Narra Violet
Seguía decaída y eso era evidente, pues en la librería Jolie y Oscar hacían todo lo posible por animarme, me llevaban comida, bebidas y hacían cosas graciosas para hacerme reír, por supuesto que funcionaban, pero solo era momentáneo. Lo que empecé a hacer para ocupar mi mente y distraerme de mis asuntos era empezar mi primera recopilación de poemas escritos por mi, el plan era mejorarlos lo mejor posible y probar suerte con algunas editoriales, no podía sentarme todo el día lamentándome, habría que ser productiva por mi salud mental.
Estaba apunto de terminar mi turno, tomé mis cosas para estar lista e irme directo al set, ya iba a salir cuando sentí una mano detenerme, me sobresalté, pero solo era Oscar;
-Cariño, eres demasiado linda para estar así de decaída, vas a ver que todo mejorará- me dedicó una dulce sonrisa y me abrazó, hacía tiempo no sentía un abrazo tan cálido, no sabía lo mucho que necesitaba uno
-Nos vemos Oscar- le sonreí igualmente y seguí mi camino
Al llegar al set, fui directo al remolque donde los doble de riesgo nos vestíamos y arreglábamos, Linda, la estilista, me dió el vestuario limpio y pasé al baño del remolque a cambiarme, era el usual pantalón de cuero, que era muy incómodo por cierto y el top negro, debo admitir que ese vestuario era muy a lo Carrie-Anne Moss en Matrix, pero bueno, no estaba ahí para opinar sobre que me pondría. Una vez con el conjunto puesto, me senté en la silla para caracterizar el cabello, con la usual peluca al estilo de Sofía.
-¡Que tonta!, olvidé la peluca, está en el otro remolque, ahora vuelvo Violet- dijo Linda saliendo del remolque; yo solo asentí, me miré un momento ante el espejo que tenía frente de mi y cerré los ojos, me sentía realmente agotada; no pasaron ni 3 minutos cuando escuché la puerta del remolque abrirse de nuevo
-Eso fue rápido- dije sin abrir los ojos
-Debemos hablar- al escuchar la voz ajena abrí los ojos rápidamente y era Keanu parado justo detrás de mí, viéndome fijamente a través del espejo; me llevé un buen susto debo admitir
-¿Ahora si quieres hablar?- contesté sarcásticamente sin verlo de frente
-Se que te dije cosas muy hirientes Violet, de verdad lo siento- dijo el castaño
-Me alegra que te hayas dado cuenta, ahora por favor retírate, Linda no tarda en venir y no quiero que nos vea juntos- dije fríamente
-No te preocupes por Linda, me encargué que nos dejara solos por unos minutos
-¿Como porqué harías eso?, yo no tengo nada que decirte- seguía molesta con él por la actitud que había tomado
-Por favor Violet, no seas así, de verdad necesito que me escuches- me siguió mirando fijamente por el espejo
-¿Así como tu me escuchaste aquella noche?- esta vez me puse de pie viéndolo fijamente, como supuse, ni siquiera podía mantener la mirada, por lo que la desvió
-Lo sé, sé que estuvo mal el no haberte dado la oportunidad de explicarte, pero entiéndeme... el verlos besándose fue como si un balde de agua fría cayera sobre mí, estaba muy enojado y confundido
-¡Él me besó a mi!- solté desesperada; era lo único que necesitaba que entendiera; Keanu me miró avergonzado esta vez, pues sabía que no mentía- ni siquiera le correspondí, interpretó mal las cosas y me robó el beso
-Yo no, no tenía idea, por un momento pensé que...-
-¿Qué me gustaba?- lo interrumpí- sabes muy bien que a la única persona que amo eres tú- declaré sincera- y el hecho que hayas creído por un momento que el amarme fue un error me lastimó mucho- sentencié
-Eso lo dije sin pensarlo Violet- confesó el castaño- lo dije porque en verdad estaba destrozado por dentro, el imaginarte dándole el afecto que me das a mi a otro hombre me hervía en la sangre, es porque yo también te amo mucho... y así pierda todo lo que he construido en mis años de vida, nunca me arrepentiría de amarte- tomó suavemente mi barbilla haciendo que conectáramos la mirada, podía ver la sinceridad en sus ojos, es una de las cualidades de ese hombre, sus ojos no mentían, y podía ver en ese momento que era sincero- Perdóname por favor
