INSTINTO (Keanu Reeves)

Capítulo 55 (parte l)

Narra Violet

Mi cumpleaños 26 no podría ir mejor, primero, mi cheesecake favorito, un desayuno sorpresa, una hermosa flor, una copia invaluable de mi libro favorito, sexo de cumpleaños, y todo lo pude hacer con el amor de mi vida, debería sentirme desbordante de felicidad en estos momentos, pero algo me faltaba, entre los pocos mensajes y llamadas de felicitaciones de mis amigos, no recibí ninguno de papá ni mamá; estaba tan acostumbrada al desayuno en cama preparado por mamá, el olor a tocino crujiente impregnado por la habitación en la mañana, y el picnic tradicional de cumpleaños en el patio trasero de casa, con mis comidas favoritas y el cheesecake tradicional hecho por mamá, nunca me imaginé que el año pasado sería el último, pero supongo que así es la vida, cambiando constantemente. No quería que la nostalgia de los recuerdos me pusieran tristes, pues Keanu ha trabajado muy duro para hacer este día el más feliz de todos, y eso estaba decidida a hacer, disfrutar de este día y olvidar, o al menos solo por hoy, todo los problemas que me asechaban.

Estaba muy emocionada, pues esta sería la primera vez en la que saldríamos a una cena como pareja oficialmente, por fin me sentía libre, ahora que ya no era más un secreto.

Ya casi era hora de irnos, por lo que me di los últimos retoques para nuestra cita de esta noche; vestí un sobrio vestido negro, unos accesorios pequeños y dejé mi cabello con sus ondas naturales como de costumbre, y me maquillé solo un poco más de lo usual;

-Te vez tan hermosa como siempre- apareció Keanu depositándome un tierno beso en la mejilla; el vestía bastante bien también, se afeitó un poco la barba dándole forma, el cabello lo tenía lago como me encantaba, pero lucían formal con su traje negro que le sentaba tan bien

-Tú luces como el hombre más guapo del mundo- me divertía ver lo incómodo que se ponía cuando le intentaba decir un cumplido, era tierno inconsistentemente

Subimos a su auto, y nos dirigimos en marcha al misterioso lugar; después de un viaje no tan largo, llegamos a un lugar llamado Angelini Osteria, era un gran restaurante italiano, era conocido por su exquisita salsa de tomate casera, al igual que sus precios altos, no frecuentaba para nada este tipo de restaurantes caros, pero se veía lindo;

-Señor Reeves, buenas noches- saludó el chico del valet parking

-Hey Dan, ¿noche agitada?- respondió amigable

-Es una buena noche- replicó el joven; Keanu le entregó las llaves del auto y me tomó de la mano para así entrar al lugar; al ver por dentro el lugar, me sentí abrumada, pues la gente se veía extremadamente elegante, por lo que resentí mi pobre elección de guardarropa, por otra parte, ya estábamos ahí, solo fingiré sentirme la mujer más segura, si la gente no percibe el miedo, nunca lo notan, así que no me dejé intimidar y caminé orgullosa a lado de él;

-Bienvenidos a Angelini Osteria- nos recibió una mujer pelirroja muy guapa de recepción- señor Reeves, lo guío a su mesa- no sabía si estar sorprendida por el hecho que casi todos ahí lo conocían, o verlo como algo normal; solo seguimos a la pomposa pelirroja a través del lugar- mesa para dos junto a la ventana- sonrió la pelirroja coquetamente, obviamente la atención iba exclusivamente a Keanu- a su sobrina le va a encantar la comida, estoy segura- dijo pasando su mano por el hombro de Keanu; aquello realmente me molestó

-No somos familiares- le dije seria- es mi novio- solté imperativamente; la mujer solo me miró avergonzada, pues sabía que había notado que estaba coqueteando con él

-Mil disculpas, con su permiso- salió la mujer huyendo; yo solo la seguí con la mirada fulminante

-Nunca te había visto así- soltó el castaño riéndose de la situación- ¿acaso estás celosa?

-No me hagas enojar en mi cumpleaños Reeves- le dije seria también; Keanu solo seguía riendo a lo bajo; nos sentamos en la mesa, y después de aquella incómoda escena, pude apreciar los hermosos detalles del restaurante, la mesa estaba finamente decorada con velas y un pequeño buqué de rosas rojas, la música era agradable, dándole un toque bohemio, y la vista, Dios mío esa vista, era tan hermosa que me robaba un suspiro, estaba realmente impresionada- la vista es bellísima- solté emocionada

-Lo sé- respondió sin quitarme la mirada de encima- la más hermosa de todas- al entender que se refería a mí, no pude evitar sonrojarme, aún no podía acostumbrarme a los halagos

La velada iba bien al principio, era solo que, constantemente la gente se acercaba a pedir autógrafos y fotografías, a las cuales el castaño no se negaba, lo cual me parecía bien, pero eso no quitaba el hecho de que estuviésemos conversando y cada 10 minutos llegara alguien a interrumpir, pero supongo debo irme acostumbrando a esto, nuestras vidas no podían ser privadas. Fuera de todo eso, también notaba una actitud extraña de parte de Keanu, se le veía ansioso, como si estuviera a punto de decirme algo y al final no se animara, o era interrumpido por alguien, pero lo conocía, y tenía algo en mente que lo inquietaba.

-¿Violet?

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Capítulo largo, sigan leyendo en la 2da parte ;)