Al principio, después de oír su pensamiento sobre que nosotras terminaramos casadas y con una familia, me pareció algo lindo que sin duda hizo que mi corazón se acelerará y me hizo volar como dije que no lo haría...pero de pronto todo eso se fue, mis alas se esfumaron de golpe y caí sobre la realidad, la realidad de que estoy a prueba y que existe la posibilidad de que cuando Bastián regrese, ella se vaya con el y me deje aquí con el corazón roto.
¿Que dijiste? -pregunte molesta por mis turtuosos pensamientos-
¿Eh? -me miró confundida-
No hables de un matrimonio entre nosotras como si no significará nada para mí... Tal vez para ti es una broma, pero a mí me emociona pensarlo y me duele que lo digas como si fuera nada -me levanté del sofá y sin más me fui directo a mi habitación-
El dolor se hizo presente de nuevo en mi pecho, otra vez senti a mi corazón romperse y el repentino deseo de llorar se hizo presente en mi. Es extraño como una frase inocente que pudo alegrarme la noche se volvió una pesadilla, pero al final es lógico que esto esté pasando por qué así como Alice no está segura de lo que siente, yo tampoco tengo asegurado mi lugar en su vida... Las cosas pueden cambiar para bien o para mal y no quise pensar mucho en eso por qué sabía que me dolería darme cuenta de que apesar de todo... aún puedo perderla.
Entre a mi habitación y cerré con un portazo, me deje caer frente a la puerta con las rodillas flexionadas y la cabeza contra ellas... Entonces dejé fluir las lágrimas, llore como no lo había hecho desde el día en que le confesé mis sentimientos, me sentí desesperada, triste y las palabras de Alice solo se repetían en mi mente aumentando la agonía. A mi mente llegaron imágenes de como sería mi vida sin Alice... Se veía triste, monótona, sin ningún color más que el gris, pude ver el dolor plasmado en mis ojos, distingui la sonrisa falsa en mis labios y pude escuchar claramente los sollozos nocturnos que brotaban por mi boca cuando nadie más miraba.
Giselle... -dijo la morena mientras tocaba la puerta- abre la puerta...
¡Vete! -grite sollozante-
¡Explícame que ocurrió! -grito de vuelta- vienes a llorar y yo ni siquiera sé exactamente qué hice mal...
¡Todo, Alice! ¡Todo está mal! -me puse ambas manos en la cabeza sintiendo como la respiración me faltaba-
Por favor... hay que hablar de esto... Podemos resolverlo juntas, pero necesitas tranquilizarte -dijo mientras giraba el picaporte de la puerta-
Cuando abrió la puerta me hizo retroceder un poco, no la mire solo pude seguir llorando mientras ella se sentaba a mi lado en completo silencio.
¿Que ocurrió...? -pregunto en voz baja- creí que estábamos bien... Y bueno, sé que hice mal en tomar eso a la ligera, pero fue algo que se me ocurrió... Me pareció algo muy tierno imaginarnos como madres de una familia y pensé que te parecería igual de lindo, lamentó no haberlo pensando mejor -puso una de sus manos sobre las mías-
Estoy asustada... -dije sincera- no quería pensar en esto por qué sabría que me dolería, pero no puedo seguir ignorando que existe la posibilidad de que cuando él regresé todo esto se termine -la mire importandome poco las lágrimas que aún bajaban por mis mejillas- puede que esa familia no la formes conmigo... Puede ser que al final de estos meses sea yo quien te pierda y eso me está matando -solloce- no quiero una vida sin ti, Alice... Y sé que suena dependiente, pero no es por eso... Eres muy importante en mi vida y sé que sin ti podría seguir viviendo, pero ya nada sería lo mismo... -sonrió con dulzura- quiero tenerte cerca... Quiero escuchar tu rabietas tontas, quiero llevarte por una hamburguesa y evitar que incendies la casa -ella río- te quiero en mi vida...
Oh, Elle... -me abrazo con fuerza- ¿No sé te ocurrió que hable sobre tener una familia contigo por alguna razón? -susurro cerca de mi oído- siempre quiero estar cerca de ti, está tarde no podía pensar en nada más que en lo irresistible que te veías con ese bikini y el día de hoy Bastián ya no cuadro en mi plan de vida ideal... Hoy solo tú fuiste parte de el
Se alejó un poco de mi fijando su mirada en la mía y poniendo sus labios a milímetros de los míos. Casi grito emocionada cuando pude ver en sus ojos ese amor que yo siento por ella... Pero está vez no fue un reflejo de mi amor, está vez supe que ese amor venía de ella.
Estoy enamorada de ti... -susurro- perdón por no notarlo antes, pero estaba dividida entre lo que estaba sintiendo y lo que debía hacer con Bastián
Ya no importa -sin dejarla decir más la bese-
El beso fue intenso desde el principio, ella se apoderó de todo en mi y me dejó hacer lo misión con ella... En menos de lo que esperaba ya estábamos sobre la cama, la ropa empezó a estorbar y fue ella la primera en aventurarse a desnudarme, me quitó la fina blusa que estaba usando y luego lo hizo con mi sostén sin dejar de besarme.
Te amo... -susurre-
El corazón me latía con prisa mientras sentía sus cálidos labios recorrer desde mi cuello hasta el valle de mis pechos, sus dedos nerviosos se encargaron de desabrochar mis jeans mientras ella no dejaba de regar besos por mi torso y decir que esto es fantástico quedaría inmensamente pequeño para lo que siento en este momento. La morena se encargó de quitar mis jeans de mi cuerpo y luego invertimos posiciones cuando fue mi turno de quitar lentamente su ropa, quedé extasiada al tenerla desnuda bajo mi cuerpo.
Alice...-susurre cuando su rostro apareció de nuevo en mi campo de visión-
Giselle...-susurro al tiempo que acariciaba mi rostro con suma delicadeza-
Ella me miro con amor y ternura...como si yo fuera la cosa más bella que ha visto en su vida, haciéndome sentir cohibida e inmensamente feliz.
Te amo -dijo antes de besarme con dulzura-
Me deje hacer en sus brazos, ella se encargó de hacerme saber sin palabras que ese «Te Amo» pronunciado fue absolutamente real, me hizo sentir tan feliz como no lo había sido en muchos años, por primera vez en demasiado tiempo senti que estaba completa mientras ella me hacía el amor de una forma delicada, me regaló miradas de amor y veneración como si yo fuera una especie de deidad... Me sentí hermosa bajo su mirada.
Te amo...te amo demasiado, Elle -susurro en mi oído-
Y saber que esto es una realidad solo aumentó mi felicidad.
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Mi Querida Dama
Romance"Ver a tu mejor amiga casarse puede ser una gran dicha o la peor destrucción de todas" -Giselle Rowling Alice y Giselle son dos mejores amigas que siempre han soñado con el día en que se casen. Cuando eran pequeñas prometieron que serían la dama de...