Levi había tomado la decisión de dejar descansar a Petra a solas, necesitaba despejar su mente y darle su espacio.
Y así lo hizo, pasó largos minutos vagando por la cocina intentando despejarse. No había mucho que hacer puesto que no había comida y el día anterior habían limpiado absolutamente todo. Esa sensación lo estaba consumiendo, el no saber qué hacer y abstenerse de cualquier tipo de declaración hacia cierta pelinaranja lo tenían intranquilo, así que decidió prepararse un té y esperar abajo hasta que su escuadrón regresara.
Por otro lado, Petra comenzaba a aburrirse, se sentía inútil estando simplemente recostada y sin poder hacer nada.
-No es justo, no puedo hacer nada, ni siquiera tengo permitido levantarme, esto está comenzando a ser abrumador...-pensaba Petra posando su mirada fijamente en la pared de enfrente.
No quería arriesgarse a ser castigada, pero realmente necesitaba acudir al sanitario, así que después de procesarlo unos segundos, se levantó muy lentamente de su cama y se acercó con cuidado hasta la puerta de su habitación. Lo pensó una última vez antes de salir y finalmente lo hizo, abrió su puerta lentamente y asomó su cabeza a través de ella intentando asegurarse de que El Capitán no se percatara de su "desobediencia".
Con discreción se dirigió con cuidado hacia el baño, intentando hacer el menor ruido posible, sin embargo, tras acelerar un poco el paso, se sintió raramente mareada y con náuseas, su cabeza comenzó a atormentarla y no pudo evitar dejarse caer sobre la pared más cercana con brusquedad. Cubrió su boca y rápidamente se adentró en el bañó cerrando fuertemente la puerta detrás de ella.
El cuartel estaba solo, y por ende, el silencio inundaba todo el lugar, cualquier clase de ruido se agudizaría en un lugar tan silencioso, y así fue. Levi al escuchar El Fuerte portazo proveniente desde arriba, se sobresaltó y lo primero que se le vino a la mente fue el estado de Petra, se angustió y se levantó con rapidez dirigiéndose a la parte superior con intención de asegurarse de que su pelinaranja se encontrara bien.
Al estar en la parte de arriba, se dirigió al cuarto de Petra y sin ningún tipo de prudencia o intención de tocar, se adentró en él. Pero no encontró lo que esperaba...estaba solo, el cuarto estaba solo.
Una parte suya estaba sumamente molesta, le había dicho que no se moviera, pero por otro lado razonó las cosas y se dio cuenta de que probablemente lo necesitaba con urgencia, aún así seguía angustiado y decidió ir al lugar en el que él suponía que encontraría la chica, el baño.
Tocó con suavidad pero con urgencia la puerta, no obtuvo la respuesta que quería. No era la culpa de ninguno de los dos, después de todo la pelinaranja se encontraba indispuesta, no podía controlar su nauseas y dolor de cabeza.
A pesar de haber escuchado tocar la puerta se negaba a que su capitán la viera así. No iba a causarle más problemas y angustia por otro de sus molestos malestares, no se lo permitiría...
-¡Petra!, ¡abre en este instante la puerta!, no sé qué mierda estés haciendo, pero quiero que abras la puerta, ¡Ahora!-intentaba sonar autoritario.
Petra se tensó al escuchar la voz de su capitán, y a juzgar por el tono de su voz sabía que debía abrirle, y se disponía a hacerlo hasta que sus náuseas la obligaron a retroceder y sin remedio alguno revolver su estómago vomitando en el retrete.
A pesar de tener la puerta de intermedio, Levi logró escucharla vomitar. Su angustia aumentó, y por obvias razones no insistió más en que le abriera. Entendió que debía esperar, la puerta tenía llave y al parecer ella no se encontraba bien, pero tenía una necesidad inmensa de atenderla y asegurarse de que mejorara.
No era el más paciente, y en situaciones como esa podía llegar a ser menos tolerante que de costumbre.
Decidió recargarse sobre la pared a esperar por su pelinaranja, tratando de calmarse.
