Brothers

Capítulo 31

—¡Oh por Dios!— cada palabra fue pronunciada alto y pausadamente por tres voces ¿Tres voces? Daniel acababa de atravesar el umbral que separaba el comedor de la cocina y lucia completamente asustado, no podía culparlo, Jacob y yo no lo hacíamos mejor que él.

—Eso fue asqueroso— el gesto de Jake me hizo mirarlo con detalle.

—¿No me digas que lo imaginaste?— le pregunté recargándome en la isla de la cocina, no me creía capaz de acercarme a la canilla cerca de mis progenitores quienes reían.

—Bueno, yo... — se quedo en silencio de repente.

—¡Eew!— Daniel y yo lo miramos con horror, el desgraciado nos hizo proyectar la misma imagen en nuestros cerebros, nada linda por cierto, no soportaba un simple beso de niña, ahora mayor y con una escena tan fuerte.

—No puedo creer que mi mente haya proyectado esa imagen, me las cobrare Jacob Reed, lo prometo— Daniel agarró a Jake del cuello mientras lo amenazaba, su mirada demostraba que tan detallada había sido la escena en su mente.

—Yo no manejo tu minúsculo cerebro, no me puedes culpar— empujo a Dan, pero solo consiguió ahorcarse con el cuello de su propia camisa, en ese momento me cuestione quien era el del cerebro pequeño.

—Yo solo quería agua— bufe, iba a tener pesadillas —Ahora tengo ganas de vomitar y no precisamente por lo mal que me siento— cerré los ojos mientras recostaba mi cabeza en la dura isla de la cocina, al parecer solo hasta ese momento notaron que no me sentía bien ¿Tan mal me veía diariamente? El peinarse no estaba funcionando tan bien como pensaba.

—Veo que no mejoras— escuche la voz de mi mamá a lo lejos —¿Deberíamos llevarla al hospital?— estaba segura que esa pregunta no iba para mí, pero igual respondí.

—Con tal de que cuando salgamos de allá me compren un helado y una hamburguesa, yo apoyo la noción— aun con los ojos cerrados podía percibir la sonrisa en los labios de la mujer que me había dado la vida.

—Quiere comida, no está tan mal, sobrevivirá— ese había sido mi padre, lo deteste un momento, enserio quería un helado y una hamburguesa sin tener que pagar por ello, las cosas gratis eran mejores.

Después de eso me dieron un vaso de agua y me llevaron de nuevo a mi habitación, creo que dormí el resto de noche, sin comer algo más, ese fue un detalle del que me quejaría cuando no estuviera enferma y cansada mentalmente, pero por el momento era la mejor opción para mí.

No tuve noción del tiempo hasta que mi mamá me levanto para almorzar al siguiente día, me había perdido el desayuno, pero me habían permitido no ir a la escuela, todos ganaban.

Tome mi celular de la mesa de noche mientras tomaba un jugo de mango, ya me había bañado y comido algo, simplemente estaba acostada haciendo nada.

Un mensaje de Luke fue lo que me recibió, más uno de Harry. Leí primero el de Sullivan que solo decía un 'Bueno días, nena' ni idea de cuándo me empezó a decir así, pero no iba a discutirlo, eso solo era motivarlo a seguir llamándome así, además no sonaba tan mal.

El de Luke, o los de Luke eran de la noche anterior.

<<Okay ¿Dónde nos vemos?>>, <<¿Me estás ignorando?>>, <<Ya lo entiendo, me vas a dejar plantado>>, <<¿Sabías qué Sullivan lo tiene pequeño?>>, <<Ya me estás preocupando, Cassie ¿Dónde mierda te metiste?>>, <<-.- te odio>>, <<Bueno no te odio, pero contéstame algo.>>

Esos eran los primeros, los demás me dio pereza abrirlos, pero solo había uno de esos mensajes que me dejo pensando.

<<¿Cómo sabes que lo tiene pequeño?>> fue el primer mensaje que le mande, no tuve que esperar mucho la respuesta.