-Te ves terrible.-Rió y yo lo imite.
-No te imaginas todo lo que sucedió hoy. Todo por tu culpa, casi me matas.
-Pero estoy aquí. Cuéntame.
Me senté a su lado y tomé su mano.
-Iba a suicidarme. Fui hasta tu apartamento y me iba a tirar desde lo alto del edificio. Vino la policía y toda esa mierda. Me agarraron y me llevaron hasta otro hospital, del cual me escape. Los bomberos inflaron un colchón y la gente gritaba. Estaba tan mal.
-Emma, no puedes dejarme. Lo prometiste.
-Pensé que tu me dejarías. Y me vi tan triste.
-No te dejaría.
Entonces puso sus frías manos en mis mejillas y me beso.
Necesitaba ese beso tanto, que cuando me besó, pude por segundos olvidarme de toda la mierda y disfrutar el momento.
Llamé a mi mamá por el móvil de Benjamín.
-¿Sí?
-Soy Emma. Paso algo terrible, Benjamín tubo un accidente y quedo inconsciente por unas horas. Ahora despertó y esta bien. Así que me quedaré en el hospital.
-Emma, aun eres menor de edad y estas bajo mi responsabilidad. Deja de tomar las decisiones por tu cuenta.
-Perdón. Pero es Benjamín. Lo siento. Te quiero.
Entones corté el llamado y suspire.
Benjamín dormía dentro de la pequeña habitación. Mientras yo tomaba un café en uno de los pasillos, jugueteando con el móvil de Benjamín entre mis manos.
Benjamín se puso de pie, y se tambaleo. Pero los enfermeros lo sostuvieron. Luego se puso rígido, y tomo el control de la situación.
Yo estaba al lado de la puerta, mirándolo con cariño. Era tan hermoso. Él me sonrió al verme. Estaba con un camisón celeste. Y el cabello todo descontrolado.
Así que los enfermeros le anotaron una medicación. Y nos dejaron solos.
-Después de tantos días, al fin el alta. Te traje ropa-Le entregué la mochila, donde había una remera blanca, unos jeans azules y una camperita negra.
Así que el se quitó el camisón, quedándose en bóxer y se fue poniendo la ropa.
Luego le tome de la mano y caminamos los pasillos restantes, hasta terminar dentro del ascensor.
-Que loco. En tan poco días, los dos estuvimos internados. Y graves.
-Sí. ¿Recuerdas algo de lo que paso?
Las puertas se abrieron y continuamos caminando.
-La verdad, solo recuerdo estar inyectándome más de lo normal en el baño. Estaba triste, no sabía como olvidar ese dolor. Y quería descansar, alejarme de los problemas.
-No vuelvas a intentar dormirte de esa manera.
Él sonrió y salimos del hospital. El día estaba soleado y no hacia mucho frío. Así que tomamos un taxi hasta el apartamento.
Al llegar, la recepcionista me vio estupefacta.
-Lo siento, por lo del otro día. Una estupidez mía. Estoy bien. Lamento el lío que cause.
Ella asintió con la cabeza y volvió a clavar la vista en unos papeles asustada.
Cuando abrimos la puerta, me sentí en casa. Me sentí tan bien. Nada me hacia más feliz que estar en este apartamento con él.
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♣Adolescentes destruidos☩
Teen FictionDespertó... Pero estaba viviendo una pesadilla. Esta acorralada en su propia mente. Su reflejo es el enemigo. Vomita. No come. Intenta ser perfecta. Pero ahí está el... ¿Empeorando o mejorando su vida? Un amor no del todo sano. Un amor que i...