Cuando el sol empieza a esconderse y el atardecer baña la capital madrileña, Raoul decide volver a su casa. Agoney le acompaña hasta la puerta. Le da miedo volver a quedarse solo. La oscuridad cada vez le hace más daño.
—Cuídate, ¿vale? —le dice y hace una breve pausa. —Llámame si necesitas cualquier cosa.
Asiente. No se lo merece.
—Si en algún momento necesitas el piano, aquí estará —es lo único que le sale decir.
Raoul esboza una sonrisa. Agoney siente su corazón encogerse.
—Lo tendré en cuenta.
Sale de su casa y se desata una tormenta en la ciudad. Raoul se apresura a coger el metro. Agoney se tira en el sofá. Hay calma en su interior. Aunque la casa sigue estando a oscuras.
—No te lo mereces, Agoney —se dice a sí mismo en un susurro. —Vas a hacerle daño.
El delirio. Está roto por culpa de un pasado que va acompañado de pensamientos ensordecedores. De una oscuridad abrumadora.
Su móvil vibra en la mesa del salón. No sabe en qué momento ha pasado una hora y media desde que Raoul se marchó.
Raoul: ¿Todo bien?
Un simple mensaje que puede tener varias respuestas. O fingir o asumir.
Agoney: Sí.
¿Qué tal la tormenta fuera?La respuesta tarda unos minutos en llegar.
Raoul: Me ha calado hasta el alma.
Agoney se lo puede imaginar perfectamente. Las gotas recorriendo sus facciones. La frustración por no haber cogido un paraguas. Madrid nunca deja de sorprender.
Agoney: ¿Te gustan?
Raoul no sabe a qué se refiere.
Raoul: ¿Las tormentas?
Agoney: Sí.
El canario se levanta a prepararse una infusión. Le hacen permanecer más tranquilo.
Raoul: No mucho. Estando solo pueden llegar a darme miedo.
¿A ti te gustan?Puede que quizás le comprenda. Aunque a él le gustan. Le hacen sentirse menos solo.
Agoney: Sí. El repiqueteo de la lluvia en la ventana hace que me sienta acompañado.
Raoul lee su respuesta un par de veces. La curiosidad vuelve a surgirle. Le come la cabeza. Se controla para no preguntar. Se lo prometió.
Raoul: Supongo que en parte tienes razón.
Agoney no sabe qué decirle, y tampoco piensa tirar de una conversación que ya no da más de sí. Vuelve a dejar el móvil en la mesa. La infusión entre sus manos. El sonido de la lluvia tranquilizándole por dentro. Se siente bien.
El móvil vibra. Un nuevo mensaje.
Raoul: ¿Quieres verte una película conmigo?
Agoney lee el mensaje sin entender. No va a salir de su casa con la que está cayendo fuera.
Agoney: No pienso salir de casa, Raoul.
Raoul sonríe.
Raoul: ¿Nunca has visto una película a distancia con alguien?
Agoney: No.
La respuesta tarda unos minutos en llegar. Agoney espera impaciente.
Raoul: Pues ya va siendo hora. ¿Qué te apetece mirar?
Agoney se lo piensa. Hace tiempo que no ve películas. No tiene ni idea.
Agoney: Elige tú.
Raoul busca en netflix alguna película que le llame la atención. Se decide por la trinchera infinita.
Raoul: No sé si te gustará, pero busca en netflix la trinchera infinita.
Agoney le hace caso. Le sobresalta el sonido de la televisión cuando la enciende. Ha roto el silencio sepulcral que había en el piso. No sabe cómo sentirse.
Durante una hora presta atención a la película completamente, aunque es interrumpido por varios mensajes de Raoul preguntándole por su opinión. No le molesta en absoluto. Al fin y al cabo, la idea fue suya.
Raoul: ¿Te está gustando?
Agoney: Muchísimo. Aunque me estoy quedando dormido, es tarde.
Raoul sonríe. Para la película un momento. Se lo puede imaginar. Le gustaría estar ahí.
Raoul: Puedes pararla. Seguimos mañana.
Agoney: Quiero acabarla.
Raoul asiente aunque no pueda verle. Y vuelve a donde lo dejó.
Durante una hora más, ninguno habla. Agoney siente pesados sus párpados del cansancio. Apenas se entera de lo que ocurre. Espera que Raoul le cuente el final mañana.
Raoul: ¿Sigues despierto?
No hay respuesta.
Raoul: Ya te contaré yo el final. Descansa.
Desea poder estar ahí con él. Verle dormir. Saber que está tranquilo. Le inquieta no poder ayudarle.
Necesitará paciencia. Tiempo. Aunque la curiosidad pueda con él.
Le tocará asumir el riesgo.
Lo hará.
Nota de la autora:
Siento un montón no haber subido capítulo el jueves, pero estoy liadísima últimamente. Así que para compensároslo mañana subo otro. Gracias por comentar siempre.Nos leemos pronto 💛
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el chico del metro| ragoney
Fanfiction22:00 p.m. Último metro. Miradas cómplices. Y quedarse con las ganas.