famous luv; kth

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Toda la tarde en la que Namjoon se la pasó en el lugar fue muy entretenido, más de lo que creí.
Les explico, cuando Nam tomó un descanso de treinta minutos, todos se decidieron en ordenar comida y traerla acá. Mientras estábamos comiendo, Jin y Hobi eran quienes sacaban más el tema de mi supuesto enamoramiento con Taehyung. Él no dejaba su sonrisa de lado. Es más, parecía explotar su mequilla por su tan extendida sonrisa rectangular.

Me hacía tan bien verlo así, lo juro.

Pero volvió a pasar...

Tiene novia, Mar, acéptalo.

No pude volver con Nam o algún otro miembro a mi casa ya que para los del staff ya se hacía tarde para ellos y tendrían que estar saludables y bien vistos para el MV que se aproximaba a grabar. Así que me volví en taxi, de nuevo.

Cuando llegué a mi casa, lo primero que hice fue ir a mi cuarto y usar mi celular. Estaba hablando con Gisella. Ella decía que le esta yendo mejor de lo que ella esperaba y que le encanta estar en Italia, que si sigue así probablemente se quede ahí.
Sé que no soy nadie para decidir la vida de mi hermana, pero no podría estar tanto tiempo lejos de ella. Prácticamente estamos juntas desde los pañales, nunca nos separamos así.

Al dejar de hablar con ella me puse a pensar lo que realmente se siente vivir sola.
Claro, al principio parece una vida de ensueño, no más quejas por lo que haces, no más turnos para la ducha o cosas así, nadie más que te moleste, prácticamente. Pero cuando el tiempo pasa, uno ya va extrañando esas cosas, era algo que pasaba a diario y ya se acostumbran, pero es hora de madurar y saber llevar una buena vida de independización

Si Gisella la está pasando bien en otro país, ¿por qué yo no en otra cuidad?

Ya de tantos pensamientos para mi cabeza hicieron que me canse hasta acostarme en mi cama para dormir.

◇

Me volví a despertar temprano, hoy sería el último ensayo de los chicos, pero esta vez sería en otro lugar, porque esta vez grabarían sus pasos para subirlo a YouTube como un dance practice. Me dejaron ir también, así que debía prepararme lo más rápido posible.

Los chicos me pidieron que les volviera a hacer desayunos porque les encantó el de la otra vez. Quería hacérselos hoy, pero el tiempo estaba en mi contra esta vez. Pero no podría conmigo tan fácil; les haría una bebida a cada uno, de nuevo con lo que le gustaría a cada uno. Por ejemplo a Jungkook le llevé su típica leche de plátano, a Jin le llevé un yogurt de frutilla, a Tae chocolate caliente... y así con todos.

Ellos me dijeron que nos encontraríamos en la sala de ensayos de BigHit para ir todos juntos al lugar donde irían a grabar el baile de la canción que deberían grabar mañana. Los chicos deben estar con sus horiarios muy apretados seguramente, por lo que no nos estamos juntando como antes.
Y como acordamos encontrarnos allí, debía irme aún más temprano.

Después de un rato ya estaba lista con mi ropa abrigada y una gorra para mantener mi cabeza en sus temperaturas.

Salí y tomé un taxi, de nuevo.
No les miento, literalmente ya me conozco a la mayoría de los choferes de taxis del lugar.

Al entrar al departamento, vi que el personal de limpieza se encontraba limpiando la entrada del ascensor por las tempranas horas. Me pidieron que suba las escaleras que estaban al lado, y así lo hice.
Al subir, debías apretar un botón rojo para que el ambiente se iluminara temporalmente ya que era muy oscuro a cada paso que dabas.
Estaba en el piso dos, a punto de subir a la tres, pero una música muy peculiar logró ser escuchada por mis oídos detrás de mí.
Prácticamente detrás había una puerta de color café claro casi cerrada, pero de la abertura se veía poco y nada.

¿Eso es... jazz?

Me acerqué de puntitas y abrí lentamente la puerta, sin impotarme con quién o qué me encontraría.

El reconocible cabello azul del chico que estaba de espaldas estaba moviendo su cabeza y tarareando lo que escuchaba. Claro que no se dio cuenta en lo absoluto que me encontraba ahí.
Fui directamente en la silla y lo asusté, haciendo que saque con corto grito y me mire. Abrió más los ojos al verme. Me parece que no se lo esperaba.

– ¿Cómo hiciste para estar aquí?– interrogó una vez calmado.

– No sabía que escuchabas jazz– me senté en otras de las sillas del lugar.

– Sí, bueno, es mi género favorito. Y prefiero que no todos lo sepan.

– ¿Por qué?

Él me mira para luego suspirar, y sonríe.

– ¿Y esa curiosidad de dónde viene?

Sonreí para disimular el posible rubor que se generó. Me parece que Tae se dio cuenta. Me parece que sabe bien lo que me hace, y se aprovecha de eso.

– Vamos a la sala de ensayos, te traje algo que te puede gustar.

Él sonrió y se paró conmigo, todo esto sin decir nada.
Nos fuimos juntos en silencio a la sala, donde que encontraban Nam y Suga.

– ¡Buenos días!– dije entrando, a ambos no se los veía tan bien. Tenían caras como de enojo. – Hey, ¿qué les pasa?

– Muy temprano– pronunció Yoongi, acercándose a la bolsa que traje – ¿Y esto?

– Ábrelo. Hay botellas con el nombre de cada uno, les traje para que tomen para el desayuno.

– Gracias, Mar. En verdad nos hacía falta– sonrió Nam

◇

Despues de un tiempo esperando el coche donde nos llevarían a los ocho, subimos en una especie de casa rodante, el vehículo era gigante y habían muchas cosas alrededor.
Prácticamente en todo el viaje se la pasaron cantando desafinadamente de manera graciosa lss canciones del nuevo álbum.

– Please give me a...

– REMERYYYY– gritaron todos al unísono, tapando mis orejas con mis manos para evitar quedarme sorda.

– ¿Cuánto falta?– preguntó Hoseok mirando hacia el conductor.

– Minutos.

Y sí, el lugar sólo consistía de un ambiente totalmente blanco y espacioso. Era lindo pero hacía mucho más frío aquí que afuera.

Grabaron el primer video. Todo bien con eso porque seguía con la emoción del uso de mi paso al azar.
Digi primer video porque se les ocurrió hacer uno en versión 'contacto visual' era más gracioso y los chicos miraban más a la cámara y más de cerca. Aquella fue una idea genial.

Después de terminar de grabar, tomaron litros de agua. Los dueños del lugar aseguraron que detrás había un pequeño jardín, así que nos adentramos en él.

Todo lindo. Pero el mío es más grande y lindo.