Mi Querida Dama

La Noticia

Las noticias siempre llegan a quienes menos queremos que lleguen, eso es algo que todos sabemos, y que apesar de eso, nadie espera que ocurra. Cuando un suceso importante ocurre en la vida de alguien es más que obvio que tarde o temprano será bien conocido al menos por la gente más cercana a su círculo social, es algo lógico... Pero no siempre es algo bueno o algo deseado.

Detesto que tengas que ir a trabajar -admiti como una niña pequeña-

Tampoco quisiera tener que ir, pero ya tuve suficientes vacaciones -dijo la morena mientras termina de cepillar su cabello-

Esta usando un traje color negro con una camisa blanca debajo y sus tacones favoritos, lleva un maquillaje sutil y su cabello suelto al natural.

Te ves preciosa -admiti-

Tú no -afirmo divertida- tienes saliva seca en la boca -dijo entre risas mientras la miraba tratando de no reírme- no es cierto -se acerco y me besó efímeramente- luces hermosa...

¿Quieres desayunar antes de irte? -pregunte sonriente-

Claro, aún me queda una hora para salir -afirmo-

Me puse de pie rápidamente, envolví mi cuerpo semi desnudo en una bata y así salí hacia la cocina. Admito que apesar de que está rutina no es nueva, toda la experiencia de levantarme de la cama y hacerle el desayuno, eso sin contar que está vez despierto a su lado, me hace sentir algo... extraña, es una sensación única y bastante agradable, creo que es algo que le hacía falta a mi rutina y sin duda me alegra estar viviendo esto con ella. Antes de que terminara de hacer el desayuno la morena salió de la habitación con su bolso y un portatrajes negro dónde lleva su bata de doctor.

Huele delicioso, mi amor -se acerco a mi y plantó un beso en mi mejilla- ¿A qué te puedo ayudar?

Eh... Sirve el café, no quiero que incendies mi cocina -dije divertida ganandome una mirada asesina de su parte- ahora estamos en empates

Graciosa -sonrio-

Se acercó a la gaveta y saco dos tazas de ella, luego se puso frente a la cafetera y justo cuando iba a servir las tazas el timbre resonó por todo el lugar.

¿Esperamos a alguien? -negue- bueno, iré a ver quién es

Sin más la vi desaparecer con rumbo hacia la puerta, no escuché nada más que la puerta abrirse, todo se sumió en el silencio así que decidí apagar la estufa y dirigirme a ver qué ocurre encontrándome con la respuesta a el estremecedor silencio... Bastian.

Hola, Elle -dijo el castaño, la morena volteo a verme con gesto de pánico y quise llorar-

Hola... -susurro nerviosa-

No se pongan asi, chicas -pidio- me dijeron que ahora estaban juntas... Que de hecho se comprometieron y yo solo quería venir a verlas...

El ambiente no podría estar más tenso, el castaño luce muy triste y admito que eso me destroza... El sin duda no merecía nada de lo que pasó, nosotras lo metimos en algo en lo que realmente el ni tenía nada que ver, y si, eso me afecta... No lo cambiaría, pero eso no quita el hecho de que hubiera deseado que fuera diferente para el.

Así que... Tú eras LA otra persona -afirmo-

Pues... eso creo -dije avergonzada-

Alice... ¿Estás bien? -pregunto el chico y la morena negó con la cabeza-

No sé que decirte... -susurro la castaña con el nervisismo evidente en su rostro- yo... Lo lamento... Esto no estaba en nuestros planes...

No tienes que explicarme nada, Alice... -interrumpio el castaño con gesto triste- yo solo vine para saber si la noticia era real... No te estoy pidiendo una explicación y tampoco se la estoy pidiendo a Elle -me miró con una ligera sonrisa- no vine a pelear ni a juzgarlas, al contrario... Yo les deseo lo mejor, claro que hubiera deseado que lo hubieras encontrado conmigo -admitio- pero no fue así y yo solo quiero que seas feliz... Sí tu felicidad está con ella yo estaré feliz -le tomo la mano y depósito un beso en su dorso- creo que ustedes siempre estuvieron destinadas a estar juntas, no he conocido a unas personas que tengan la conexión que ustedes tienen y me alegra que hayan encontrado lo que necesitaban...

Gracias, Bastian -me acerque a él y bese su mejilla-

Eres una buena chica, Elle... Espero que la cuides muy bien -asenti-

Alice se acercó, yo me hice a un lado sabiendo que es hora de su cierre definitivo con el; la morena lo abrazo y el correspondió con fuerza, de alguna forma pude notar un cambio en el ánimo de Bastian y eso me hizo sentir mejor.

Gracias por todo... -dijo la morena con la voz entrecortada-

No me lo agradezcas -sonrio- solo se feliz... -beso su mejilla- adiós, Ali...

Sin más se fue dejando ese capítulo cerrado, la morena me miró con los ojos humedecidos y una sonrisa en el rostro que me hizo sentir confundida.

Creo que no fue como esperaba -se acerco a mi y me abrazo- espero que el encuentre lo que yo encontré...

Yo también lo espero -me aleje un poco de ella y planté un beso en sus labios-

Ahora soy completamente tu problema -afirmo-

¡No! Voy a buscarlo para decirle que podemos compartir la custodia -me moví para "irme" pero la morena me apretó más contra ella-

Muy tarde, ya soy tuya completamente -sonrei y asentí emocionada-

Vamos a desayunar, problemita -me safe de su agarre y camine con rumbo a la cocina-

No tardamos mucho en sentarnos a la mesa y iniciar nuestro primer desayuno como una pareja comprometida, libre y enamorada a morir.