34. Tú.

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Después de clases ignore disimuladamente a Michael, esperando que me mandara un mensaje, el cual no tardo en llegar.
De: Michael. Para: Andy.
No sabes. La chica que me gusta me ignora, esta molesta y no se que hice mal.

De: Andy. Para: Michael.
Pues deberías saberlo, Clifford.

De: Michael. Para: Andy.
¿Como sabes mi apellido? ¿Quien eres?

De: Andy. Para: Michael.
Bueno, creo que de la parte que formo en tu vida debería saberlo. ¿Porque no miras por la ventana?

De: Michael. Para: Andy.
¿Andy?

De: Andy. Para: Michael.
Dejame en paz. ¿Si? Maldito mujeriego, mentiroso acosador. Te pido que NO me busques, no te me acerques jamás en la vida ¿Entiendes?

Lágrimas amenazaban con salir, me sentía idiota, usada, todos los chicos eran iguales, como político electo.

De: Michael. Para: Andy.
¿Porque?

De: Andy. Para: Michael.
Eres como los demás. Mira, solo... Dejame en paz.

Pff, estúpidos hombres. Salí de la habitación rumbo a la cocina, tenia hambre, y no por el hecho de que me sintiera fatal por dentro dejaría de comer... Otra vez. Hoy, por alguna razón ni mi hermano ni su novia estaban en casa, talvez Calum tampoco, pero era más posible que él estuviera aquí, mi hermano lo quemaría vivo. El sonido de la puerta siendo golpeada interrumpió mis hermosos pensamientos sobre Michael (Nótese el sarcasmo).
«Hablando del rey de Roma» Pensé al abrir la puerta.

-Gordon- Dije fríamente.

-Mira, odio que me llamen así, pero me gusta como sale de tu boca.

-¿Algo más?

-Si. No tengo idea de que error cometí, pero lo siento. Estoy muy arrepentido.

-¿Te puedes ir ya?- Dije rogando que no intentara algo más, era capaz de ceder.

-No, vine con Calum.

-Él no esta.

-Mentirosa, hace menos de ocho minutos lo vi entrar por esa puerta.

-Si que te gusta acosar a las personas, eh.

-No, eso es una perdida de tiempo, a menos que se trate de ti. ¿Me perdonas?

-No.

-¿Por favor?

-No.

-Anda di que si.

-Responde a mi pregunta. ¿Quién es la chica de la que hablabas en los mensajes?

-¿Porque quieres saberlo? Me has dicho millones de veces que no importa nada de mi.

-Michael... Yo no... Tu me importas, ¿Porque crees que duele? ¿Crees que si jugara no lloraría?

-Tú- Dijo pegando su frente con la mía.

-¿Yo qué?

-Eres la chica de los mensajes.

-Odio tragarme mis palabras.

Phone number [Michael Clifford]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora