INSTINTO (Keanu Reeves)

Capítulo 21

Estos últimos días todo ha marchado a la normalidad, Jolie siendo muy dulce y siendo buena amiga, al igual que Oscar el cual nos decía lo mucho que las chicas del Blitz nos extrañan y quieren que vayamos a visitarlas, James siendo el mismo idiota que siempre, y al parecer yo tengo un blanco pintado en la frente porque siempre soy la víctima de sus insultos y Amanda, bueno, sigue siendo Amanda, no hay nada interesante que decir de esa mujer.

-Que extraño- suelta Oscar, Jolie y yo lo miramos con atención- el señor Reeves ya lleva tiempo sin venir, ¿que le hiciste al pobre hombre Vi?- dice bromeando, pues él y Jolie ya estaban al tanto de lo sucedido

-No es extraño, desde que te contratamos hemos perdido a nuestro mejor cliente- dice Amanda con desdén saliendo de la nada -debería de despedirte por esa razón

-Yo no he hecho nada malo

-Solo estábamos bromeando Amanda, no es la gran cosa- dice Jolie defendiéndome

-¿Qué creías? ¿Que no me daba cuenta como lo veías? Pero si vete, ¿creías que una niña patética como tú podía con un hombre como él? -yo solamente me limitaba a sonreír, sus comentarios no me afectaban en lo más mínimo, pues ya sabíamos cuál era la verdad- ya vete bajando de tu nube niña, compórtate a tu nivel

-Sí, en verdad el señor Reeves se veía disgustado con mi presencia- repliqué con descaro, Amanda me lanzó otra de sus miradas venenosas y subió a su oficina sin decir una palabra

-Linda, te luciste- dice Oscar burlándose en voz baja

Ya era hora de cerrar, por lo cual Oscar y yo nos despedimos y cada quien tomo su rumbo. Llegué temprano a casa sin ningún inconveniente, desde aquel incidente siempre llevaba un gas pimienta en el bolso por si acaso, de esa forma me sentía más segura, pero gracias al cielo ya no me había encontrado en la necesidad siquiera de sacarlo, todo iba de maravilla.

-Buenas noches- saludé al señor Wilson a lo que el me saludó devuelta con la mano y una sonrisa. En verdad me sentía muy cómoda en este edificio, el personal es excelente y hasta ahora no he tenido problema con mis vecinos, me gusta estar aquí.

Entré a mi casa, me metí a la regadera para darme un baño rápido y relajarme, me puse mi pijama y me recosté en mi cama a dormir. Estaba profundamente dormida cuando escuché un ruido en la sala que me alarmó, no quería, pero me armé de valor y salí de mi habitación para ver qué era, cautelosamente ví que la puerta principal estaba levemente abierta, con mucho cuidado la cerré, no tenía un plan, alguien se había metido a mi departamento, de nuevo el miedo empezó a apoderarse de mi cuerpo, mis piernas temblaban, de nuevo me sentí vulnerable y no sabía que hacer, lo primero que se me vino a la mente fue agarrar una pequeña escultura de cerámica que tenía arriba de una mesita para poder defenderme.

-Se que estás ahí, voy a llamar a la Policia- dije en voz alta con la esperanza de que el ladrón saliera de mi departamento. No escuché ruido absoluto por lo que caminé a la sala para poder ponerle llave a la puerta e ir por mi celular y llamar a la Policia; de repente una mano me tapa la boca, y la otra me agarra la cintura, me sorprendí tanto que terminé tirando la pequeña figurilla de cerámica, mi instinto apareció y comencé a luchar, patalear y gritar a pesar de que el hombre me seguía cubriendo la boca, no se de donde saqué coraje que le di un cabezazo logrando que me soltara, trato de abalanzarse sobre mi y me dió una bofetada, me mareé, por lo que logró tirarme al suelo y sujetarme otra vez, era demasiado fuerte, me volvió a cubrir la boca ahogando mis gritos de desesperación.

-Lastima que no hay tiendas aquí que te puedan ayudar ahora dulzura- me paralicé por completo, era el mismo hombre que me siguió el otro día. Seguía luchando por desafanarme de su agarre pero las fuerzas se me agotaban, comenzó a meter su fría y sucia mano debajo de mi blusa, yo solo me retorcía del asco, terminó por desgarrarla, exponiendo mis senos ya que no llevaba brasier, las lagrimas brotaban, pero antes que fuera mas lejos alguien más comenzó a forzar la puerta

-Violet soy yo, ábreme por favor, ¿está todo bien? Escuché unos gritos- era él- ábreme- Ahora más que nunca saqué fuerzas y mordí su mano haciendo que la quitara

-¡Ayudame!- grité con todas mis fuerzas, a lo que el hombre entró en pánico y salió por la ventana de la sala, me levanté de inmediato y abrí la puerta abalanzándome sobre Keanu, solté más el llanto

-!¿Quién te hizo esto?!- gritó enfurecido

-Es el mismo hombre, el que siempre me sigue- el llanto no cesaba, me sentía desesperada y aterrada de nuevo- salió por la ventana

-Hijo de perra, espera aquí- me dijo con la intención de buscar al hombre, pero lo detuve

-No me dejes, por favor- le dije llorando, me miró a los ojos, podía ver que el enojo se transformó en preocupación, se percató que mi blusa estaba desgarrada, se quitó la chaqueta y me cubrió con ella, me abrazó y así me pude sentir segura de nuevo

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Espero les haya gustado y se hayan desesperando un poco, como yo lo hice escribiéndolo ;(