«Control mental»
¿Cómo romper el control mental?
Dandelion y yo estábamos investigando sobre el tema, intentando encontrar la manera de liberar a Ami. El día anterior, había regresado al castillo para contarle todos los detalles que recordaba de mi visita con el oráculo. Él no volvió a sacar el tema de Arus y yo se lo agradecí, no tenía fuerza para volver a enfrentarlo en ese momento.
En la noche dormí de nuevo con Jared, intentando suprimir un montón de sentimientos encontrados. Mi hijo seguía inquieto por la ausencia de Amira y eso me ayudó un poco para volver a enfocarme en lo importante y dejar a un lado mi drama "familiar".
En ese momento, Raúl y Samara estaban con él intentando distraerlo, pero yo sabía que eso no sería suficiente. Era mi deber recuperar a su madre.
Suspiré largamente y noté como Dandelion separó la vista del libro que estaba leyendo. Acababa de llamar su atención.
—¿Quieres hablar? —preguntó.
—¿Sobre qué? —cuestioné con desconfianza.
—Sobre lo que sea que te está molestando.
Durante un segundo pensé en ignorarlo, pero me ablandé un poco al notar sus ojos amarillos llenos de preocupación.
—Supongo que solo estoy asustado —admití.
—Eso no tiene nada de malo —intentó consolarme—. La verdad, a estas alturas todos lo estamos.
—Lo sé —coincidí— es solo que siento que en un parpadeo podría perder todo lo que amo, ¿sabes?
—No lo harás —dijo—. No lo permitiremos.
—El control mental es muy distinto. No es igual a cuando... Arus la poseyó.
Dandelion ignoró el nombre que me costó pronunciar.
—¿A qué te refieres?
—Cuando estaba poseída no era ella, se notaba que alguien más controlaba su cuerpo. Ahora es diferente, es como si ella realmente quisiera hacernos daño y acabar con nosotros. Debiste ver como miraba a Raúl, solo así podrías comprenderlo.
—El control mental es engañoso —coincidió él—. No dejes que eso te afecte, tu conoces a Amira mejor que nadie.
Volví a suspirar ante su tono paternal. Todo hubiera sido mucho más fácil si él hubiera resultado ser mi verdadero padre, me parecía hasta más lógico, aunque sin duda Arus era mucho mayor que Dandelion.
—Le dije que la amaba, cuando estábamos en el infierno —le conté— y durante un segundo se congeló y dudó... pero no fue suficiente. Se recuperó y con una mirada fría me respondió que ella no me ama.
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Sunforest 2. Joham Rey. [Disponible en físico]
Fantasy«Crucé mis brazos y observé algunos segundos el cielo. Hace poco que había anochecido y pinceladas de distintos colores pintaban la noche oscura. Nunca me cansaba de ese espectáculo. Ni de ese cielo. Ni de esa paz. Hacía ya seis años que Isis había...