Inmortales

→ Capítulo 4.

Fijamente

El mismo castillo, el mismo atuendo. Una y otra vez se repetía el sueño era como si estuviera estancada en ese lugar mientras dormía. Una pesadilla interminable. Hasta que el ciclo cambio, podía acercarme más y más a él, conforme pasaba el tiempo aquí. Cómo si estuviera más cerca de mi.
Últimamente desde que llegamos a Forks podia interactuar más con él. Solo que sin decir una palabra, el sueño se terminaba antes de poder preguntarle cualquier cosa, su nombre, su edad, cualquier cosa, no podía

*Lunes*

Ya despierta, lamentablemente tenía que ir al Instituto hoy, la idea me fastidiaba, mientras tanto a Holly por otro lado se había despertado dos horas antes de irnos. Eso era hace media hora, antes de escuchar los gritos de Holly diciendo que me levantará
En contra de mi voluntad, lo hice, me dirigí al baño a refrescar mi cara y a maquillarme, porque no quería asustar a todos con mi cara de sueño y obviamente a Holly no le gustaría ir conmigo.
Opte por unos jeans azul oscuro, y una sudadera negra, con mis converse rojas.
Peine mi cabello para aplacarlo de modo que fuera liso. Holly por otro lado, puso su cabello ondulado de una manera perfecta. Con un vestido de invierno azul, del mismo tono que mis jeans y unos botines negros.

- Te serví el desayuno- apuntó a un plato de cereal- anda, que se hace tarde- rodé los ojos.

- Cómo digas- me burlé.

- Sabes, no deberías ocultar tu acento inglés, es lindo- sonrió.

- Mmm, no lo se- no quería que me dijeran : ¡Ay! Mira tiene acento inglés vamos a tomar té.

- Bueno, hazlo por mi- gruñí.

- Está bien- renegue.

- Ahora termina tu cereal y vamos a cazar chicos candentes como el de ayer.

- ¡Que parte no entiendes de que hasta que no sepa que es humano tu no saldrás con nadie!

- Para mi que estás celosa, no quieres que salga con alguien porque te quedarás sola viendo televisión y comiendo helado.

- No quiero que te dañen- susurré.

- Espera, ¿Dijiste que no quieres que me hagan daño? ¡TU GRACE COLLINS TE PREOCUPAS POR MI!- reí.

- No idiota no herida sentimental- recorde el trato que hize con Zack- bueno sí.

- ¡Lo sabía! Tu me quier..

- ¡Se nos hace tarde!- interrumpí.

El Instituto no estaba tan alejado, solo se hacían diez minutos en auto para llegar. Desde que llegamos no ha habido los típicos climas de Forks solo el cielo nublado, igual que hoy. Entonces recordé a Zack, las lágrimas de sus ojos marrones y su cabello rojizo alborotado, con su sonrisa y carisma haciéndome reír. Sacudí la cabeza despejando todo pensamiento de él o relacionado al Internado, cuando la voz de Holly me saco de mis pensamientos.

- ¿Que crees que aprenderemos?

- Realmente no lo sé pero tú harás algo diferente a mi porque eres menor.

- ¡Es tan solo por un año!- ¿Un año? Más bien seiscientos- si okay, me olvidé- recordó- son más pero tú tienes "dieciocho" y yo tengo diecisiete así que no es tanto.

- No, pero aquí no tienes las clases juntas.

- ¡Es mi primer año en un Instituto si!- alce las manos a modo de rendición- las manos en el volante, puede que tú no mueras pero yo si.

- Cierto, pero sabes que no te haría daño- aleje una mano del volante y la golpe.

- Pero se que aveces quieres.