Al final ya no había nada que perdonar, pues había dicho justamente lo que quería oír de él, es un humano, el cual comente y va seguir cometiendo muchos errores, pero eso no sería excusa para dejarlo; asentí lentamente y me acerqué tiernamente para plantarle un corto beso en los labios;
-Me hiciste llorar esta vez- confesé en una sonrisa
-Y no me cansaré hasta compensártelo- esbozó una sonrisa, posó sus manos en mi cintura acercándome a él- ¿porqué no empezamos desde ahora?- lentamente fue depositando pequeños besitos en mi oreja y fue bajando por mi cuello, aquello causó un escalofrío por mi cuerpo
-¿Compensarme o compensarte a ti mismo?- pregunté divertida, ciertamente ya me hacía falta, y era más que obvio que él también, pero estábamos rodeados del staff, alguien podría descubrirnos
-Te aseguro que será una situación de ganar-ganar- contestó pícaramente, sus manos pasaron rápidamente a mi trasero, el cual lo masajeó lentamente pegándome aún más a él, podía sentir como se iba poniendo duro
-Aquí no... alguien podría escucharnos- dije dudosa
-Tendremos que ser cuidadosos en ese caso- dijo susurrándome en el oído; ese hombre sabía lo que hacía- además, ¿no te parece emocionante?- tenía razón, el saber que podríamos ser pillados en cualquier momento lo hacía aún más excitante; corrí a la puerta del remolque a asegurarme que estuviera cerrada y al verificar eso, volví a sus brazos rápidamente besándolo profundamente
El beso subía cada vez más de tono, solo Dios sabía cual urgidos estábamos del uno del otro; de nuevo las escurridizas manos del castaño bajaron hasta mi trasero, estaba realmente concentrado en esa área, pero no me molestaba en lo absoluto;
-¿Te había dicho lo bien que luces en esos pantalones?- de nuevo susurró en mi oído, aquello me estaba volviendo loca
-No puedo esperar a que te deshagas de ellos ahora mismo, son muy incómodos- dije con la intención de provocarlo; al parecer logré mi cometido ya que me cargó inesperadamente, por instinto enrollé mis piernas en su cintura y me cargó hasta llegar a la pequeña barra del remolque y me depositó ahí mismo, sin separarnos ningún segundo de aquel candente beso, bajé mi mano y la pasé por encima de su muy notable erección, aquello hizo que la piel se le erizara, me encantaba hacerlo temblar; desabroché el cinturón de su pantalón del traje negro e introduje mi mano lentamente hasta llegar a su miembro, lo observé y estaba igual que deseoso que yo; estaba en un estado en el que era urgente tenerlo dentro de mi, por lo que nos deshicimos completamente de nuestras prendas bajas, y sin avisar se introdujo dentro de mi, llenándome justo de lo que tenía deseando desde hace semanas, mi cuerpo también había resentido su ausencia, ya que lo estaba recibiendo de maravilla. Las envestidas eran lentas, pero dando justamente en el punto, en ese momento estaba totalmente cegada a las órdenes de mis deseos, por lo que pedía más, el castaño comprendió totalmente el mensaje aumentando la velocidad de estas; atrapó en un beso mis gemidos, pues debíamos ser cautelosos; poco a poco sentía como nuestros cuerpos se tensaban para explotar en un armonioso orgasmo; tomamos un momento para recuperar la compostura y nos vestimos nuevamente; había sido la cosa más candente que había hecho...
Keanu salió del remolque primero y a los 10 minutos salí yo, con cuidado que nadie me viera obviamente, no queríamos levantar sospechas; al salir, Patrick se atraviesa en mi camino;
-Sé en lo que andas metida Violet- oh no...
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INSTINTO (Keanu Reeves)
FanfictionViolet Stahelski una chica joven, llena de vida, con aspiraciones, sin un rumbo definido, en busca de aventuras y nuevas experiencias. Él, un hombre en sus cincuenta, la edad en donde solo quiere sentarse en el sillón a disfrutar de un buen libro y...