Tae
No tenía palabras para describir lo que mis ojos habían presenciado, nunca antes viví lo que hoy había vivido, estaba sorprendido, confundido, con miedo y sin saber que debía hacer. Mire a las mujeres las cuales se encontraban tocando los escombros de su hermana caída, todos lloraban su perdida y se reflejaba el dolor al ver cómo sus runas estaban completamente iluminadas. Me acerqué a Infertrión la líder del clan, la tomé de su brazo y levanté bruscamente, todas me miraron y de inmediato me empujaron lejos de ella.
—¿Que fue lo que pasó? ¿Que es eso? Deben darme la respuestas porque ahora no entiendo nada. Dije seriamente.
—Lo que viste es lo que tus ojos se han negado a ver, el se ha convertido en aquello que tú tanto temías, desde que lo conociste tu corazón entendía el peligro, hasta la bruja te lo dijo, no me culpes por esto, esa cosa no es un humano, es un monstruo como la Hidra de Lerna, como la Quimera, como Tifón y cómo el legendario demonio marino Leviatán, ellos son bestias y siempre lo serán... puse mis manos en mi cabeza, el mundo me daba vueltas y miles de pensamientos invadían mi cabeza.
—Por favor ayúdenme, debo ayudarlo a escapar de esto.
—Su destinó ya fue sellado no hay nada que podamos hacer y aunque pudiéramos jamás ayudaríamos a aquel que acabo con la vida de una de nuestras hermanas. De repente el templo donde estábamos comenzó a temblar, miramos hacia el techo de cristal el cual tenía reflejado los continentes y los océanos en los cuales infligían sus dominios, Infertirión cubrió su boca y todas se veían muy preocupadas, les cuestioné sobre lo que ocurría. La mujer me miró con furia y desesperación y con una abofeteada respondió. Me gritaba que todo era mi culpa, que nunca debí haberlo traído a su templo, a su hogar y entonces explicó que Rea era la reina del océano ártico, su muerte hizo que el océano comenzara a invadir tierras con grandes olas, se estaba desbordando de sus límites, no había quien pudiese regirlo quien lo hacía ya había desaparecido.
—Jena, Nerea. La mellizas de cabello negro. —Vayan lo antes posible y traten de manejar el caos antes de que se escape de nuestras manos, debemos mantener el orden y la tranquilidad en la humanidad antes de que todo empeore, porque la hará lo presiento. Las mujeres asintieron y desaparecieron en una ráfaga de viento. Sabía que no podía estar más ahí, debía buscar a Jungkook lo antes posible y llevarlo muy lejos, para poder protegerlo...Jungkook
Llegue a la orilla Del Mar, me senté sobre la arena desnudó, ya que no me encontraba en mi monstruosa forma. No paraba de llorar como un bebé, no tenía claro nada, me sentía solo, me sentía realmente una monstruosidad. Asesine a alguien. Me convertí en lo que nuca debí ser y ahora ni puedo controlarlo.
De repente sentí una manta ser puesta sobre mi espalda cubriendo así mi cuerpo, al voltear, no pude creer quien estaba frente a mi. Hoseok el brujo de las profundidades.
Aquel chico se puso de rodillas para poder estar a mi altura. Trate de alejarme nerviosamente aún sobre el suelo pero el lo impidió poniendo sus manos sobre mis mejillas. —¡Shhhhh! No tengas miedo, no te haré daño, se que no eres un simple humano, todos te temen, conozco ese sentimiento, pero puedo ayudarte. Sonrió.
—¿Cómo? Nadie puede ayudarme.
—Yo conozco a alguien que si puede hacerlo, dame tu mano y te llevare con el, muere por conocerte, porque tú estás formando un caos que puede desestabilizar el mundo mortal por completo.
—¿Que quieres decir?
—Toma mi mano y encontrarás las respuestas. Dude, pero al final la sostuve. Este me puso en pie y me guío hacia el océano. Sin mirarme me respondió que no me preocupara, ya se había encargado de que pudiera respirar bajo el agua. Nos sumergimos, este tomó su forma antropomorfa y sin soltar mi mano me llevaba a lo profundo donde la luz ya no tocaba, nos sumergíamos cada vez más llevándome a la más densa oscuridad. Fueron muchos minutos hasta que nos detuvimos. Este soltó mi mano y se alejó un poco de mi, fue cuando dos gigantescos ojos color rojo aparecieron frente a mi, me aterré, enseguida esos ojos avanzaban a mi alrededor sin perderme el rastro. Sus escamas al parecer tenían un resplandor rojizo y dejaron a la vista su silueta, su color era negro y era como una serpiente gigantesca, que me rodeaba como una boa constrictora y frente a mi rostro estaba su gran cara semejante a la de un dragón.
—Bienvenido mi pequeño, es un gusto conocerte. Hablo con una fuerte, grave, estruendosa y aterradora voz.
—¿Tú quien eres? Le pregunté tembloroso.
—Mi nombre es Leviatán el amo de las profundidades...
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Mermaid (Taekook)
FanfictionMe enamore de sus ojos, de sus labios, de sus delicadas manos., como miraba mi mundo de una distinta manera, para ese chico el océano y las criaturas que viven en él lo eran todo pero me hizo a mi parte de su mundo y su corazón... -¿será un romance...