Esto no es Correcto

9.9K 1K 683
                                    

– ¡Vamos a la playa! – exclamó Jungkook

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

– ¡Vamos a la playa! – exclamó Jungkook.

Tanto Mina como Chaeyoung hicieron una mueca, ninguna de las dos era muy fanática de la playa, ellas eran más de recorrerla que quedarse allí, en cambio los chicos estaban ansiosos por ir a meterse en aquellas aguas turquesas de Punta Cana.

– ¿Vamos, Hyung? – preguntó el menor al pelinegro que salía del baño con un short para el agua.

– ¿Por qué Jungkook le dice Hyung a Tae y tú no me dices Unnie, enana? Soy mayor que tú – dijo Mina indignada a la coreana que la miró con una ceja alzada.

– Perdóname la existencia, Mina Unnie – habló Chaeyoung y el corazón de la rubia latió con fuerza al escucharla.

¿Cómo era posible que esa palabra saliera tan bien de sus labios?

– N-No, mejor no me digas así – balbuceó la mayor sonrojada.

– ¿Por qué estás roja, hermanita? – preguntó Jungkook extrañado.

– Sí, ¿por qué, Unnie? – preguntó ahora Chaeyoung con una sonrisa maliciosa.

– Hace calor, eh – se excusó la mayor riendo nerviosamente – Y deja de llamarme así, es un poco incómodo.

¿Qué le sucedía?

– ¿Iremos a la playa o no? – preguntó Taehyung pasando su brazo por los hombros del castaño.

– Vayan ustedes y nosotras los alcanzamos, tenemos que cambiarnos – dijo Chaeyoung yendo a su habitación.

Mina suspiró y se levantó del sofá donde se encontraba para seguir a su menor.

– Bueno, nos vemos allí – dijo Jungkook y junto al pelinegro se fueron.

Mina al entrar al cuarto, vio a Chaeyoung sólo en ropa interior buscando algo en su maleta.

– Carajo – murmuró al momento en que algo revoloteó al ver el cuerpo de la coreana.

– ¿Viste algo que te gustó? – preguntó la pelicorto volteándose al sentir la mirada contraria sobre ella.

Mina se sonrojo de inmediato.

– No te creas tanto – rodó los ojos Mina yendo a su propia maleta – E-Espera, ¿qué haces? – preguntó con pánico al ver a la menor comenzar a quitarse su sujetador deportivo sin pudor alguno.

– Eh... ¿Me cambio? – dijo Chaeyoung obviamente.

– ¿No puedes ir al baño?

– Pff, Mina... Ambas somos chicas, no verás algo que no hayas visto antes en ti – rió la más baja.

La nipona se quedó en silencio y le dio la espalda a la menor para así no verla y que ella no la viera a ella. Se desvistió rápidamente y cuando estuvo a punto de quitarse su sujetador, sintió un cálido aire en su nuca y posteriormente unas manos posarse en su cintura.

– ¿Q-Qué hacemos? – tartamudeó cerrando los ojos con fuerza.

– Hueles bien, ¿lo sabías? – murmuró Chaeyoung peligrosamente cerca del cuello de la mayor, su respiración causó algunos estremecimientos en su cuerpo y una corriente eléctrica recorrerla.

– Chaeyoung...

– No sé qué estoy haciendo – admitió la menor y la rubia se volteó para encararla – Pero no quiero detenerme, demonios.

Sus rostros estaban separados por escasos centímetros y en su mente se venían los recuerdos del episodio que ambas protagonizaron en el baño del avión.

Ahora no había nadie que las pudiera detener.

– No podemos hacer esto – susurró la más alta – Ambas tenemos novios y... Y a mi n-no me gustan las c-chicas – tartamudeó sintiendo el suave aliento de Chaeyoung chocar contra sus labios.

– Tienes razón – concordó la menor sin separarse– ¿Qué tienes allí? – preguntó subiendo su mano para tocar la comisura de los labios ajenos.

La mayor frunció el ceño.

– ¿Qué ten...? – su frase quedó a medias cuando la coreana en un arranque de valor junto sus labios en un beso rápido.

Apenas fue un roce de labios tímido, pero significativo para ambas. Sus corazones se volvieron locos y Chaeyoung se separó inmediatamente luego de percatarse de lo que había hecho.

Ambas se miraron completamente sonrojadas y sorprendidas.

– T-Te espero afuera – balbuceó Chaeyoung y salió de allí entre tropiezos torpes.

La nipona se quedó inmóvil mirando un punto muerto mientras que por inercia llevó una mano a sus labios, aún sintiendo el suave roce de los de la menor.

Esto no era correcto.

"¿Qué mierda acabo de hacer?"

"¿Por qué se sintió malditamente bien?"

Ambas con algunos sentimientos encontrados sin saber que sus corazones querían que se volviera a repetir, cuando sus cerebros gritaban que estaba mal.

Ambas con algunos sentimientos encontrados sin saber que sus corazones querían que se volviera a repetir, cuando sus cerebros gritaban que estaba mal

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Sleeping With My Brother's Girlfriend [MiChaeng]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora