[La de la imagen es Samantha, solo que ella tiene es morena y de ojos verdes, como siempre esto no es obligatorio la podéis imaginar a vuestro gusto, yo solo propongo ideas].
Vaya hermana, pero me sigue asombrando la manera de reaccionar de Diabla.
Él que me da pena es Thor, que anteriormente ya mostró que se arrepentía de haberla dejado en el infierno y que se culpaba por ello, ahora se entera de que mataron a su hijo delante de Angélica y Trud, que aunque no lo hayan visto debe de doler igual. Lo bueno es que está viendo parte de la verdad sobre su hija.
Recuerdo.
Estoy en una pequeña frutería con una señora, la madre del niño que se acercó a mí en mi primer día. Ella está muy atareada y yo igual, hoy a llegado una carga de verduras especiales, el lugar de donde vienen tiene mucha fama así que todo el mundo quiere comprar. En un pequeño descanso nos dio tiempo a barrer, ordenar el lugar y colocar más productos en los estantes. Poco después de terminar llegó Chris diciendo que tenía hambre y convencí a su madre de que se fuese con él a comer, en poco tiempo un cliente entró en la tienda le atendí y se marchó, luego una mujer seguida de un grupo de estúpidas y aprovechadas niñas ricas. Sam se acercó a mí.
-Hola hermanita.
-Hola Sam.
-¡Ya te dije que no me llames así!- gritó irritada.
-Y yo que no me chilles.
Se dio la vuelta.
-Ya podeis empezar.
-No te conviene meterte en problemas. Tú apenas sabes las reglas del juego.
Salí de detrás del mostrador y me quité el delantal, todo despacio sin prisa esperando a ver como reaccionaba. No era la primera vez que Sam intentaba meterse conmigo pero que metan a gente por medio no lo soporto. Cuando colgué el mandil se escuchó un fuerte ruido, me giré y miré a las dos castañas de lindos vestidos con una cesta en las manos.
-Ya lo estáis recogiendo- dije aun serena-. No soy la persona con más paciencia del mundo y la estais gastando.
-¿Nos estás amenazando?- soltaron la cesta y también cayó al suelo.
-Yo no hago las amenazas como tú crees pero llamalo como quieras. Solo hazme caso o de lo contrario podría jugar con vosotras- sonreí.
-Vaya piensas que así nos vas a intimidar.
-Largo en tres... dos... uno...- puse los dedos indicando el tiempo-. Bien visto que no atendeis a razones jugaremos.
Hice un gesto y todo se cerró, un par de ellas se acercaron y se abrazaron. A continuación, otro para que las luces parpadearon y ahora sí, todas entraron en pánico, la única que se atrevió a encarar de nuevo fue Noah, la mejor amiga de la hija de Thor.
-¿Crees que así de fácil nos iremos?
-Mira linda el problema que teneis es que todas estáis a mi merced, no hay salida.
En ese momento tres de las cinco fueron a intentar abrir las salidas, no les funciono.
-Yo me quiero ir- dijo una de las que tiró la fruta.
Se acercó a las manzanas y las metió de nuevo en la cesta en donde estaban. Otra de las presentes la ayudó y entre ambas levantaron la canasta y la pusieron sobre el estante.
-¿Quieres saber lo que es una amenaza?- pregunté frente Noah, mirando a las dos chicas que trataban de que la canasta no cayese de nuevo.
-No me vas a dar miedo hagas lo que hagas.
Una risa se escapó de mis labios y las luces tardaron un poco más en volver a encenderse, cuando lo hicieron yo me había transformado y desmembrado a las chicas que segundos antes miraba. Noah me miró, yo sonreí al tiempo que enredaba con el cuchillo y se quedó de piedra al ver mis heridas.
-Eso sí es una amenaza.
-¡¡¡¡¡¡¡Ahhh!!!!!! ¡¡¡Es una asesina!!! ¡¡¡Vivo con una asesina!!!
-Y no sabes las ganas que tengo de hacerte hermosa- ladeé la cabeza y sonreí.
