Después de que mamá se marchó a casa con papá, Keanu y yo nos ocupamos de empacar lo necesario para nuestra semana en Escocía; me sentía tan emocionada como sorprendida, pues claramente habíamos quedado en ahorrarnos ese viaje innecesario, pero ahora que se había molestado en organizarlo, no podría estar más que feliz.
A la mañana siguiente nos despertamos a las 6:00 A.M, pues el vuelo salía a las 8:00 A.M, conociendo el horrible sistema de los aeropuertos, era conveniente el llegar temprano para evitar imprevistos. Nos vestimos con ropa cómoda y el castaño se encargó se subir las maletas al taxi, pues para no dejar el auto en el aeropuerto, decidimos ir en taxi; amodorrados aún por levantarnos temprano, llegamos al aeropuerto, el cual se encontraba abarrotado como lo habíamos previsto, tomamos nuestras maletas y pasamos por el proceso de checar el equipaje y todo lo que conlleva; nos sentamos para esperar nuestro vuelo y como era ya rutina, un grupo de niños se acercaron junto su madre a pedirle una foto a Keanu, el cual nunca se negaba, era algo que admiraba mucho de él, no importaba lo cansado que estuviese o su humor del día, el siempre tenía tiempo para sus admiradores, su calidad humana era una de las cualidades que me encantaba de él.
Al poco tiempo escuchamos a la voceadora, era momento de abordar el avión. Al subir, el castaño nos guió hasta nuestros asientos, los cuales eran de clase común por supuesto, a pesar de tener el dinero, a él no le gustaban esas comodidades innecesarias. Al colocarnos en nuestros respectivos asientos, miré por la ventana y veía como los trabajadores del aeropuerto despejaban todo para poder despegar, para ser sincera nunca me he podido acostumbrar a los aviones, me da una ansiedad terrible, incluso llego a hiperventilarme de los nervios; el capitán dió la señal por los altavoces de tomar nuestros asientos, pues estábamos a punto de despegar, de inmediato tensé todo mi cuerpo y comencé a sudar, el castaño tomó de mi mano y la apretó fuerte;
-Todo está bien- por lo general debía tomar unos tranquilizantes para sobrellevar los vuelos, pero místicamente con su solo tacto logró calmarme por completo; rodeó su brazo sobre mis hombros y me acurrucó junto con él; y sin sentirlo, el avión había despegado
Después de casi 14 horas de un largo vuelo aterrizamos en tierras escocesas, no encontrábamos en el Aeropuerto de Edimburgo, en Los Ángeles la hora eran las 10 de la noche, pero en la hora local de Escocia ya eran las 6 de la mañana , afortunadamente dormimos casi todo el camino, por lo que el jet lag no nos dió tan duro.
Al salir Keanu hizo una señal, un taxista rápidamente la captó y nos subimos en este, el castaño dió las indicaciones y partimos a nuestro hotel. Las calles de Edimburgo iban más allá de mi imaginación, el estar en esa ciudad era como transportarte a la época medieval, con sus edificios hechos de piedra y sus monumentos. Al llegar al hotel, por fuera lucía un gran letrero "The Scotsman", la fachada era igual que el resto de los edificios para no perder el ambiente histórico.
-Wow- eso fue lo único que salió de mi boca al adentrarnos al hotel, pues era mucho más hermoso por dentro, las paredes estaban tapizadas completamente de madera reluciente, las mondaduras del techo color beige le daban un toque real y fino, estaba completamente embobada en los detalles de este que ni cuenta me di cuando Keanu nos registró
-Habitación 42- dijo mientras agitaba las llaves frente a mi; rápidamente lo seguí hasta el piso de arriba; en el hotel había elevador, pero fue inevitable no querer subir las escalaras, pues estar eran hechas de mármol con detalles verde oscuro, adornado de un costado estaba un gran vitral por donde se colaba la luz del sol, en el viral habían seis escudos, aunque desconocían a quienes pertenecían
Al llegar a nuestra habitación y abrir la puerta, nos encontramos dentro de esta, pero a comparación del resto del estilo del hotel, se veía un poco más moderna, pero sin perder ese encanto antiguo; la habitación era grande, pero no ostentosa, justamente perfecta, había una pequeña barra en la cual habían 4 botellas pequeñas de Whisky y dos copas, una pequeña mesita con dos sillones, los cuales estaban tapizados con telas de Kilt escocesas, la cama era matrimonial y el respaldo estaba tapizado exactamente igual que los sillones haciendo juego; la ventana de la habitación era grande y al abrir esta te adentrabas al pequeño balcón; la vista de la ciudad era impresionante, y lo mejor es que a lo lejos podías ver el famoso Castillo de Edimburgo.
