Brothers

Capítulo 30

Acomode mi cabeza en su pecho, su corazón latía lenta y pausadamente mientras el mío parecía un zumbido, latía tan rápido y golpeaba con tanta fuerza a mi pecho que dolía, las palabras que Harry había dicho me habían trastornado.

—Adelante, siéntete como en tu casa, Sullivan— Jake se paró bajo el marco de la puerta y nos miraba con mala cara, no podía imaginar que habría pasado si se hubiera parado en el mismo lugar unos minutos antes, mínimamente la cabeza de Jake no estaría en su lugar, ya que Edward le hubiera dado un paliza, no es que no confiara en la fuerza de mi hermano, es que simplemente era algo que no existía.

—Gracias— respondió el aludido sin mucho interés mientras subía y bajaba su mano por mi espalda —Ya lo hago— la respuesta a su comentario fue un rugido.

—Era sarcasmo— Jacob Reed parecía insultado.

—¿Sí? No lo note— pude sentir el tono de satisfacción de Harry ante la cara de mi hermano, reí un poco, el dolor en mi garganta no me permitía disfrutar de mi vida.

—Como sea— por un momento llegué a pensar que esa había sido un rápida retirada de Jake, usualmente era más intenso —Necesito que estés afuera de esta habitación, quiero hablar con Cassie— me miro a mi como si fuera un asunto de vida o muerte, me imagine lo peor, que Daniel había llegado y vería a Harry con su ropa, lo cual era un asunto delicado para él tanto como lo era para mí. Golpee a Edward al recordar a la perra que uso mi ropa la cual no habían devuelto.

—¡Auch! ¿Eso por qué fue?— se sobaba el brazo mientras yo lo fulminaba con la mirada.

—Sabes el por qué, Sullivan— lo volví a golpear.

—No leo mentes, por si no lo has notado— se paró a un lado de la cama mirándome raro.

—Tal vez— 'la perra', agregue para mí misma al ver a Jake mirándonos divertido, él usaría cualquier situación en mi contra para poder cobrarme favores, estúpidos hermanos —'Lucinda' ¿te refresque la memoria?— el dolor de cabeza me ataco y me deje caer sobre mi almohada llevándome las manos a la cabeza, las fuertes emociones me daban nauseas, en ese momento, Harry me daba nauseas —Odio estar enferma— me queje en un susurro para mí misma.

—Ahh, ella, bueno no la veo desde ese día, por si te interesa saberlo— rasco su nuca.

Eso me irrito, si no la veía desde ese día quería decir que él había perdido mi ropa, las ganas de matarlo me invadieron, pero luego el pensar que no la había vuelto a ver me calmo, él se estaba esforzando por hacer lo que sea que tuviéramos funcionar.

—Está bien— desvié mi atención de él y mire a mi hermano —¿Qué quiere?— sobe mi frente, los chuzones que me estaban propinando no eran nada lindos

—Quiero hablar a solas— su voz fue demandante.

—Si me vas a decir que eres adoptado, ya lo suponía, Daniel y yo hemos discutido esa teoría durante años— bromee un poco tratando de distraer a mi cabeza del dolor.

—Idiota, no es eso— miró mal a Harry por reírse —Lárgate— Edward alzó las manos en señal de rendición y se dirigió a la salida.

—Llámame cuando termines— me guiño un ojo y salió empujando a mi hermano por el hombro.

—Come menos, Sullivan— gritó al pasillo, yo esperaba que no le hiciera caso, me gustaba tal y como estaba.

El irritante individuo entro finalmente a la habitación, cerró detrás de sí y se aproximo a la cama, me empujo para acostarse a mi lado, esperaba que se enfermara por ser tan brusco conmigo.