Ella corrió a la puerta chillando por ayuda y agitando la manecilla tratando de que se abriera. Un conjuro que leí, hace un tiempo ya, me podría valer en este momento. Este era para hacer que una puerta transporte a quien la cruce al lugar que decida quien la haya hechizado. Nunca antes lo había hecho pero creo que este es un buen momento así que la hechicé para que aparecieran en la biblioteca del instituto, que a estas horas ya está cerrada así que estarian chillando hasta que alguien las escuchase. Así que cuando la puerta se abrió "mi hermana" cayó al suelo pero rápidamente se levantó y corrió dejando atrás a su amiga que en cuanto vio la puerta abierta salió del mismo modo. Las dos chicas que no se habían separado desde que cerré la puerta se levantaron y corrieron a la salida cerrando detrás de ellas, no sé cuando se van a dar cuenta de que están en el instituto.
Escuché a Chris hablando con su madre así que como no tenía tiempo hice los cuerpos polvo, me puse en modo ilusión cogí el mandil y empecé a barrer aquel polvo del suelo. Llegó la mujer con el pequeño, el cual marchó tras dar un abrazo a su madre y a mí.
-No hacía falta que barrieses. Déjame a mí- cogió la escoba-, vete a comer ¿si?- propuso.
-Vaya visto desde fuera cualquiera diría que te molesto.
-Bobadas, desde que mi marido nos dejó nunca había estado tan agradecida con alguien- se me olvidó comentar que su marido murió poco después de que Chris naciera y desde entonces no tienen más que el uno al otro-. Pero eres de la realeza deberías estar en el castillo haciendo cosas de princesas, con tus hermanos y demás familia. No aquí ayudándome a mí.
-Pues dejame decirte que es mucho mejor estar aquí con vosotros que estar allí. Vosotros dos junto a mi hermana sois algo así como las lunas.
-Pero solo hay una luna- dijo ella riendo por mi comparación.
-Ese es Jeff. En el infierno hay tres y sois vosotros.
-¿Quién es Jeff?
-Hasta el día que vine aquí él era mi novio, era y es todo por lo que sigo "viva".
-¿Creeis en el amor? Es decir, ¿en el infierno existe el amor?
-Y es mucho más fuerte que aquí.
-¿Cuantos amores has tenido aquí para confirmarlo?
-Precisamente por eso se que es más fuerte, aquí piensan que son más que tú. Me explico, si uno que no sea de la realeza se enamora de Angélica ellos no pueden tener nada, allí si te enamoras haces todo para estar con la otra persona, lo mismo pasa con las parejas del mismo sexo- me miró extrañada-. Sí, aquí ni siquiera os planteais que dos mujeres puedan estar enamoradas, allí hay maneras de que puedan incluso tener descendencia, y lo mismo entre dos hombres.
Me miró así como lo hace cuando Chris viene contando alguna tontería.
-¿Por qué esa cara?
-Porque no me explico como viniendo de un lugar peor eres más noble que otros, ¿no debería ser al revés, que tú fueses peor?
-Yo me se controlar, pase más de trece años aprendiendo a controlar impulsos, dolores y valorar desde el corazón no desde el cargo. Por eso puedo ser muy buena y muy mala.
Sonreí y tras darle un beso en la mejilla para despedirme caminé al castillo en el primer escalón estaba ese guardia que no deja de seguirme. Al verme se levantó, le saludé y subimos al castillo y tras comer me fui a mi cuarto a leer un libro sobre la historia de este lugar, sus cimientos y sus raíces, todo lo que ocurrió hasta que mi abuelo tuvo que desterrar a su primera hija.
Fin del recuerdo.
(1297 palabras).
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Whims of fate.
RandomPolicia: Nombre completo. -Diabla Foster. Policia: Porque estas aquí? -No me acuerdo muy bien pero no mentiré, no estoy segura de quién soy después de tantas revelaciones, siempre había pensado que era Charo una chica normal, dentro de lo que cabe...