INSTINTO (Keanu Reeves)

Capítulo 20

-Yo, tengo miedo, tengo mucho miedo- solté sin más en llanto - esta no es la primera vez que siento que me siguen, pero si es la primera vez que me sentí aterrorizada y vulnerable, odio sentirme así, todas esas lecciones de artes marciales fueron al carajo, me pude defender y no lo hice, porque tenía miedo- Keanu rápidamente tomo mi cabeza y la apoyó sobre su pecho, mientras acariciaba mi cabello, el sonido de su corazón hizo que mis nervios y el llanto cesaran

-No te preocupes Violet, si no te sientes segura en el trayecto de tu trabajo a casa yo puedo traerte todos los días, si sientes que tu casa no es segura, las puertas de la mía siempre estarán abiertas para ti, como amigo de tu padre tengo la obligación de protegerte y eso haré- justamente lo que no quería

-Ahí está el problema- Keanu me miró confundido- no quiero que lo hagas por obligación, pensé que lo decías de corazón, pero ya me quedó claro que nada ya cambiado desde nuestra última conversación y nada va a cambiar. Gracias por todo, pero no, yo me las puedo arreglar- abrí la puerta del coche para salir pero Keanu abrió la suya igualmente y fue detrás de mi

-No seas así Violet- no miré atrás- tu padre tenía razón- frené en seco y lo miré- eres demasiado testaruda, deja de provocarte problemas- eso hizo que me hirviera la sangre, odiaba que mi padre me dijera eso y ahora el lo hacía también

-¿Qué?¿ahora tu también me tratas como una niña? Sí, soy testaruda, pero sabes qué, no necesito tener un lupa arriba de mi las 24 horas, yo puedo sola, no necesito ni el dinero de mi padre, y claramente no te necesito ni a ti y ni tu protección- dije enojada a más no poder empujándolo con el dedo en el pecho

-Violet perdón, lo dije sin pensar, no lo dije en serio

-Claro que lo hiciste- dije dándole una mirada de decepción- permiso y que tengas buena noche, ahora sí te aseguro que no volveré a ser una carga

-Claro que no lo eres...

No lo dejé terminar y subí a mi departamento.

No podía creer que había caído de nuevo, no se porqué rayos pensé que esta vez sería diferente, pero ya no más, ni si quiera sé porque hago tanto drama, en verdad odio el hecho del haber conectado demasiado rápido con ese hombre, es muy complicado, en todas las formas posibles, un problema que no necesito en mi vida.

Era inicio de semana, de nuevo ir al trabajo, ya no era tan malo pues es un lugar en el cual me concentro únicamente en el y puedo distraerme de vez en cuando con Jolie y Oscar.

Estaba por salir para dirigirme a la librería cuando mi celular suena.

Llamada entrante Papá

-Pequeña, buenos días

-Hola pa- en verdad me daba gusto escuchar su voz

-¿Cómo has estado hija? - ¿Keanu le habrá contado lo de la otra noche?

-Bien, ¿porqué?- pregunté temerosa, no quería que se enterara, no lo quiero preocupar

-Me alegra pequeña, solo preguntaba

-¿Cómo están mamá y tu?

-Extrañándote, esperamos irte a visitar pronto

-Sería genial pa, yo también los extraño mucho

-Pequeña, recuerda que en dos semanas comenzamos a grabar la de John Wick 4, solo para recordarte y que puedas acomodar el horario de tu trabajo- lo había olvidado por completo, y dado todo lo que ha pasado, ya no me emocionaba más verle la cara a aquel hombre

-No lo sé papá, la librería abarca todo mi tiempo

-Violet por favor no me canceles, te necesito en este proyecto

-Pero papá, claro que puedes conseguir un remplazo

-Hija por favor, nunca te pido nada, solamente acepta este proyecto, te van a pagar bien

-No lo sé, pero lo voy a pensar

-No lo pienses mucho- hizo una pausa- de igual manera, espero estes bien hija, me tengo que ir, te amo

-Y yo a ti pa

Fin de la llamada

Estaba llevando unos libros al depósito ya que alguno de ellos estaban dañados, la caja que llevaba era muy pesada por lo que literalmente caminaba haciendo equilibrio para que no se cayeran, llegue al depósito, estaba a punto de poner la caja arriba de la mesa para sacarlos cuando pisé un libro tirado y me caí junto los libros de la caja, gatee hacia los libros tirados para ponerlos sobre la mesa cuando unas manos extrañas comenzaron a ayudarme, elevé la mirada y sorpresivamente era James.

-¿A caso eres tonta?- típico de James, hacer gestos para ayudarme y arruinarlos con un comentario grosero o sarcástico, si había un hombre más extraño era él

- Que seas mi jefe no te da derecho a insultarme- reclamé

-Alguien no anda de humor hoy- responde sarcásticamente- que acaso tu sugar daddy no te dio anoche- okay esta vez se pasó de la raya

-¿De qué hablas idiota?, yo no tengo ningún sugar daddy- estaba harta de que la gente se vaya por la ilusión que todo lo que tengo es porque papi me lo dió- todo lo que tengo es porque he trabajado por ello

-¿A entonces te coges al señor Reeves gratis?- Si no fuera porque estábamos en el trabajo, le partía la cara a golpes

-¿Cuál es tu problema James? Yo no tengo nada con ese hombre, y por favor deja de insultarme de esa manera, no soy una cualquiera y si así fuera no habría ningún problema porque es mi vida y yo puedo estar con quien quiera

-Cuando te enojas te ves muy linda- dice sarcásticamente saliendo del depósito a lo que yo lo miré irse frustrada

Nunca me había sentido tan insultada en mi vida, en verdad lo odio.