⚜ 𝑩𝒓𝒐𝒕𝒉𝒆𝒓𝒔 ⚜ | WOOGYU |

CAPITULO XXXIX

POV SUNGKYUNG

Aun no comprendía porque había aceptado aquello, en quedarme a dormir junto a SungKyu, pero verle esa sonrisa y esos ojitos no pude negarme, realmente deseaba en pasar más tiempo a mi lado y yo también deseaba eso.

Se lo había comentado unos días atrás a HaNeul mientras estábamos en la cama, compartiendo caricia y besos, diciendo que deseaba en ver a SungKyu todos los días, en querer convivir a su lado y conocerlo más. Por eso tampoco me había negado aquella cena y conocer los padres de mi hermanito.

Sintiendo un poco de envidia la notar como lo amaban, porque justo quería que mis padres me mostraran algún cariño o que me demostraran que me amaban. Pero solo querían estar al pendiente de Suk, él era su único verdadero hijo.

Y sabia la razón de por qué me habían adoptado, porque Suk quería tener un hermano y por eso aquella adopción, pero Suk se había la clase de padres que tenían al verme que quería atención y ellos no me la daban. Sonriendo al ver que Suk su atención era completamente mía una vez que había crecido.

Para después irse de la casa y dejarme con mis padres, teniendo la esperanza que si se iba. Iba a conseguir amor por parte de ellos eso me lo había susurrado Suk cuando ambos nos quedamos solo en casa, susurrándole que fue todo lo contrario.

Viendo su ceño fruncido y sus manos hecha en puños cuando le conté de mi accidente, de lo poco que les importe a mi padre, dejándome a cargo de WooHyun y de mis amigos, por eso no dude en ir aquella cena.

Cuando ellos volvieron, quería evitar aquella discusión que Suk tenía preparada para ellos. Sonriendo aún más cuando mire a SungKyu buscar algo en su armario para prestarme y poder dormir a gusto, cuando me dio algo no dude en agradecerle y entrarme al baño.

Deje salir un suspiro para cambiarme y salir, encontrándome a SungKyu en la cama con una sonrisa.

— Hyung, ¿podemos dormir juntos? — pregunto sonriente —

— Pero no prefieres dormir con Woonnie — comente burlón —

Al notar cada una de las marcas en su cuello, noto donde miraba y no dudo en cubrirlas con su mano, negué divertido para acercarme a él y ver su pequeño puchero.

— Parece que Woonnie probó algo que le gusto demasiado — note sus mejillas sonrojadas —

Escuchando en un susurro que había perdido la cuenta de cuantas veces el menor lo había acorralado para tener un poco de contacto con su cuerpo, provocando que riera cuando lo mire con una sonrisa tímida que le gustaba cada una de esas acorraladas que le había dado.

— Mi pequeño hermanito lo he pervertido — dije mientras lo abrazaba y lo acomodaba en mi pecho cundo caímos en la cama —

— Es tu culpa por mandarme ese video — comentó mientras fruncía el ceño — hyung, ¿tus padres han regresado? —

Pregunto con timidez, provocando que suspirara y asintiera contándole un poco de lo que Suk me había dicho, me miro con esos pequeños ojitos triste y susurrar que lo sentía por la familia que tenía, negué mientras acariciaba su cabello y le decía que él no tenía la culpa.

— Hyung — llamo mientras se incorporaba y se colocaba de rodillas —

Sus ojitos brillantes y su nerviosismo pareciéndome adorable, me acomode en el respaldo de la cama a la espera por lo que me iba a decir.

— Hyung, no te gustaría — mordió su labio, enarque una ceja al verle tan nervioso — ¿no te gustaría vivir aquí con mis padres y conmigo? —

Dijo de repente, borrando mi sonrisa por aquella pregunta, una que HaNeul me había hecho días atrás, de la posibilidad de dejar todo lo que he tenido solo para irme con SungKyu y vivir una vida diferente, una donde no iba a tener todas aquellas comodidades.

Más de una noche estuve pensando aquello dejar todo aquello solo para irme con SungKyu.

Mire al menor sonreír de alado y morder su labio, no dude en tomar su mano y la entrelazaba junto la mía, su rostro algo triste y confundido por mi acción, no dude en dedicarle una sonrisa y susurrarle aquello.

Por qué ahora lo único que me importaba era él, el dinero venia sobrando para mí. Lo único que deseaba era sentirme querido y amado de una forma no como HaNeul, y ahora que lo había encontrado no iba a desperdiciar aquella oportunidad.

Por que como dije lo único importante en mi vida ahora era Kim Sung Kyu.

POV SUNGKYU

No podía estar feliz de lo que ya estaba, al escucharle susurrar que si quería vivir a mi lado y ya nunca separarse, días atrás le había dicho a mi padres que pensaban sobre aquello, ellos no dudaron en decirme que claro que lo aceptaban, pero primero debía hablarlo con Kyung por lo de su familia sobre todo lo que me decía Hyunnie que no podía cambiar su vida de una día a otro.

Que le había vivido con muchas comodidades pero al saber que dejaría todo eso solo por mí, me había feliz, yo tampoco quería alejarme de él ya. Ahora que él era mi única familia de sangre no quería perderle.

Me aferre más a su cuerpo cuando nos habíamos quedado dormido, siendo despertado por varias caricias y decir que el desayuno estaba listo, mirando a mi hyung con una sonrisa, su cabello revuelto e indicarme que bajara, que mis padres nos estaba esperando.

Tome su mano para encaminarnos hasta la cocina y ver a mis padres ya sentados listo para desayunar junto con nosotros. Comentándole que Kyung iba a vivir con nosotros.

— Espero que no sea una molestia para ustedes — dijo algo tímido —

— Para nada cariño — dijo mi madre mientras acariciaba su mejilla — nos alegra que quieras vivir con nosotros — comento aun mi madre —

Mire a mi hyung sonrojado por aquel apodo y asentir, mi padres diciendo que no había problema que se alegraba en tener más hijos.

— Por cierto les tenemos una sorpresa — comento mis padres —

Los observamos mientras se tomaban de las manos y nos dedicaba una sonrisa.

— Ahora soy jefe de unas las empresas más reconocidas en la ciudad — comento mi padre — lo que lleva a la sorpresa de que nos mudaremos a un casa más grande — comento mi padre feliz — SungKyung podrá tener una propia habitación al igual que tu SungKyu —

Ambos nos miramos confundido pero no dudamos en asentir y sonreírles, sintiendo mi corazón acelerado cuando mire a mi hyung con un tono rojizo en sus mejillas y un brillo de felicidad, al escuchar a mis padres llamarlo hijo.

Viendo negar a mi hyung que no le importaba haberle dicho de aquella manera para escucharle decirle padres a mis padres, porque desde ahora ellos serían sus padres también, no dude entrelazar su mano con la mía, para demostrarle lo feliz que me hacía al tenerle a mi lado y sé que así será para siempre.