-¿Te gusta?- pregunta el castaño mientras me abraza por la espalda contemplando la hermosa vista
-Es un sueño- respondí aún atónita ante tanta belleza
-Lo sé- afirmó- es un sueño el estar aquí contigo- me di la vuelta para verlo a los ojos, acaricié su rostro y lo besé tiernamente, pues para mi todo lo que estaba viviendo no era más que un sueño, uno del que no quería despertar nunca
Era temprano, por lo que nos vestimos para conseguir algo de desayuno e iniciar el largo día que nos esperaba.
A pesar que en el hotel hay un restaurante, decidimos aventurarnos por sí solos a las calles de Edimburgo a explorar un poco los locales de comida; finalmente dimos con una pequeña fonda con comida tradicional escocesa, rápidamente fuimos atendidos por una señora mayor, la cual nos presentó los menús, al verlo, nos miramos con cara de confundidos, pues lógicamente no sabíamos que elegir, al poco tiempo la misma señor se nos acerca, claramente podía notar nuestra cara de perdidos;
-¿Son Americanos no?- Keanu y yo solo asentimos ante su pregunta, la señora solo río a lo bajo- no se preocupen, les traeré lo mejor de nuestra comida- rápidamente se alejó llevándose los menús; algo que me sorprendía de los escoceses hasta ahora era su hospitalidad, y me encantaba su acento fuerte; al poco tiempo volvió con varios platillos- Neeps y tatties- dijo mientras ponía el platillo frente a mi- Haggis- repitió la acción- disfruten- Keanu y yo nos miramos de nuevo, pero esta vez con incertidumbre, ni siquiera se había molestado en explicar qué era, pero para ser justos no nos importaba tampoco, estábamos hambrientos; tomé el temedor y lo metí en aquel platillo parecido al pure de papá metiéndolo a mi boca, no era nada fuera de lo común, pero era delicioso, y juzgando por el semblante del castaño, a el también le había agradado la comida
Al terminar de comer, estábamos satisfechos, por lo que el castaño pidió la cuenta, al acercarse la mujer nos miró amablemente;
-Estaba delicioso- expresé a la mujer
-Me alegra que a tu padre y a ti les haya gustado la comida- aromáticamente el castaño y yo nos miramos incómodamente, siempre era extraño cuando insinuaban aquello
-Es mi esposa- aclaró el castaño; la cara de la señora se puso más roja que sus cabellos
-Lo siento mucho, es solo que la muchacha se ve muy joven- dijo la señora avergonzada, Keanu y yo solo sonreímos, pues ya estábamos acostumbrados
-Esta bien- le tomé la mano para que no se sintiera mal- estamos aquí por nuestra luna de miel- la señora cambió su semblante a uno más contento
-¡Recién casados!- expresó feliz- por la confusión, la comida corre a cuenta de la casa- declaró contenta
-De ninguna manera- respondió Keanu
-Insisto- dijo la señora una vez más- espero tengan un matrimonio muy largo y feliz- soltó en una sonrisa; Keanu y yo nos fuimos, pero no sin antes dejar una muy buena propina ya que la mujer insistió en regalarnos la comida
Presentía que más cosas geniales venían en este viaje, sorpréndenos Escocia...
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Capítulo largo para compensar la ausencia ;(Dato que nadie pidió: Escocia es mi destino de ensueño, díganme cual es el de ustedes 👀
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INSTINTO (Keanu Reeves)
FanfictionViolet Stahelski una chica joven, llena de vida, con aspiraciones, sin un rumbo definido, en busca de aventuras y nuevas experiencias. Él, un hombre en sus cincuenta, la edad en donde solo quiere sentarse en el sillón a disfrutar de un buen libro y...