Mientras tanto, Petra, terminando con esa molesta necesidad a la que se había visto obligada por sus náuseas, se levantó muy despacio y comenzó a limpiar. Una vez habiendo terminado se dirigió al lavabo y lavó sus manos y rostro, enjuagó su boca con poca energía, después se miró detenidamente en el espejo y se alarmó, estaba demasiado pálida. Lo que más la preocupaba era salir y que el Capitán la viera así, sin embargo, no tenía opción.
Se miró una última vez en el espejo y tocó su rostro con una de sus manos y con la otra acomodaba su cabello y mechones. Se dirigió hacia la puerta y comenzó a abrirla lentamente.
Levi al notar cómo se abría la puerta acomodó su postura y fijó toda su atención en la puerta.
Petra salió con lentitud del baño evitando en su totalidad la mirada de Levi, no quería que la viera así, intentó ignorarlo y comenzó a caminar hacia su habitación. Sin embargo, Levi al notar su evidente indiferencia tomó un brazo suyo y la obligó a que posara su rostro frente al de él.
-Petra...-dijo al notar su palidez y que se encontraba relativamente más débil, no pudo evitar preocuparse.
Petra evitaba por completo el contacto visual, no lo quería ver después de saber que la había visto en ese estado. Su falta de equilibrio la obligó a apoyarse en el brazo de su acompañante, pero al percatarse intentó alejarse y sujetarse de la pared.
Levi dejó que se alejara y observó cómo avanzaba, intentando evaluar si lo que estaba por hacer estaría mal y si a ella le molestaría. A pesar de cual fuese el resultado, lo iba a hacer sin importar qué.
Y así lo hizo. Petra sintió como una presencia detrás suyo se acercaba a paso acelerado, y se tensó.
Levi se acercó a ella con urgencia y en un rápido movimiento la levantó con delicadeza cargándola y sujetándola con firmeza y dirigiéndose a su habitación.
Petra por su parte se sobresaltó y sonrojó mucho al sentir su cuerpo contra el de Levi, no sabía porqué su reacción tan repentina, pero no pudo evitar sostenerse con las pocas fuerzas que tenía de su cuello.
-Capitán...yo...perdóneme, no se hubiera molestado, estoy bien...por favor, no se preocupe, puedo caminar-dijo apartando su vista sumamente sonrojada con su corazón latiendo fuera de lo normal. Ese contacto no la incomodaba, realmente lo estaba disfrutando, pero no quería acongojar a su capitán, sin embargo, se sentía realmente débil.
Levi se detuvo un momento y la miró detenidamente y con dulzura aún teniéndola en sus brazos.
-Petra...-dijo suavemente-déjame cuidar de ti...por favor, tú no te encuentras bien, deja de preocuparte de si llegas a molestarme o no, nunca me molestará atenderte ni estar cerca de ti, sólo quiero que estés bien, ahora por favor, relájate.- terminó de decir mientras retomaba el paso a su habitación.
Petra al escuchar sus palabras no pudo evitar mirarlo con sorpresa mientras la sensibilidad la invadía amenazándola con dejar salir sus lágrimas. No fue capaz de hacer otra cosa más que sonreír y acercarse a su pecho, sabía que no debía, pero una parte suya se sentía con la necesidad de acercarse a él aún más.
-Gracias...-dijo con su rostro contra el pecho de su acompañante-Gracias capitán...
Levi se sintió aliviado y sonrió levemente. Después de todo no se había molestado en que la cargara, se limitó a asentir y acercarla más a su cuerpo mientras se dirigía a su habitación.
⚔️❤️⚔️❤️⚔️❤️⚔️❤️⚔️❤️⚔️❤️⚔️❤️⚔️
Hola a todos!!!
Perdón por haber tardado en la actualización, mis vacaciones terminaron y había tenido muchos pendientes, pero trataré de actualizar por semana.
Espero les haya gustado! Los quiero y agradezco mucho a los que leen♥️
Pd: si quieren que los capítulos sean más largos o más cortos les agradecería que me dijeran en los comentarios :3
Adiós!
ESTÁS LEYENDO
Confusión entre el amor y el respeto.
Fanfiction\\\Antes que nada, quiero aclarar que los personajes y el universo en el que se desarrolla la historia, no me pertenecen, le pertenecen a Hajime Isayama./// RIVETRA Acaso el respeto y la admiración, ¿pueden confundirse con el aclamado "amor"?; Acaso...