Última narración como Charo!!!!!

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Bueno lo que he metido de información del anterior capítulo lo escribiré entre los puntos en negrita, subrayado y cursivas, quien haya leído el lemon que pase de esta parte.

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-Me encanta hacerte el amor- dijo.

Ambos estábamos en la cama. Yo tumbada boca arriba, haciendo trenzas en su pelo. Él tenía la cabeza en mi canalillo (el hueco entre teta y teta) pasando el dedo por mis cicatrices.

-Más si es sin condón.

En ese momento me di cuenta de que no lo habiamos usado.

-Mierda Jeff, no lo hemos usado.

-Ya- contestó como si nada.

-¿Cómo que ya?

-Sí, qué más da que lo usemos.

Me quedé callada un momento, pensaba en que tenía razón. Yo tenia los ovarios demacrados será imposible que yo le dé un hijo. Sin embargo, a él le encantan los críos, sin darme cuenta empecé a llorar.

-Qué te pasa?

-Nada.

-No, nada no. Tu normalmente no lloras.

-(Me temblaban las manos y hablaba entre cortado) Esqué... esque yo... yo nunca te podré... dar... dar un hijo.

-A no?- dijo abrazandome.

-No, yo tengo...- me interrumpió.

-Tu tienes un bebé en la barriga- eso heló mi sangre.

-Qué?!?! Imposible, ¿quién dijo eso?

-Tu hermana, te estaba mirando porque caíste en coma. Dijo que por eso estas tan cansada últimamente y te agotas o te desmayas de repente- me quedé callada pensando finalmente toque mi barriga.

-Jeff, ¿tu quieres ser padre?

[Lo subrayado es lo que dice Jeff].

Se quedó callado un tiempo que para mi fue una eternidad.

-De tu bebé??- asentí-. Por supuesto que sí. Nunca creí que te fueras a quedar embarazada. Así que nunca te dije nada, sabiendo que puedes... es... es increíble, lo mejor del mundo- habló muy entusiasmado y cuando dijo lo último me abrazó la barriga, apoyando su frente donde esta mi útero- Te amo, te amo mucho- levantó la cabeza y colocó una mano donde tenía la frente- y a ti también- me besó de manera lenta, demostrando todo el cariño del mundo.

-Me alegro de que quieras, porque yo también quiero- dije cuando nos separamos, él apoyó la espalda en el cabecero y me volvió a prestar atención- pero... pero tengo miedo. Puede que no seamos buenos padres, es decir, somos asesinos , además tenemos un montón de enemigos, puede que nos lo quiten, podrían usarle en...

-Qué crees? qué yo no? Ya se que está en peligro porque es nuestro hijo -pensó- o hija- cogió aire-, pero también sé que nadie le podrá cuidar mejor que nosotros. Y aunque tenemos muchos enemigos nadie a logrado acabar con nosotros, ¿sabes porqué?- negué-. Porque somos mucho mejores que ellos.

Me senté entre sus piernas apoyando mi espalda en él y mi cabeza en su hombro, agarré sus manos y las coloqué en donde debe estar nuestro hijo. Traté de recordar cuando lo hicimos sin usar protección, mmm... creo que fue en la bañera hará... ok, no se cuanto llevo en coma.

-Jeff, ¿cuánto llevo en coma?

-Cuatro días. Los cuatro días más aburridos de mi vida.

Era obvio que estaba exagerando. Me giré para volver a besarle. Cogí manta y me acurruque en su pecho.

-Te amo- dije bajo.

-Yo más- me contestó besando mi cabeza.

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[Para traducir también usaré los corchetes].

Cuando "desperté" me dí cuenta de que estaba sentada en la cama que pertenecía a Jeff, entonces el rey de Roma entró por la puerta [para quien no entienda,un dicho de cuando estas hablando de alguien es "y hablando del rey de Roma" que significa que de quien estabas hablando a llegado/entrado en el lugar o está escuchando].

-Ya volviste?

-¿Ha pasado mucho tiempo?

-Unos diez minutos. ¿Te pasa mucho esto de quedarte embobada?

-Nunca antes pero lleva toda la mañana ocurriendo.

-¿Sabes que son?

-Creo que recuerdos.

-¿Recuerdos?- asiento-. ¿Y qué recuerdas?

-A veces  al niño al que te pareces, cuando no... -dude si contarlo, pero ya que he empezado- a una chica con el pelo verde, tiene alas y cuernos.

Jeff susurro algo que no llegue a entender.

-¿Qué cosas más raras recuerdas no?

Ambos estuvimos callados, cuando me disponía a romper el hielo la puerta se abrió de golpe chocando contra la pared. Un niño pequeño entró por ella chillando:

-Papiii!!!!!!!!

Debió percatarse de mi presencia en ese momento y en ese momento preguntó:

-Quen ee tu? [Quién eres tú?].

No se porque pero se que es él y por ello me acerque. 

-Zack?- pregunté abrazándole, él no contestó- Claro, tu no te acuerdas de mí.

-Quen ees? [Quién eres?]- volvió a preguntar.

-Yo... yo soy- No pude terminar la frase porque todo se volvió negro.


(831 palabras).

Se que es muy corto, gracias a esto lo he podido publicar hoy. Lo siento por eso, pero a cambio os he publicado dos capítulos en el mismo día. Y sin nada más que decir mas que espero que os encontréis de puta madre (sin ofender a ninguna madre).

Hasta el próximo capítulo, esperemos que mañana.

Whims of fate.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora