COMPLETADA
James Sirius Potter, el típico chico popular y engreído de la escuela que tiene a todas las chicas a sus pies y que tiene una vida perfecta.
Arianna Blair Marsh, la típica chica inteligente e impulsiva que siempre llama la atención aunqu...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Narra Arianna:
— Me cae bien esa chica— dijo James— enserio, seríamos muy buenos amigos.
— La verdad es que parece graciosa— dije— pero yo pienso que por estas páginas no va a haber mucha información, creo que tendremos que avanzar algo.
— Tienes razón, ojeemos el diario hasta que veamos algo interesante y cuando leamos algo interesante lo apuntamos— sugirió Eleanor a lo que los demás asentimos.
Entonces fuimos ojeando página por página. Más o menos contaba sobre las travesuras que hacía, algo que me daba ideas para hacerle a los Merodeadores.
Íbamos ojeando sin descanso, aunque cuando contó que convirtió a la señorita Norris en un gusano no pudimos parar de reír, y por ello perdimos unos 5 minutos.
Eleanor iba apuntando los datos más importantes de ella. En ellos estaba: que era sangre limpia; le intentaron obligar a ser mortífago, pero ella le vaciló a Voldy; tenía un mellizo llamado Carlos; fue amiga de Hannah Black, Payton Cooper, los gemelos Weasley, Noah Donovan, Blaise Zabinni, Theodore Nott, Daphne Greengrass, entre otros; su mejor amiga era Arianna Grace Moore y junto a su mellizo eran un trío tan inseparable como el trío de oro; etc.
Aún nos faltaba la mitad del diario, y como era muy tarde decidimos que quedaríamos el domingo siguiente para terminar de leerlo.
Así que Potter y yo fuimos hacia la torre de Gryffindor mientras Ele iba hacia a la de Ravenclaw. Caminábamos charlando, bromeando y picándonos entre nosotros.
— Sabes que yo soy el más perfecto de Hogwarts y lo sabes— dijo él con muchísima arrogancia.
— Si, y luego despiertas.
— Ey Pequitas, tranquilízate.
— Espera ¿me has llamado Pequitas? ¿Tan poca imaginación tienes?
— Si a partir de ahora te llamaré Pequitas.
— Es horrible el apodo, Jamie.
— Lo que es espantoso es Jamie, enserio es horrible.
— Pues si dejas de llamarme "Pequitas" yo te dejaré de llamar Jamie.
— Eso nunca.
— Pues ya sabes la respuesta.
Al final llegamos llegamos a la sala común y nos despedimos y me fue a mi dormitorio a intentar dormir. Aunque me costó menos que de costumbre.
Al día siguiente me levanté y me cambié, contemplé mi nuevo cabello— que la verdad me quedaba bien —y como todos los días bajé a desayunar con mis amigas. Llegué a la mesa y me coloqué en mi sitio, que estaba entre Molly y Betty.
Me serví un zumo de naranja con unas tostadas con mermelada y una manzana. Empezamos a hablar de las clases que teníamos ese viernes. En esa conversación se nos unieron Lilu y Alexa, y ellas la verdad es que las materias que tenían eran horribles. Enserio tenían a última hora Historia de la Magia. Me compadecí de ellas la verdad.
