DANGEROUS

Epílogo

~Un año después~

Melissa

Miro como las olas rompen en las orilla que esta a pocos metros de mi y cierro los ojos.

Flashback

-Cuando me casé lo haré en un gran palacio, como una princesa, a lo Disney.-dice Sara mientras andamos por el paseo marítimo de nuestra ciudad.

-Pues yo celebrare mi boda en la playa, con toda mi familia, mis amigos...con todo el mundo que quiera venir.-digo y bebo un poco de mi granizada.

-Esta claro que tú serás mi madrina y yo la tuya.-dice con una sonrisa, se sienta en uno de los bancos y yo me siento a su lado.

-No podría ser otra persona.-digo y está me abraza haciendo que mi granizada caiga en mis piernas y que yo me levante de un salto. Una carcajada sale de su boca y de inmediato hace que yo suelte otra.

Fin del Flashback

Dos lagrimas caen de mis ojos y respiro hondo.

Quien me habría dicho que estaría a horas de mi boda y que lo único que iba a cumplir es que sería en la playa, pero no estaría mi familia, ni mis amigos, ni siquiera Sara sería mi madrina. Solo estaríamos Stephen, el pequeño Leo y yo.

-¡Mamá!.-dice la voz de Stephen haciendo que me gire. Este viene corriendo con Leo en brazos y yo me levanto.-Mamá ya hemos comprado el traje del pequeñín para la boda.-dice Stephen y yo sonrío. Cojo al pequeño Leo y lo abrazo muy fuerte.-Yo también quiero un abrazo de esos.-dice haciendo un puchero y sonrío. Me acerco a sus labios y dejo un pequeño beso en ellos.

-Para ti había reservado un beso.-digo mirándole a los ojos y este sonríe.

-¿Solo uno?.-pregunta y vuelve a unir nuestros labios.

-Señorita Catalina.-dice la voz de Grace, nuestra ama de llaves, y me separo de Stephen.-La buscan.-dice un poco avergonzada por haber interrumpido y sonrío.

-¿Quien Grace?.-pregunto andando haciendo ella.

-Dice que es el diseñador de su vestido de novia.-frunzo el ceño y me giro para mirar a Stephen.

-Esto es cosa tuya.-digo apuntándole con el dedo y Leo empieza a reirse. Sonrío y Stephen se acerca para coger de nuevo a Leo.

-Anda ve y déjanos a lo hombre preparar nuestras cosas.-dice y deja otro beso en mis labios antes de irse con Leo en brazos hacia la playa. Vuelvo los ojos y me acerco a Grace.

-¿Me ayudas con tu opinión para elegir el vestido?.-pregunto agarrándome de su brazo y esta asiente con una sonrisa.

~Al día siguiente~

-¿Preparada?.-pregunta Grace y yo asiento nerviosa.-Puede girarse cuando quiera señorita Catalina.-sin pensármelo dos veces me doy la vuelta y siento como mis ojos se llenan de lágrimas al ver mi reflejo en el espejo. Me tapo la boca para que de esta no salga un sollozo y Grace se acerca para abrazarme.-Esta preciosa.-le sonrío y me abanico para que las lágrimas no caigan de mis ojos.

-Me encanta el resultado, pero no entiendo el hacer todo cuando solo estaremos nosotros.-respiro hondo y Grace me mira.

-Toda mujer se tiene que ver increíble el día de su boda y usted no es ninguna excepción.-sonrío y asiento.

-Tienes razón, pero ni siquiera prepare una ceremonia bonita, solo llame al cura y ya está.-digo un poco triste.

-Por eso no se preocupe. Ahora tenemos que irnos.-frunzo el ceño y esta sonríe.-No haga preguntas.

Cuando el coche para en una de mis playas favoritas me giro para mirar a Grace.

-No haga preguntas.-esta se baja y yo hago lo mismo.

-Pero no entiendo qué hacemos en Playa Bonita.-digo, está mira detrás mía y dibuja una sonrisa en su cara.

Me giro y siento como mi corazón da un vuelco al ver a Stephen vestido entero de blanco. Este me mira de arriba abajo y veo como sus ojos tienen un brillo muy especial.

-Estás preciosa muñeca...-dice en un hilo de voz. Sonrío y agacho la cabeza ya que ha hecho que me sonroje. De repente caigo en que me ha visto antes de la boda le doy un pequeño empujón.

-No podías ver el vestido antes de la boda. Trae mala suerte Step-Diego.-me muerdo el labio y esté suelta una carcajada.

-La suerte la tenemos de nuestro lado.-me guiña un ojo y niego con una sonrisa.

-¿Que hacemos aquí?.-pregunto y este se toca la nuca nervioso.

-Se lo especial que es este día para ti, al igual que para mi-empieza a decir y siento como mis ojos empiezan a humedecerse.-Y se cual era tu sueño Mel...-pestañeó varias veces evitando que las lágrimas caigan de mis ojos pero es algo imposible. Stephen se acerca y seca mis lágrimas.-Te amo con toda mi alma, cuando suene la canción baja por las escaleras.-frunzo el ceño y este se va corriendo por ellas.

Me giro hacia Grace, que se está secando las lágrimas y se acerca a mi.

-¿Preparada?.-pregunta y yo frunzo el ceño de nuevo extrañada ya que no se de que están hablando.- De repente mi canción favorita, "Human" Christina Perri empieza a sonar. Grace me entrega mi ramo de flores y me da su brazo para que me agarre de el.

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