Divagares y Devanares del Sueño

El Cadáver Parlante

Los muertos no hablan, ¿verdad? Lo mismo pensaba yo, hasta hace unos días cuando me probaron equivocado. Pero quizás me lo debí haber visto, recuerdo ese evento extraño, hace ya tantos años.

Recuerdo una vez, hace unos años, cuando mis compañeros de colegio me encontraron, según ellos, hablándole al aire. Estoy seguro que no fue así, llevaba meses encontrándomelo a él, siempre en el patio del colegio, haciendo la suya, solo, por su lado. No hablaba con nadie, más que consigo mismo. Y aunque extraño me parecía esto, yo, que no era de tener muchos amigos encontré quizás en él una oportunidad de conocer a alguien que lo fuera. Hablé con él muchas veces, me contó sobre sus padres a quienes veía seguido y sobre su madre, a quien veía a veces y extrañaba. Intentaba evitar ese tema porque siempre decir su nombre lo afectaba. Me hablaba de sus juegos favoritos, y de lo que hacía el fin de semana. 

Pero desde ese evento en el patio, cuando mis compañeros me encontraron no me habló más. Estaba ahí, haciendo la suya, pero se alejaba cada vez que me le acercaba. Recuerdo no entender porqué lo hacía, no comprenderlo, hablarlo con mis padres una y otra vez, y aún más ni entendí cuando un día, sin avisar, desapareció... sin siquiera despedirse.

Con el tiempo lo atribui a mí mente inocente, es normal para los niños tener amigos invisibles, crear esas fantasías de personas y lugares, con el objetivo de prepararse para la vida adulta, pero esto no parecía un simple juego. Siempre dude de que más mente fuera capaz de crear semejante historia de la nada, me parece imposible... y quizás era porque así era. Ahora está historia ha vuelto a mí mente, más después de lo recientemente vivido. 

Ahoratengomiedo, porque siento que ha regresado. Ha vuelto a mí lado, me lo ha avisado. Yparece que con nosotros esta enojado.