XXXVII

15 4 0
                                    

Gracias a ustedes la historia llegó a los 1k, se los agradezco tanto por darle tanto apoyo, me hace tan feliz mirar esto, siendo honesta no pensé que iba a ser bien resivido la historia, pero después de esto no me cabe duda de que hay potencial, y sin ustedes no estaría aquí, y mucho menos mirara el apoyo que resive.

En agradecimiento, les regalo un capítulo extra, los quiero mucho.

No me quedo más remedio que esperar, hasta que me di cuenta que estábamos pasando por el pasillo hasta que terminamos en mi habitación, « ¿por qué había venido aquí, exactamente?», el sonido de la puerta siendo azotada con algo de fuerza me hiso r...

Ops! Esta imagem não segue nossas diretrizes de conteúdo. Para continuar a publicação, tente removê-la ou carregar outra.

No me quedo más remedio que esperar, hasta que me di cuenta que estábamos pasando por el pasillo hasta que terminamos en mi habitación, « ¿por qué había venido aquí, exactamente?», el sonido de la puerta siendo azotada con algo de fuerza me hiso respingar, puesto que me había asustado por el sonido fuerte tan repentino.

Hasta que termine en la cama, había tenido cuidado en recostarme mientras él se ponía a mi lado, su mirada estaba fija en el techo, mientras yo observaba el perfil de su rostro, logrando percibir lo atractivo que era realmente, tenía una cuantas pequeñas cicatrices en la parte de su mandíbula y un poco el costado de su cuello.

Con sumo cuidado llevo su mano a la mía para terminar entrelazándola, haciendo que sintiera la calidez que emanaba, pero en la forma en la que la sostenía, me mostraba algo más, y era seguridad, parecía necesitarla en ese momento, el iris de su ojos resaltaba de alguna manera, notándose como si estos empezaran a brillar, mientras empezaban a humedecerse.

—Yo...—su voz tembló, mientras pensaba lo que diría—yo...no sé qué hacer— se mostró temeroso, captando aún más mi atención.

Provocando un silencio melancólico después de decir aquello, no me atreví a hablar, debido a que estaba esperando a que siguiera hablando, para saber la razón de sus palabras, su mano me sujetó con algo más de fuerza, mostrándose que necesitaba sentirse con fuerza.

Me acomode, quedando de lado mientras seguía sujetando su mano, esperando que siguiera, y lentamente cerro sus ojos, notando el momento en que una lágrima terminaba cayendo por su mejilla, aquello logro remover mis sentimientos ante su estado melancólico.

—No quiero perderla— y finalmente su voz se quebró, mientras más lagrimas acompañaban a otras, mientras mostraba su vulnerabilidad—no quiero quedar solo— seguía manteniendo sus ojos cerrados—no quiero que muera— y mi corazón se rompió al escuchar aquello—no a mi madre, no a la única mujer que me ama.

Me fui inevitable no soltar unas cuantas lágrimas, lentamente abrió sus ojos, dejando ver como estos brillaban con intensidad entre la oscuridad de mi habitación, con mi mano libre limpiaba sus lágrimas, para después apegarme a él pudiendo abrazarlo.

Sentía como mi pecho era oprimido, pero era por el sentimiento que sentía, debido a que sus palabras habían hecho efecto en mí, el simplemente me correspondió, mostrando sus necesidad, al abrazarme con suficiente fuerza, para mostrar lo asustado que estaba en ese momento por lo que estaba pasando.

Seria en otro momento en el que le preguntara, la razón de que su madre podía fallecer, por el momento no era lo más adecuado hacer aquella pregunta.

En algún momento, los dos quedamos completamente dormidos, pero desperté ante los ligeros toque de mi puerta, con voz adormilada hable, indicando que podían pasar.

—Cariño— dijo mi madre al asomarse con cuidado al abrir la puerta dejando una pequeña abertura—lo siento, no sabía que estaban dormidos.

—Descuida mamá— sonreí con sutileza, mientras mantenía por un breve momento mi cabeza lejos del pecho de Kilian.

—Bueno, he hecho la cena, por si gustan comer algo— aviso, mientras volvía a cerrar la puerta y escuchar sus pasos alejarse.

Aun sentía mis ojos algo pesados por el sueño, además de ver llorado en silencio, volví a acomodar mi cabeza en su pecho, escuchando los latidos de su corazón fuertes y calmados.

No sabía si debía levantarme y despertar a Kilian, o simplemente volver a dormir, pero no necesite decidir qué hacer, puesto escuche el sonido del largo bostezo de él, indicando que ya se había despertado, lo cual provocó que hiciera lo mismo, mientras seguía en mi posición, luego de ellos escuche su risa baja.

El guardián de la noche, la historia del monarca. [PAUSADA]Onde histórias criam vida. Descubra agora