Mi Querida Dama

Entre Confusiones y Confirmaciones

Narra Alice//

Estoy a las puertas de el elevador esperando que venga Giselle y... la verdad es que siento que estoy dormida, en este momento todo esto me parece irreal, que mi mejor amiga de la infancia haya vivido enamorada de mi desde hace tantos años... son rendirse, sin alejarse, amándome en silenció, dejándome buscar la felicidad en otros labios y que hoy por fin me lo haya confesado, que me haya dicho ese te amo que tenía atorado en la garganta, que yo la haya besado y que ahora sienta el enorme deseo de quedarme con ella... todo me parece un sueño del que honestamente no quiero despertar. Es extraño pensar en todas las veces que pude haber lastimado de alguna forma a Giselle... empezando con mi compromiso, eso debió dolerle mucho y yo jamás me di cuenta de lo que estaba pasando.

Mi mente se detuvo cuando sentí a alguien rodearme la cintura con sus brazos, en seguida el dulce perfume de Elle se impregnó en el aire y por algún motivo me hizo suspirar.

¿Ahora suspiras por mi? -pregunto con diversión mientras se ponía frente a mi-

Eso parece -dije avergonzada-

Ella me sonrió con dulzura antes de llamar al ascensor, en cuanto las puertas se abrieron ambas entramos, estando juntas y en silencio me fue inevitable buscar el rostro de mi acompañante y justo cuando la mire ella también me miró así que ambas volteamos en otra dirección con nerviosismo, de pronto sentí sus dedos rozar los míos, la mire notando que aún se mantienen mirando a otro lado así que mantuve mis nervios a raya y tome su mano como lo hice hace un rato en el auto, ella me miró y una sonrisa preciosa se plasmo en su rostro, tuve ganas de besar esa sonrisa pero las puertas del ascensor se abrieron asi que de la mano de Elle salí de el cubículo metálico, poco después ya estábamos dentro del departamento.

¿Vino? -pregunto sonriente-

Claro -rapidamente se fue con rumbo a la cocina-

Arrojé mi bolso en el sofá y luego me senté a su lado, observé hacia la cocina con cierta impaciencia por ver salir de ahí a Giselle... ¡Que raro! Todo esto ya de por sí es muy nuevo y si le aumentamos las sensaciones que no había sentido hasta hoy todo se vuelve aún más extraño... me confunde tener tantos sentimientos al mismo tiempo y me confunde aún mas no haber notado que los tenía.

¿En qué piensas? -cuestiono la castaña tendiendome una copa de vino-

En lo confuso que es esto... -respondí sincera-

¿Confuso? -enarco una ceja-

Si -sonreí ligeramente- es que yo jamás pensé que podríamos ser algo más que amigas, siempre pensé que mis sentimientos por ti eran de amistad... incluso pensé que mis celos por Agnes eran simplemente por qué era una amiga posesiva y egoísta -admití avergonzada- la verdad jamás me pasó por la cabeza que mis sentimientos estuvieran más allá de una amistad y tampoco me había planteado que los tuyos fueran más que una amistad...

Bueno, yo jamás pensé que tú fueras a corresponderme... en todos estos años jamás demostraste interés por alguna chica y particularmente no demostrabas esa clase de interés en mi -dijo nerviosa-

Tú tampoco demostrabas interés por las chicas y ocultaste muy bien tu amor por mi -afirme-

No demostraba interés por las chicas por qué ninguna de ellas me interesaba... -bajo la mirada- cada vez que quería relacionarme de alguna forma con una de ellas siempre terminaba comparándolas contigo y al final regresaba a lo mismo, ninguna de ellas eras tú y por eso ninguna obtenía mi atención

Yo creo que jamás me plantee la idea de ser homosexual o bisexual... Jamás me había atraído una chica -ella me miró con ternura-

¿Yo te atraigo? -pregunto curiosa-

Lo pensé un momento... sin duda Giselle me parece una chica demasiado bella, pero creo que mi conexión con ella va más allá de la atracción...

Cuando te veo... yo no veo solo una cara bonita, veo todo lo que me has demostrado que eres en todos estos años que llevamos de conocernos -sonreí- lo que siento es más que atracción...

¿Amor? -pude ver claramente la ilusión en su mirada-

No puedo decirte si es el amor que esperas por qué realmente estoy muy confundida, no sé con exactitud que es lo que siento... pero puedo decirte que es fuerte y me hace desear que estés conmigo siempre como ha sido hasta ahora

Eso es más que suficiente por ahora -susurro con una sonrisa-

Me quitó la copa de las manos para ponerla junto a la suya en la mesita de centro, me miró y por primera vez pude ver de forma nítida el amor que ella dijo tenerme hace un rato... Fue hermoso ver ese brillo en sus ojos y esa sonrisa en sus labios, me alegro verla feliz, liberada y sintiéndose satisfecha con nuestra situación. La castaña me tocó la mejilla con sus dedos, rozando de forma casi imperceptible mi piel; se acercó a mí lentamente sin dejar de observarme fijamente, cuando su rostro estuvo cerca de mi rostro un suspiró brotó de sus labios y finalmente me besó, movió sus labios con calma como si quisiera aplazar nuestro beso por el resto de nuestras vidas, sus labios suaves acariciaban los míos de una forma tan dulce que me ví inmersa en la sensación que dejaban. Ella en ningún momento intensificó el beso, no trato de ir más allá de ese roce inocente y eso me hizo sentir realmente amada... me demostró que su amor por mi no es efímero ni es un capricho, Giselle me ama de forma sincera... como tal vez yo la amo a ella.