Amor Confuso (otra vez :)

Capítulo Hard, Porque lo pidieron

Roy se despertó de un agradable sueño, encontrándose en la cama con sus novios. Robin estaba volteado hacia él, todavía dormido y el fuerte brazo de Harry lo mantenía atrapado entre esos idiotas. No tenía ganas de levantarse de todos modos, se dijo a sí mismo, sólo para notar segundos más tarde que necesitaba usar el baño. Se sentía demasiado tonto, tratando de levantarse sin despertar a nadie

¡¿Por qué demonios intentaba su vejiga arruinar su relación?!

Se movió lentamente, pero una de sus piernas pateó al hombre delante de él. Se quedó quieto, con la esperanza de que el otro siguiera dormido.

Rob se despertó, mirando el lío que había delante de él y sonriendo.

-Buenos días amor, ¿te vas tan temprano?

-Yo...- realmente no quería decir nada, totalmente avergonzado.

- Necesitas usar el baño, ¿no? -Rob adivinó.

Roy negó con la cabeza sí, derrotado.

Debería ayudarlo, y en un día normal, lo habría hecho, pero verlo sonrojado y atrapado de esa manera era demasiado tentador.

Deslizó la mano por la camisa del otro, amando cómo se congeló al instante. Esos ojos azules se veían tan bonitos cuando se enojaba.

-¿Qué crees que estás haciendo?! - dijo, tratando de no ser ruidoso. - ¡Lo despertarás! -

Harry todavía estaba dormido, roncando sonoramente, pero aun sosteniéndolo en su lugar con su pesado brazo.

-No te preocupes, Tiene el sueño pesado. Bastante desafortunado si me preguntas, porque podría estar disfrutando de la... vista. - Se inclinó para darle un beso, de lo cual Roy obviamente no pudo escapar. - Podríamos divertirnos, ¿no crees? - Empezó a besar el cuello del otro, buscando un punto sensible.

Roy no quería despertar a Harry y ser encontrado en esta situación, así que no dijo nada. Solo tenía que aguantar esto por un rato, más tarde se vengaría de Robin por tratarlo de esta manera. Aunque, ahora que estaba comenzando la acción, sería triste no disfrutarlo ¿verdad?

-Bueno, siempre y cuando no hagamos ruido. -

-Oh... ¿Ya no hablarás? Bueno, eso es triste. Tienes una voz tan linda.

Roy lo miró, tratando de no excitarse. No debería ser así.

Sintió que los dedos del otro bajan peligrosamente, demasiado cerca de su entrepierna para su gusto. La otra mano se metió debajo de su playera, subiendo hacia su pecho y haciéndole temblar, enviando otra ola de sangre a sus mejillas. Se las arregló para no moverse, pero un gemido involuntariamente dejó su boca, para el deleite de Robin, que decidió llevar las cosas más lejos.

Deslizó su mano por los pantalones cortos rojos de Roy, tocándolo sobre la delgada tela, estimulándolo mientras mantenía el contacto visual y le sonreía con malicia. Parecía disfrutar esto, tal vez más de lo necesario.

"¿Desde cuándo es así?! "Roy se preguntó a sí mismo. "Se ve tan puro cuando lo conoces por primera vez, con sus gafas tan adorables y esa sonrisa sincera... ¿quíen habría pensado que es un pervertido?!"

Y sin embargo, se sentía demasiado bien.

Fue arrancado de sus pensamientos cuando las dos manos de Rob empezaron a trabajar, adentrándose en su ropa interior, tomándolo desprevenido. Soltó un gemido audible, lo suficientemente alto como para despertar a Harry. Se congeló en su lugar, deseando su muerte, y maldiciendo a Robin, que se quedó allí, con las manos todavía dentro de su ropa interior, con una sonrisa expectante.