi mientras seguía hablando.

—¿Qué crees que haces, cuatro ojos? -la interrumpió rápidamente Levi- es tarde y yo también estoy realmente cansado.

—Es que hay muchos puntos que me mantiene inquieta y no puedo esperar a mañana, debo comentarlos con alguien. Siento que estamos jodida mente cerca de nuestro objetivo...

—Calla -la interrumpió Levi- ve a dormir y dame un respiro -dijo comenzando a levantarla y echándole de su tienda- ve a desahogarte con uno de tus estudiantes sedientos de información y conocimiento.

—No entiendo porqué disfrutas tanto tratar a la gente como basura, Levi -le dijo triste y con el ceño fruncido.

—No lo hago, simplemente estoy muy cansado y no quiero escucharte ni a ti ni a nadie -giró su mirada al cielo- Es tarde, qué descanses cuatro ojos - cerró su tienda.

—Jódete, enano -partió en busca de un novato para molestarlo tratando de aliviar su emoción.

Levi pasó un par de minutos ordenando su tienda y sacudiendo sus prendas, sacó uno de sus libros y se acomodó en su colcha abriendolo y comenzando a leerlo.

Así pasó al rededor de una hora cuando escuchó un ruido fuera de su tienda y se puso automáticamente alerta, giró su mirada hacia la entrada y observó como se abría lentamente provocando que se levantará con rapidez y caminara en esa dirección con sigilo. Una vez abierta la tienda soltó un suspiro.

—¿Por qué sigues despierta? -le preguntó serio.

—Quería pasar un rato contigo, casi no te vi en todo el día -le dijo en un susurro.

—Son casi las 2 de madrugada, deberías estar durmiendo.

Petra lo calló de un beso provocando que este retrocediera dos pasos por la sorpresa. La tomó de la cintura y la alejó.