Mermaid (Taekook)

El final de un capítulo

Una semana después

Caminaba a la orilla de la playa tomado de la mano de Tae, nuestros pies iban descalzos sintiendo la arena en los mismos. El sonreía y yo al mismo tiempo lo hacía, disfrutábamos de la brisa y de aquel día soleado, el agua era cristalina y de aquel azul turquesa tan hermoso que solía ser.
Caminamos por minutos entre risas y sonrojos espontáneos, pero en un instante Tae detuvo su caminar, lo miré, me acerqué y le pregunté lo que ocurría, tenía una inmensa sonrisa en su rostro pero era extraño porque no decía nada, pero de repente lo vi arrodillarse frente mi, me sorprendí y llevé mis manos a mi boca por el asombro, este de su bolsillo sacó una pequeña caja y la abrió a mis ojos, un anillo con un pequeño diamante estaban ahí a mi vista.
—Se que tú y yo estamos casados, pero quiero renovar votos contigo... mis ojos se humedecieron, pero con mi felicidad incontenible extendí mi mano y este la tomó, no podía dejar de sonreír y desbordar lagrimas al mismo tiempo. —¡Jeon Jungkook! ¿Quieres casarte conmigo otra vez? Ni siquiera tenía que pensar la respuesta asentí y una vez que puso el anillo en mi dedo me lancé sobre el cayendo sobre la arena, comencé a besar sus labios, al vernos a los ojos fue como si el tiempo se congelase, comencé a recordar todo lo que viví con el.
—¿Crees en las sirenas?
—¿Así que has estado preguntando por mi?
—¡Te amo Jungkook! y quiero casarme contigo.
—¡vamos a ser padres!
—¡Te amo Tae!
Fueron tantas palabras, tantos momentos que caían en mi memoria, tantos momentos juntos y aún estamos uno con el otro, Taehyung es el hombre que amo y siempre lo haría hasta que envejezcamos estaré con el por toda la eternidad...
—¡Mi lord debe ver algo! Se acercó uno de mis guardias. Nos pusimos en pie, limpiamos la arena de nuestra ropa y le seguimos hasta el lugar seleccionado, al llegar era la cueva donde mis hijos dormían, me pidió que entrara, lo hice y dentro de ella estaba Hera y Gorgon, estos me miraron con tanta paz, la tranquilidad en sus ojos ahora era hermosa. Noté que Hera tenía su cuerpo enrollado, me acerqué a ella y está comenzó a exponer lo que protegía, al ver por completo no lo podía creer, habían 4 huevos con ella, lo que protegía era su nido, me sorprendí tanto que comencé a saltar de la alegría. —¡Voy a ser abuelo! ¿No soy muy joven para serlo? ¡No importa! Estaba tan feliz que corrí hacia Tae tomando sus manos para llevarlo hacia el nido y que pudiese verlos mejor, ya mis hijos no lo miraban con recelo ahora se sentían cómodos a su lado. —Serás abuelo. Respondió.
—Seremos... le miré.
El día había llegado, tomé un baño, perfumé mi piel, arreglaban mi cabello, vestían mi cuerpo con una bata de ceda de mangas acampanadas, larga creando una cola tras ella, tenía bordados dorados era muy hermosa, un traje perfecto, pusieron mi corona sobre mi cabeza pero esta era más pequeña y con algunas flores blancas en ella, me miré al espejo y sonreí.
Tocaron mi puerta. —¡Entre! Era mi hermosa hija quien vestía de un Amarillo que resaltaba sus ojos y su cabello rubio, esta me abrazo con fuerza y boquiabierta elogió el cómo me veía.
—Padre te vez realmente hermoso.
—¿No te has visto tú? Estás muy bella, la puse junto a mi para que se viese al espejo, eres igual a mi y a tu padre Tae, sacaste tantas cosas de ambos y estoy tan orgulloso de ti mi princesa y la futura reina, eres todo para mi. Sus ojos se humedecieron. —Pensar que por un tiempo no quería nada con ustedes y ahora son el reflejo de los mejores padres que alguien podría tener. Besé su frente.
—¡Majestad le están esperando! Escuché tras la puerta.
—¿Listo? Asentí a las palabras de mi hermosa hija. A las afueras del palacio nos esperaba una multitud, el día era hermoso y soleado, las aves cantaban y había una brisa fresca que agitaba ligeramente nuestros cabellos, al salir fui anunciado y aquellos que se encontraban sentados en las sillas decoradas con flores blancas y azules se pusieron en pie al verme, pero no noté sus miradas, solo estaba observando una de ellas, al final de aquella alfombra de color dorado me esperaba Tae con un traje igual al mío pero en color negro y plateado, pude verle llorar al verme, comencé a caminar, frente a mi iba mi hija lanzando pétalos de rosa por el camino. Al voltear hacia un lado estaba Nam y Jin juntos con Hoseok a su lado y del otro lado estaba Jimin con Leviathan en su forma humana, siendo un chico llamado Yoongi, los veía sonrientes y felices a ambos hasta les noté cómo estaban sujetos de sus manos lo que me hacía muy feliz, Jimin merece ser feliz y al final Yoongi me ayudo a destruir a Ceto, luego me pidió perdón ofreciendo su apoyo hacia mi, el único Titán que vive ahora en la tierra ya que los demás fueron encerrados en las profundidades del océano con el poder recuperado de Tae como rey del océano. Miré hacia el frente y ahí estaba aquella mano extendida hacia mi, tomé la misma que me ayudó a acercarme, estaba frente a sus ojos que no paraban de llorar lo que me conmovía.
—Te vez muy hermoso.
—Tú también estás muy apuesto. Sonreímos al mismo tiempo. Enseguida el anciano del pueblo comenzó a dirigir sus palabras: Estamos aquí reunidos porque estas dos almas puras han decidido renovar sus votos, volver a formalizar ese gran amor que se tienen uno al otro, son dos grandes reyes y se merecen toda la felicidad y prosperidad en los días venideros, así que te pregunto Kim Taehyung ¿aceptas nuevamente a Jeon Jungkook como tú legítimo esposo? Acepto respondió. ¿Y tú Jeon Jungkook aceptas a Kim Taehyung como tú legítimo esposo? Acepto sin alguna duda. Entonces lo que a unido a estos dos corazones que nunca sea separado. Puedes besar al novio... Tae al escuchar eso sin pena y con prisa tomó mi cintura y me unió a él y mordiendo su labio inferior junto una sonrisa unió sus labios a los míos, todos comenzaron a aplaudir. El beso era sincronizado y con gran amor.
—¡Tea amo Kook!
—Y yo a ti...
Conocí a Kim Taehyung hace algunos años, siendo un tritón que creí que no era real, al verlo por primera vez en aquella biblioteca supe lo que era el amor a primera vista, desde entonces hemos estado unidos, afrontamos tempestades, hubieron lágrimas y dolor pero aún estamos aquí porque es a quien le entregue mi vida, mi corazón y mi amor, el es todo para mi y lo amo sobre todas las cosas y aquí comienza el principio de muchos días a su lado, este fue el final de un capítulo nada más, seguiré viviendo muchas cosas junto a él, yo soy Jeon Jungkook rey Gorgón y esta fue mi historia...

Fin~