Mermaid (Taekook)

Sangre

Me quede en el club hasta que oscureciera, cuando al fin la noche llegó pusieron música, personas comenzaron a llegar, algunos se sentaban en los sillones de terciopelo rojo, otros iban a la barra o simplemente bailaban por el sitio con sus bebidas en mano, con amigos o en parejas. Todo estaba obscuro más que luces de colores neón que iluminaban el lugar.
De repente aquel chico, RM, se acercó a mi, me tomó de la mano y me llevo a la parte trasera del club, al atravesar la puerta, llegamos a una especie de camerino donde un joven muy hermosos se arreglaba. Este chico se levantó al vernos entrar y con una gran sonrisa camino hacia nosotros. Jin, dijo su nombre al presentarnos.
Lo observé detenidamente, además de su pulcra y pulida belleza algo más llamo mi atención y fueron los pendientes que decoraban sus orejas, el pendiente tenía la misma forma de serpiente del dije que colgaba en el collar en mi cuello. Este noto que mis ojos se dirigían hacia ellos y en ese mismo instante los ojos de jade del dije de mi collar se iluminaron y al mismo tiempo los de los pendientes y luego me percaté en que RM tenía una pulsera igual. Me sorprendí mucho. Las tres piezas de joyería brillaban al estar cerca...
—¿Cómo las consiguieron? Pregunte confundido.
—Siempre han estado con nosotros. Ambos susurraron en mi cuello, provocando que mi cuerpo se estremeciera ya que al mismo tiempo parecían sonar como serpientes. Me aparté.
—¡Muy bien! que comience la fiesta. Dijo Jin, se dio un shot completo de alcohol que tenía en una mesa a su lado, limpio su boca y salió del sitio. Lo seguí. Comenzó a bailar de una manera muy sensual y erotica, atrayendo la mirada de todos en el sitio, la multitud se apiñó cerca de el entre aplausos y gritos, disfrutaban lo que sus ojos veían, minutos después RM se quitó su camisa y fue al lado de Jin, ambos se tocaban de una manera juguetona, comenzaron a besar sus labios apasionadamente, lo que generaba que la multitud enloqueciese. De repente sus ojos se volvieron blancos pero las personas a su alrededor no lo notaban, parecía como si estuviesen hipnotizados.
La música subía, la locura incrementaba, sin pensarlo me acerqué a ellos y de la misma forma comencé a moverme de un lado al otro mientras estos dos me besaban el cuello y rasgaban mi camisa dejando al descubierto mi pecho, ni siquiera me importaba, me sentía diferente. Mis ojos del mismo modo se tornaron blancos, sonidos de serpientes emanaban de nuestras bocas, las personas seguían entusiasmadas y excitados con nuestro show.
RM y Jin susurraron a mi oído: vamos a dar inicio con nuestro banquete. Cada uno se fue con una persona diferente, los besaban sin importarle que ni siquiera los conocieran, repetí la acción. Fui hacia un chico que no me dejaba de mirar fijamente, este mismo ni noto mis ojos, estaba perdido en mis movimientos cerca de el. Mordía su labio inferior, lo disfrutaba tanto que pude sentir su miembro endurecido. Al mirar de reojo a los demás, pude observar que Jin y RM estaban con sus bocas pegadas en los cuellos de aquellas personas que habían seleccionado para bailarles, estos me miraron y algo en mi se encendió, fui al cuello del hombre y abrí mi boca cerca de el y le mordí este grito de dolor, pero no pude contenerme al quitar mi boca de su cuello, esta se encontraba llena de sangre, el chico cayó hacia el suelo inmóvil y pálido. De repente el baile se tornó en una masacre, RM y Jin hicieron lo mismo con cada persona en la habitación, algunos se percataron y entraron en pánico.
—¡Ya se van! Repitió Jin riendo, este corrió velozmente hacia la entrada bloqueándola por completo y aquellos que querían tratar de esquivarle solo bastaba con una mirada de este mismo para caer como un cubo de hielo. Cuando vi a mi alrededor, aquellas personas que festejaban, ahora estaban muertas entre charcos de sangre. Cubrí mi boca, entre en razón y me llene de miedo. Escuche la puerta principal ser abierta y al voltear.
—¿Jungkook?
—Tae...